Por OPI Santa Cruz
La orden fue rápida y efectiva: poner rejas de 2,40 de alto en todo el frente de Casa de Gobierno. Rápidos los manifestantes comenzaron a colgar carteles. Un paisaje variopinto, con frases llamativas y graciosas dibujó esta tarde un panorama colorido en un hermoso día de otoño donde no faltó el sol, el mate, las galletitas y mucha alegría por parte de los trabajadores que hacen el aguante en la carpa.
En muy poco tiempo el gobierno colocó un pesado y alto enrejado de 2.40 mts frente a la casa de gobierno.
Mientras los gritos arreciaban de parte de los docentes y gente de ATE que se encontraban haciendo una batucada, silenciosa pero rápidamente los obreros cubrieron todo el frente del palacio de gobierno con pesados marcos con una gruesa malla de hierro en su interior. Los residentes de la carpa blanca aludían que fueron construidas en la empresa AUSTRAL Construcciones del empresario Lárazo Báez.
Inmediatamente de terminada la colocación del enrejado, los docentes se agolparon sobre el enrejado y comenzaron a colgar pancartas, pasacalles y carteles de todo tipo.
La gente en un número aproximado a los 300, estaban diseminados por la calle Alcorta, algunos tomaban mate, otros café, otros encendían el fuego, algunos chicos jugaban y grupos aislados conversaban de temas relacionados con el paro mientras otros con fibrón en mano descargaban todo su arte y su bronca en ingeniosos carteles.
Por su parte una ruidosa corona de gente, mayormente integrado por personal de ATE hacía sonar los bombos y los redoblantes en ritmo de batucada.
Así permanecen en la carpa blanca aún, mientras en la Escuela Nº 47 los delegados y la dirigencia del gremio debaten sobre los pasos a seguir en el conflicto, con el agregado de tener en sus manos la conciliación obligatoria dispuesta por la Subsecretria de Trabajo Elsa Capuchinelli.
"Ahora sí que estos (…) terminan de separase de nosotros ", dijo un docente mientras batía el parche de su bombo, refiriéndose a la actitud de distanciamiento del gobierno que queda simbólicamente expresada al mandar a colocar el enrejado.
La policía prosigue su vigilia, ahora detrás de las rejas y por detrás de ellos los efectivos del GOE y la Gendarmería permanecen vigilando que nadie transponga el paredón del palacio gubernamental, que de acuerdo a las propias manifestaciones del Jefe de Policía Wilfredo Roque, es el límite que tiene la fuerza para actuar. (Agencia OPI Santa Cruz)
La orden fue rápida y efectiva: poner rejas de 2,40 de alto en todo el frente de Casa de Gobierno. Rápidos los manifestantes comenzaron a colgar carteles. Un paisaje variopinto, con frases llamativas y graciosas dibujó esta tarde un panorama colorido en un hermoso día de otoño donde no faltó el sol, el mate, las galletitas y mucha alegría por parte de los trabajadores que hacen el aguante en la carpa.
En muy poco tiempo el gobierno colocó un pesado y alto enrejado de 2.40 mts frente a la casa de gobierno.
Mientras los gritos arreciaban de parte de los docentes y gente de ATE que se encontraban haciendo una batucada, silenciosa pero rápidamente los obreros cubrieron todo el frente del palacio de gobierno con pesados marcos con una gruesa malla de hierro en su interior. Los residentes de la carpa blanca aludían que fueron construidas en la empresa AUSTRAL Construcciones del empresario Lárazo Báez.
Inmediatamente de terminada la colocación del enrejado, los docentes se agolparon sobre el enrejado y comenzaron a colgar pancartas, pasacalles y carteles de todo tipo.
La gente en un número aproximado a los 300, estaban diseminados por la calle Alcorta, algunos tomaban mate, otros café, otros encendían el fuego, algunos chicos jugaban y grupos aislados conversaban de temas relacionados con el paro mientras otros con fibrón en mano descargaban todo su arte y su bronca en ingeniosos carteles.
Por su parte una ruidosa corona de gente, mayormente integrado por personal de ATE hacía sonar los bombos y los redoblantes en ritmo de batucada.
Así permanecen en la carpa blanca aún, mientras en la Escuela Nº 47 los delegados y la dirigencia del gremio debaten sobre los pasos a seguir en el conflicto, con el agregado de tener en sus manos la conciliación obligatoria dispuesta por la Subsecretria de Trabajo Elsa Capuchinelli.
"Ahora sí que estos (…) terminan de separase de nosotros ", dijo un docente mientras batía el parche de su bombo, refiriéndose a la actitud de distanciamiento del gobierno que queda simbólicamente expresada al mandar a colocar el enrejado.
La policía prosigue su vigilia, ahora detrás de las rejas y por detrás de ellos los efectivos del GOE y la Gendarmería permanecen vigilando que nadie transponga el paredón del palacio gubernamental, que de acuerdo a las propias manifestaciones del Jefe de Policía Wilfredo Roque, es el límite que tiene la fuerza para actuar. (Agencia OPI Santa Cruz)
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