viernes, junio 16, 2006

Hoy ganó el fútbol, perdió la memoria

Por Ricardo Bustos

Hoy millones de argentinos salieron a las plazas de cada pueblo y cada ciudad a festejar el impecable triunfo del seleccionado de futbol en la copa del mundo.

Sin embargo, poco,....muy poco espacio quedó en los medios de comunicación, en las aulas de las escuelas, en las mesas de café, para recordar y aprender de una fecha que debería de estar grabada en la memoria colectiva de cada argentino, como una de las fechas más vergonzosas de nuestra historia, cuando unos pocos militares armados y en nombre vaya a saber de qué razón, mataron a cientos de otros argentinos indefensos que concurrieron a la Plaza de Mayo para defender un gobierno constitucional -que jaqueado por varias razones propias y muchas conjuras ajenas- estaba siendo atacado por el poder de los irracionales violentos de aquella época.

Hoy se cumplen 51 años de aquel jueves gris y frío en que aviones de la Marina bombardearon Plaza de Mayo para matar al presidente Peron y también a quienes estuvieran allí entre las 12:00 y las 18.50.

Fueron más de 350 los muertos en aquel vergonzante día y más de 800 los heridos.

Tantas veces se alzan voces alarmadas por lo poco y mal que se enseña en nuestras escuelas.

Tanto se habló durante las últimas semanas, diciendo que en realidad los partidos del seleccionado argentino de futbol serían una oportunidad para que nuestros jóvenes conozcan más de la historia mundial, de la geografía de los paises representados, etc. etc. etc. bla bla bla bla.

Mentira,....en niguna escuela hubo tiempo hoy para explicar nada de nada, más allá de los bellisimo goles de los jugadores argentinos.

Hay tiempo para todo, es cierto. Hoy fue una jornada bellamente felíz para los amantes del futbol.

Sin embargo hoy también hubiera sido una jornada sumamente apropiada para aprender de nuestra historia y reconocernos en aquellos hechos del pasado.

También por estos días, pero en 1982, mientras unos pocos soldados argentinos combatíamos lejos del continente para recuperar militarmente una parte de nuestro territorio, el grueso de nuestros conciudadanos miraban anestesiadamente las imagenes de un mundial de futbol que nos parecia más cercano que las noticias de guerra provenientes de Malvinas.

Así somos.

No es casual que así nos vaya. Bienvenidos los triunfos deportivos. Bienvenidas las calles embanderadas de celeste y blanco.

Sin embargo - y mal que nos pese- un contundente triunfo futbolistico no determina nuestro éxito como Nación.

Y en esto de darle pan y circo a la gente en lugar de ayudarle a tener memoria para mirar con adultez el futuro, los medios de comunicación y los periodistas, tenemos mucha responsabilidad.

2 Comentá esta nota:

Anónimo dijo...

sos un amargo, vos sabès todas esas fechas porque como trabajàs en radio tenès un machete de efemèrides, ¡amargo!

Somanìa dijo...

sos un amargo, vos porque tenès el machete de las efemèrides y ves toda la reverenda uebada en bote.

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