A los pu peñi ka pu lamién
A la sociedad civil organizada y en lucha
A los pueblos que empiezan a despertar
A las mujeres insurgentes y en rebeldía
A los que caminan junto a nosotros
A los que han avanzado mas
A los que vienen atrás respetando sus tiempos
Queremos compartir estos hechos con ustedes:
En la segunda semana de enero se llevó a cabo la inauguración de la escuela autónoma mapuche y campesina, Manuel Aburto Panguilef. Se convocaron a las comunidades de Puelmapu (Argentina) pero sin el compromiso de pagar pasajes o contratar vehículos para el traslado (a diferencia de muchas organizaciones mapuche que funcionan gracias al financiamiento de las Ongs, o con fondos de los gobiernos). Hace tiempo que nosotros hemos reflexionado que la autonomía es algo que se construye día a día que involucra compromiso, y mucho sacrificio, es así que fueron pocas las comunidades representadas. Hubo hermanos que vinieron a dedo desde largas distancias, quedando varados en el camino porque no conseguían que nadie los levante y los lleve hasta la comunidad. Otros a pesar de las visicitudes se hicieron presentes, pero hubieron muchos también que se quedaron esperando el asistencialismo de algún gobernante que pusiera a disposición de ellos un vehículo, cosa que nunca sucedió.
Compañeros de diversas organizaciones llegaron hasta nuestra comunidad, compartiendo con nosotros la alegría de este acontecimiento histórico. Más de un centenar de personas confluimos en el evento, sin embargo, la alegría y la ansiedad se evaporaron y hubo en aquellas primeras horas de desarrollo del encuentro una extraña sensación de incomodidad entre todos los peñi ka pu lamién presentes. Hubo quienes soñaron en esos días anuncios tristes y desalentadores, esta sensación de extraña incertidumbre se tornó en preocupación cuando las ancianas mapuche (pillankushe) tras haber levantado ceremonia, fueron llevadas a su comunidad por dos hermanos mapuche y una compañera. Tras dejar a las ancianas, y ya de regreso, volcaron, afortunadamente sin daños físicos pero con una total averiación del auto.
Ante hechos como estos la cultura dominante pasa del escándalo al olvido, la frase habitual para estos casos es: “por suerte no fue nada... la fiesta continúa”, pero desde nuestro saber ancestral entendimos que sí había sucedido algo grave que nos obligaba: a parar, a reflexionar, a intentar discernir qué nos decían los pu newen con esto. Las fuerzas de la naturaleza nos estaban hablando y sacudiendo. Tras un largo trawun que duró desde la tarde hasta la madrugada, llegamos a la conclusión que se debía realizar la ceremonia correcta para solicitar permiso a la naturaleza, a los espíritus que viven aquí, al espíritu de Manuel Aburto Panguilef, y que para ello debíamos parar el normal desarrollo del programa de la escuela para reordenarnos desde nuestra normativa mapuche. Así lo comunicamos a todos los compañeros que comprendieron y se solidarizaron con nosotros, no obstante el curso de construcción natural se llevó adelante con la concreción de la cocina taller para la escuela.
Nos tomaremos el tiempo que sea necesario para organizar la ceremonia, ya que para nosotros es mucho más importante escuchar las voces de la naturaleza que la de los mediocres funcionarios de turno que hoy ríen vaticinando el fracaso. Tampoco nos importan, ni atendemos las voces de los personajes funcionales al sistema, defendemos la autodeterminación como un ejercicio y no como una demanda, y seguiremos construyendo en función de esto.
En cuanto a los alumnos seguimos esperándolos a quienes aún hoy están indecisos, escriban a pillanmahuiza@yahoo.com.ar. Les recordamos que la convocatoria es exclusivamente para jóvenes y adultos mapuches. Y a los kimches, poseedores del conocimiento, quienes van a compartir con nosotros sus saberes, les pedimos paciencia, pronto avisaremos la fecha en la que podrán estar entre nosotros.
Desde
Construyendo una educación autónoma, identitaria, rebelde y liberadora, los abrazamos con un fuerte marici weu!!!
Comunidad Mapuche Pillán Mahuiza
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