Enviado por Néstor AlmagroEl 22 de Mayo a las 23 horas se emitió por TELEFE el programa “La Liga”, abriendo la temporada 2007 de ese prestigioso ciclo.
Para comenzar esta nueva etapa (con algunos cambios, ya que Malnatti se dedica a conducir “El Ciudadano” y fue reemplazado por el simpático Ronnie Arias), la producción eligió, con gran acierto, el tema de la explotación minera en San Juan.
Es de destacar la presencia de un prestigioso científico argentino, el Dr. Raúl Montenegro, biólogo, presidente de FUNAM y premio Nóbel alternativo 2004.
También contó con la asistencia de dos destacados colaboradores: Rodrigo Noya y Diego Alonso, ambos muy solventes en lo suyo.
En líneas generales esta nueva entrega mostró un enfoque menos sarcástico y más serio que los ciclos anteriores. Los personajes jugaron sus papeles con mucha personalidad y gran sensibilidad por la salud de la población sanjuanina, sin dejar de lado el severo espíritu crítico que siempre caracterizó a este programa.
El lenguaje utilizado fue muy sencillo y al alcance del gran público, para facilitar la comprensión de un tema extremadamente técnico y complejo como es el de la minería y por sobre todo se logró un impacto emocional auténtico sobre la audiencia, con imágenes y comentarios de los verdaderos damnificados de estos emprendimientos, como son los habitante de la zonas cercanas a las minas.
Ronnie Arias hizo un gran esfuerzo personal al escalar los andes en condiciones muy difíciles y absolutamente nuevas para un habitante de la llanura.
Diego Alonso realizó visitas a los pobladores de la zona con reportajes muy respetuosos y afectivos, que lograron abrir los corazones de esa gente dura y curtida por un clima agreste, quienes además deben soportar las penurias de la contaminación, la falta de agua y las enfermedades.
María Julia Oliván, muy profesional como siempre, llegó hasta el corazón de la mina a mas de 4.000 metros sobre el nivel del mar y luego entrevistó al difícil Gobernador Gioja (personaje nefasto si los hay), dejándolo en evidencia sobre su connivencia con las mineras y su mentiroso discurso de la “minería responsable y no contamminante”.
Por último debemos destacar la lucida y acertada intervención del jovencito y brillante actor Rodrigo Noya, quien tuvo a su cargo la narración de los hechos y varios diálogos muy jugosos, especialmente con el Dr. Montenegro, quién merece una mención especial, por su lenguaje claro y preciso, al explicar las consecuencias de la depredación de nuestra cordillera por parte de las mineras (Barrica Gold en este caso).
Solo me resta felicitar a la producción del programa por tan lucida expresión de una televisión educativa y defensora de nuestro patrimonio nacional.
José Jorge Aldecoa
jorgealde@hotmail.com
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