Por UNTER
Sobre un relevamiento en ocho escuelas de El Bolsón, la Unter local reveló que existen más de 15 cargos docentes sin crear, algunos de ellos pedidos hace más de un año.
En el CEM 94, por ejemplo, faltan dos cargos de preceptor desde principios de año, en tanto que en el CEM 119 de Mallín Ahogado falta nombrar también un preceptor y deben crearse cargos de un referente de informática y un bibliotecario.
Tampoco hay, desde hace meses, bibliotecario en el turno tarde del CEM 10.
Por otro lado, la ausencia de un cargo de maestro especial de educación plástica, desde abril de 2006, complica el trabajo de maestras y maestros en la escuela céntrica 268.
Anomalías similares se viven en la escuela 337 del barrio Usina, donde aún no se han nombrado docentes para un cargo de plástica de turno tarde y otro de informática, desde inicios de año.
La escuela rural 139 sufre también la desidia estatal por la falta de un maestro integrador, desde fines de octubre, con lo cual nueve chicos, uno de ellos con síndrome de down, están siendo abandonados en sus necesidades especiales por el Ministerio de Educación rionegrino.
Ante esta realidad, la comunidad educativa de la escuela 139 se encuentra evaluando la posibilidad de recurrir a vías legales.
En el jardín 21 faltan dos preceptores, uno por cada turno, situación que significa para las maestras una sobrecarga de trabajo y para los chicos el aumento de riesgos de accidentes.
Asimismo se pidió desde el jardín, en conjunto con la escuela 140 y padres de ambas instituciones, el nombramiento de un sereno para evitar que entren extraños durante la noche.
En la escuela 270, por su parte, faltan 2 horas especiales de música y educación física, en cada turno, y aún esperan la creación de un cargo de referente de informática para ambos turnos.
También se informó desde ese establecimiento la necesidad de nombrar a un bibliotecario, demanda recurrente en otras primarias.
La escuela 271 requiere un referente de informática para la sala de computación que, luego de años, finalmente ha sido instalada.
A esto hay que sumarle la situación de precariedad laboral dentro del personal no docente, como las más de treinta cocineras, en escuelas de la zona, que cobran aún sólo 300 pesos en negro.
“Le toman el pelo a la gente”
“Este desinterés del gobierno rionegrino, además de pasar por encima de los derechos docentes, es una tomada de pelo a la comunidad, condenada así a no contar con una educación pública de primera”, reflexionaron dirigentes de la Unter local.
“Por un lado ‘se ahorran’ sueldos, perjudicando la calidad educativa en nuestras escuelas, y por otro lado tenemos funcionarios que cobran dos salarios y las Delegaciones de Educación con personas que cobran sueldos y nadie sabe qué hacen; la comunidad de El Bolsón puede sacar sus propias conclusiones”, contrastaron los sindicalistas.
Sobre un relevamiento en ocho escuelas de El Bolsón, la Unter local reveló que existen más de 15 cargos docentes sin crear, algunos de ellos pedidos hace más de un año.
En el CEM 94, por ejemplo, faltan dos cargos de preceptor desde principios de año, en tanto que en el CEM 119 de Mallín Ahogado falta nombrar también un preceptor y deben crearse cargos de un referente de informática y un bibliotecario.
Tampoco hay, desde hace meses, bibliotecario en el turno tarde del CEM 10.
Por otro lado, la ausencia de un cargo de maestro especial de educación plástica, desde abril de 2006, complica el trabajo de maestras y maestros en la escuela céntrica 268.
Anomalías similares se viven en la escuela 337 del barrio Usina, donde aún no se han nombrado docentes para un cargo de plástica de turno tarde y otro de informática, desde inicios de año.
La escuela rural 139 sufre también la desidia estatal por la falta de un maestro integrador, desde fines de octubre, con lo cual nueve chicos, uno de ellos con síndrome de down, están siendo abandonados en sus necesidades especiales por el Ministerio de Educación rionegrino.
Ante esta realidad, la comunidad educativa de la escuela 139 se encuentra evaluando la posibilidad de recurrir a vías legales.
En el jardín 21 faltan dos preceptores, uno por cada turno, situación que significa para las maestras una sobrecarga de trabajo y para los chicos el aumento de riesgos de accidentes.
Asimismo se pidió desde el jardín, en conjunto con la escuela 140 y padres de ambas instituciones, el nombramiento de un sereno para evitar que entren extraños durante la noche.
En la escuela 270, por su parte, faltan 2 horas especiales de música y educación física, en cada turno, y aún esperan la creación de un cargo de referente de informática para ambos turnos.
También se informó desde ese establecimiento la necesidad de nombrar a un bibliotecario, demanda recurrente en otras primarias.
La escuela 271 requiere un referente de informática para la sala de computación que, luego de años, finalmente ha sido instalada.
A esto hay que sumarle la situación de precariedad laboral dentro del personal no docente, como las más de treinta cocineras, en escuelas de la zona, que cobran aún sólo 300 pesos en negro.
“Le toman el pelo a la gente”
“Este desinterés del gobierno rionegrino, además de pasar por encima de los derechos docentes, es una tomada de pelo a la comunidad, condenada así a no contar con una educación pública de primera”, reflexionaron dirigentes de la Unter local.
“Por un lado ‘se ahorran’ sueldos, perjudicando la calidad educativa en nuestras escuelas, y por otro lado tenemos funcionarios que cobran dos salarios y las Delegaciones de Educación con personas que cobran sueldos y nadie sabe qué hacen; la comunidad de El Bolsón puede sacar sus propias conclusiones”, contrastaron los sindicalistas.
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