Por Héctor (Meir) Soae *
Los invito a compartir mis haikus nºs 98, 99 y 100. Éste último, lo escribió, creo, el sonido de la mágica lluvia que aflojó el incendio.
No podía tener mejor celebración para mi centésimo haiku del blog: http://meirlauquen.blogspot.com/
* LE 4544140
CENTESIMO
Mi haiku de blog nº 100, llega con una bendita lluvia que milagrosamente, después de meses de sequía, aplacó un terrible incendio, que se llevó miles de hectáreas de invaluable bosque nativo del Parque Nacional Los Alerces, aquí en Esquel, Chubut, Argentina.
El daño es inmenso, pues afectó a especies a las que les lleva más de medio siglo llegar a su porte natural.
La alegría de esta lluvia, debe estar compartida desde el Cielo, por Chico Mendes, mártir de la Amazonia, uno de los primeros asesinados tratando de defender su querida foresta amazónica, que aún hoy, un siglo después, se sigue quemando por cuenta de terratenientes ávidos de tierra y commodities.
Queridos visitantes, lluvia de bendiciones para todos,
Meir
Haiku C
Lluvia consuelo.
Las brasas sisean:- ¡Tú!
El hombre llora.
Haiku XCIX
Fuego Inicial.
Luego Aguas, la Vida.
No quiero volver.
Haiku XCVIII
Incendio cruento.
Arboles, sueños, almas.
Hombre Cenizas.
Los invito a compartir mis haikus nºs 98, 99 y 100. Éste último, lo escribió, creo, el sonido de la mágica lluvia que aflojó el incendio.
No podía tener mejor celebración para mi centésimo haiku del blog: http://meirlauquen.blogspot.com/
* LE 4544140
CENTESIMO
Mi haiku de blog nº 100, llega con una bendita lluvia que milagrosamente, después de meses de sequía, aplacó un terrible incendio, que se llevó miles de hectáreas de invaluable bosque nativo del Parque Nacional Los Alerces, aquí en Esquel, Chubut, Argentina.
El daño es inmenso, pues afectó a especies a las que les lleva más de medio siglo llegar a su porte natural.
La alegría de esta lluvia, debe estar compartida desde el Cielo, por Chico Mendes, mártir de la Amazonia, uno de los primeros asesinados tratando de defender su querida foresta amazónica, que aún hoy, un siglo después, se sigue quemando por cuenta de terratenientes ávidos de tierra y commodities.
Queridos visitantes, lluvia de bendiciones para todos,
Meir
Haiku C
Lluvia consuelo.
Las brasas sisean:- ¡Tú!
El hombre llora.
Haiku XCIX
Fuego Inicial.
Luego Aguas, la Vida.
No quiero volver.
Haiku XCVIII
Incendio cruento.
Arboles, sueños, almas.
Hombre Cenizas.
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