miércoles, mayo 07, 2008

Cenizas: el volcán Chaitén y una visión sobre “la enérgica expresión de la naturaleza”


Enviado por Avkin Mapu

Canillo es un tipo de Weza Newen, -energía opuesta-. presente en la naturaleza y por ello en el hombre mismo, especialmente en el hombre blanco y en los huilliche que olvidan su tradición. Canillo se agranda y se le asocia al concepto de la energía negativa del agua y de la zona de los volcanes. Conozca su leyenda y medite. Impactantes son las imágenes que nos llegan de la zona de Chaiten a propósito de la reacción de la naturaleza mediante la explosión del volcán, expresión de la fuerza del desequilibrio opuesto y que ha significado el desalojo total de sus habitantes, estos sin saber exactamente por qué suceden estos eventos de la naturaleza.

*Por Elías Paillan C.

El Pueblo Mapuche mediante la sabiduría de la identidad huilliche –gente del sur- tiene su propia explicación. Y esta asociada íntegramente a la cosmovisión, esa forma propia de entender y comprender el mundo, de las expresiones de la naturaleza y por eso su respeto y cuidado.

Una hipótesis desde el punto de vista del Rakizuam Mapuche Huilliche –pensamiento de la gente de la tierra y del sur- es que el gran Canillo y los Gen se han puesto de acuerdo para expresar su malestar y descontento para espantar a aquellos que destruyen su hábitat, con la aniquilación de las vertientes y aguas, las plantas, los ríos, las montañas, los mares que no es mas que su hogar y el hogar de todos.

Canillo es un tipo de fuerza negativa opuesta y presente en la profundidad de la naturaleza y por ello en el hombre mismo, especialmente en el hombre blanco y en los huilliches que olvidan su tradición. Se le asocia al concepto de la energía del Weza Newen – energía negativa-, fuerzas del desequilibrio, de lo opuesto, que se agranda y que existe en el agua.

Por su parte los gen -dueños-, son los encargados de proteger y cuidar los distintos elementos de la naturaleza. Así tenemos los gen ko –dueño de las aguas-, gen mawiza –dueños de las monatañas-, gen dvgvñ -dueño de los volcanes-, gen kura -dueño de las piedras-, gen liwen -dueño de los arbles-, sería estos gen quienes se han puesto de acuerdo con el Canillo expresar su rabia.

Según el conocimiento de nuestros antiguos, este newen –fuerza-, del Canilllo presente en la naturaleza, esta representada en un niño poseído, que crecería y estiraría su cuerpo hasta hacerse gigante, tal como se expresa en la gran cantidad de humo y cenizas visible a gran distancia en Chaiten.

Piam, relato mapuche huilliche

Dicen que Canillo fue hijo de una mujer que provenía de la zona de volcanes, en tiempos muy antiguos; siendo abandonado al momento de nacer. Se dice que el niño fue encontrado por un matrimonio anciano que vivían cerca del lago Ranco; y que este matrimonio solo tuvo y crió a este niño como hijo. Extrañamente este niño no creció nunca, y siempre comía, y por ello le pusieron el nombre Canillo, "una persona que no se llena", (aunque fonéticamente el nombre debería ser “Apokenolu”).

Se dice que a los veinte años el niño todavía era un bebé; el cual sólo se sentaba, y nunca se arrastraba, y por lo mismo no hacía nada, solo comer. Igualmente se dice que era un bebé muy sucio y tenían que estarlo lavando continuamente.

Además, sucedía que cuando sus padres adoptivos salían a trabajar, dejando a Canillo en la ruca –casa mapuche-, al volver siempre encontraban que había mucho daño en su casa y faltaba el alimento; y sin embargo Canillo estaba tranquilo y sin ningún daño o herida, o muestra de preocupación por los daños que sufría su hogar.

Pero como Canillo no caminaba y como ellos guardaban sus alimentos fuera del alcance de su hijo, lo más lógico era que otra gente o un animal, como un gato, era el causante del desorden y quién llegaba siempre a comerles su comida. Además, este hecho los preocupaba ya que este alimento era muy necesario; debido principalmente a que Canillo siempre estaba pidiendo que le den comida, ya que este nunca calmaba su hambre.

Un día, llegaron cansados, envolvieron su bebé y se acostaron con él, y se dice que estaban durmiendo cuando en la noche sintió ella que Canillo se sentó en la cama, el padre estaba durmiendo; y ella sintió como él niño les pasaba la mano por la cara, y a ella le dio un poquito de miedo, pero se quedó quieta. Luego observó asombrada como Canillo comenzaba a crecer hasta ser adulto y gigante, y vio como destapaba la olla que tenían colgada en la ruca, y se comía toda la comida.

Como la ruca era una casita de paja, canillo luego de comer, comenzó a abrir el techo y mirar hacia fuera. En ese momento, cuando estaba mirando, ella aprovecho de despertar a su marido, y bien despacio le dijo que aquel ser era su hijo, y que esto demostraba que ese niño no era un hijo bueno. Entonces él le respondió a su mujer "quedémonos quietos y hagámonos los dormidos", luego de eso vieron como Canillo volvía a transformarse y quedar como un bebé.

Al otro día los padres lo levantaron y le dieron su desayuno, le cambiaron de ropa, y se fueron a su trabajo. Ahí estuvieron conversando qué cosa iban a hacer con él, de matarlo o botarlo por ahí, entonces la mujer dijo: "lo que vamos a hacer no es matarlo, pues puede ser peligroso; pero lo vamos a botar al agua, lo vamos a tirar en el lago de Ranco, para que se muera ahí".

Al día siguiente mientras Canillo dormía, se lo llevaron y lo lanzaron al lago Ranco. Dicen que se fue a fondo y después salió a flote, y el niño empezó a nadar y a burlarse de sus padres. Aterrorizados por la escena, ellos se arrancaron, y se fueron a buscar las cosas a su casa y se fueron; llegaron a otra casa vecina, y ahí contaron lo sucedido.
Al otro día fueron a ver con los vecinos, y observaron un tronco gigante de pellín atravesado en el lago, y veían como el agua se desbordaba y corría, empezando a afectar a los vecinos. Alarmados llamaron a las Machi –mujeres médicas-, y ellas, mediante el uso de su poder, recogieron ese trozo de madera haciendo machitun –ceremonia de sanación-, y así lo recogieron hecho un niño.

Al verlo sus padres dijeron que ese niño era Canillo y era maligno. Es así como las machi luego de escuchar lo que tenían que contar los ancianos, decidieron llevarlo donde el abuelito Huenteao, y dejar preso a Canillo, en las rocas islas junto al abuelito, en la bahía de Pucatrihue, para que no saliera nunca más, y se quedara a vivir ahí y no hiciese daño al pueblo Huilliche.

Posteriormente, se dice que en esta prisión el Canillo se casó con una hija del abuelito Huenteao. Se dice que Canillo, en ciertas ocasiones, puede escapar cuando el agua esta calmada atravesando como un trozo de madera; pero como está casado debe volver a su prisión.

Ciertamente esta vez Canillo fue más allá del agua calmada y se expresó a través del volcán haciendo una verdadera llamada de atención, a aquellos que destruyen nuestra tierra, mediante la construcción de centrales hidroeléctricas, caminos, puentes, etc, en definitiva a quienes no respetan y cuidan del medio ambiente.

Espero que el hombre winka, no sólo se quede con su típica mirada científica, de que un volcán más explotó, sino, considere de una vez por todas, el pensamiento y el conocimiento ancestral de las naciones originarias y en particular de la visión de mundo mapuche, que históricamente ha sabido encontrar la explicación a los eventos de la naturaleza, aprendiendo a convivir en armonía con ella.
* Comunicador Social y Periodista. Conductor del programa Wixage Anai en Radio Tierra; y miembro del equipo de comunicación del Observatorio de Derechos de Pueblos Indígenas.

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