César Mac Karthy, intendente de Trelew
Por José María Ramón *
Buena parte de la explicación sobre los motivos del subdesarrollo de las democracias latinoamericanas la encontramos en la endemia que acompaña a su clase política, fanática de acomodar en cuanto se le presenta la oportunidad, principios generales perdurables a sus necesidades particulares de coyuntura.
Sin otro argumento más que su circunstancial condición de mayoría, el PJ de Trelew dio hoy un paso más en su obstinación por roer y copar todas las instituciones de control de nuestra democracia local. Eludiendo la Comisión de debate correspondiente, sobre tablas modificó en la sesión de hoy la composición del Tribunal Electoral Municipal quedándose automáticamente con la mayoría de sus integrantes.
De acuerdo con la ordenanza vigente, el Tribunal debió quedar conformado por tres representantes por la mayoría (PJ), dos por la primera minoría (PROVECh) y uno por cada una de las restantes fuerzas políticas con representación legislativa (UCR y ARI). Es decir, tres para el que gobierna y cuatro para el total de las minorías.
De este modo, si la mayoría quisiera modificar las normas o tomar resoluciones a partir de interpretaciones unilaterales, no podría hacerlo, ya que necesariamente debería convencer a alguna de las minorías para alcanzar la mitad más uno de los votos del Tribunal; o por el contrario, si fuesen las minorías quienes pretendiesen avanzar con los cambios a través de un consenso contramayoritario, requeriría de ellas un importante esfuerzo de negociación democrática.
Esos equilibrios institucionales previstos para evitar abusos de poder quedaron hoy esquilmados. El intendente Mac Karthy considera que como él ganó las elecciones debe tomar todo, y que no necesita de nadie para gobernar. A partir de la fecha el Tribunal Electoral tendrá cuatro integrantes por la mayoría y tres por las minorías y punto. En el corto plazo el PJ no tendrá que perder el tiempo con la tediosa labor de persuadir a las minorías con mejores argumentos.
Es posible que muchos ciudadanos desconozcan las funciones de este organismo, pero entre sus responsabilidades se encuentran las tareas no menores de conformar los padrones electorales, oficializar los partidos políticos municipales, convocar a elecciones, proclamar a los candidatos electos, organizar, dirigir y hacer el escrutinio en elecciones generales y parciales, de las Asociaciones Vecinales y en ocasión de Revocatorias de mandatos, Iniciativas Populares, Referéndums y Plebiscitos. En síntesis, una porción relevante de las reglas de juego de la democracia.
Al igual que el Organismo Municipal Regulador de los Servicios Públicos, en el que sus integrantes debiendo ingresar por concurso público son designados por el Ejecutivo, hoy el municipio de Trelew nos obliga a discutir agendas del siglo XVIII cuando deberíamos estar debatiendo desafíos institucionales del siglo XXI.
El intendente debería saber que aún teniendo más votos, continuará gobernando solo.
* Concejal de Trelew por ARI
Buena parte de la explicación sobre los motivos del subdesarrollo de las democracias latinoamericanas la encontramos en la endemia que acompaña a su clase política, fanática de acomodar en cuanto se le presenta la oportunidad, principios generales perdurables a sus necesidades particulares de coyuntura.
Sin otro argumento más que su circunstancial condición de mayoría, el PJ de Trelew dio hoy un paso más en su obstinación por roer y copar todas las instituciones de control de nuestra democracia local. Eludiendo la Comisión de debate correspondiente, sobre tablas modificó en la sesión de hoy la composición del Tribunal Electoral Municipal quedándose automáticamente con la mayoría de sus integrantes.
De acuerdo con la ordenanza vigente, el Tribunal debió quedar conformado por tres representantes por la mayoría (PJ), dos por la primera minoría (PROVECh) y uno por cada una de las restantes fuerzas políticas con representación legislativa (UCR y ARI). Es decir, tres para el que gobierna y cuatro para el total de las minorías.
De este modo, si la mayoría quisiera modificar las normas o tomar resoluciones a partir de interpretaciones unilaterales, no podría hacerlo, ya que necesariamente debería convencer a alguna de las minorías para alcanzar la mitad más uno de los votos del Tribunal; o por el contrario, si fuesen las minorías quienes pretendiesen avanzar con los cambios a través de un consenso contramayoritario, requeriría de ellas un importante esfuerzo de negociación democrática.
Esos equilibrios institucionales previstos para evitar abusos de poder quedaron hoy esquilmados. El intendente Mac Karthy considera que como él ganó las elecciones debe tomar todo, y que no necesita de nadie para gobernar. A partir de la fecha el Tribunal Electoral tendrá cuatro integrantes por la mayoría y tres por las minorías y punto. En el corto plazo el PJ no tendrá que perder el tiempo con la tediosa labor de persuadir a las minorías con mejores argumentos.
Es posible que muchos ciudadanos desconozcan las funciones de este organismo, pero entre sus responsabilidades se encuentran las tareas no menores de conformar los padrones electorales, oficializar los partidos políticos municipales, convocar a elecciones, proclamar a los candidatos electos, organizar, dirigir y hacer el escrutinio en elecciones generales y parciales, de las Asociaciones Vecinales y en ocasión de Revocatorias de mandatos, Iniciativas Populares, Referéndums y Plebiscitos. En síntesis, una porción relevante de las reglas de juego de la democracia.
Al igual que el Organismo Municipal Regulador de los Servicios Públicos, en el que sus integrantes debiendo ingresar por concurso público son designados por el Ejecutivo, hoy el municipio de Trelew nos obliga a discutir agendas del siglo XVIII cuando deberíamos estar debatiendo desafíos institucionales del siglo XXI.
El intendente debería saber que aún teniendo más votos, continuará gobernando solo.
* Concejal de Trelew por ARI
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