Fuente: La Nación
Justicia: Acoso a los jueces
Por Adrián Ventura
"En la Corte recibimos reclamos de jueces de todo el país. Los consejos de la magistratura desnaturalizan la atribución de acusar a los jueces y suelen hacer un mal uso de ella", dice el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti.
A partir de mañana, en Córdoba, quinientos jueces de todo el país debatirán sobre la designación y acusación de jueces, un asunto estrechamente ligado con la independencia judicial. Ese es el temario central de la Tercera Conferencia Nacional de Jueces, organizada por la Corte, que durante los últimos tres años dio señales claras de su autonomía.
En la Argentina, la independencia no pasa de ser un ideal:
El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, logró la destitución del procurador de la provincia, Eduardo Sasame. Algo similar había hecho el ex presidente Néstor Kirchner cuando, siendo gobernador de Santa Cruz, consiguió la remoción del entonces procurador general Eduardo Sosa.
Lorenzetti está preocupado por lo que ocurre en Tucumán: el gobernador Jorge Alperovich impulsa el juicio político de un ministro de la Corte provincial. Es una reacción a la decisión del tribunal que declaró nula una reforma constitucional que, sin disimulo alguno, había colocado al Consejo de la Magistratura provincial en la órbita del Poder Ejecutivo local. Leandro Despouy, Relator Especial de Naciones Unidas sobre Independencia Judicial, ya estuvo en la provincia para mirar de cerca ese caso.
La sobrina de Néstor Kirchner, la fiscal Natalia Mercado, es la encargada de investigar una venta de tierras que hizo su tío en El Calafate.
La justicia penal fue absolutamente ineficiente para instruir el caso de la valija de Guido Antonini Wilson, una parálisis que contrasta con la eficiencia del FBI y de la justicia norteamericana. Nada se gana con criticar a los Estados Unidos o a sus tribunales. El juez argentino Daniel Petrone debería intentar corroborar o desmentir lo investigado por el FBI, pero la ciudadanía asumirá, como cierto, que la verdad llega desde los Estados Unidos. Por eso, ya no importa el desenlace judicial, sino el político.
El Consejo de la Magistratura nacional anuló un concurso judicial, porque a los consejeros políticos no les gustó el resultado. En fin, la lista de casos es casi infinita.
El titular de la Asociación de Magistrados, Ricardo Recondo, que hace unos meses declaró a LA NACION que "los jueces están bajo presión", ayer agregó: "El Consejo es un instrumento. Usa la selección para discriminar a los candidatos y la acusación, para perseguir a los jueces".
* * *
Los jueces ya realizaron dos conferencias nacionales con anterioridad. La primera, efectuada en Santa Fe en 2006, estuvo dedicada a temas de independencia judicial, prensa, capacitación judicial y ética. La segunda, en 2007, realizada en Salta, se concentró en la eficacia y la incorporación de tecnología, la litigiosidad y la autarquía presupuestaria, un aspecto esencial de la independencia judicial.
En Córdoba, esta vez, habrá muchos anuncios sobre asuntos de gestión -una licitación, la entrega de 5000 computadoras, la puesta en marcha de juzgados modelos, etcétera-.
Pero parece más importante poner sobre la mesa la relación de la Justicia con los poderes políticos. Es hora de avanzar para darle más credibilidad al sistema político. Cualquier debate serio dará por supuesta esa realidad incuestionable: la justicia argentina necesita más libertad política para ser independiente.
Justicia: Acoso a los jueces
Por Adrián Ventura
"En la Corte recibimos reclamos de jueces de todo el país. Los consejos de la magistratura desnaturalizan la atribución de acusar a los jueces y suelen hacer un mal uso de ella", dice el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti.
A partir de mañana, en Córdoba, quinientos jueces de todo el país debatirán sobre la designación y acusación de jueces, un asunto estrechamente ligado con la independencia judicial. Ese es el temario central de la Tercera Conferencia Nacional de Jueces, organizada por la Corte, que durante los últimos tres años dio señales claras de su autonomía.
En la Argentina, la independencia no pasa de ser un ideal:
El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, logró la destitución del procurador de la provincia, Eduardo Sasame. Algo similar había hecho el ex presidente Néstor Kirchner cuando, siendo gobernador de Santa Cruz, consiguió la remoción del entonces procurador general Eduardo Sosa.
Lorenzetti está preocupado por lo que ocurre en Tucumán: el gobernador Jorge Alperovich impulsa el juicio político de un ministro de la Corte provincial. Es una reacción a la decisión del tribunal que declaró nula una reforma constitucional que, sin disimulo alguno, había colocado al Consejo de la Magistratura provincial en la órbita del Poder Ejecutivo local. Leandro Despouy, Relator Especial de Naciones Unidas sobre Independencia Judicial, ya estuvo en la provincia para mirar de cerca ese caso.
La sobrina de Néstor Kirchner, la fiscal Natalia Mercado, es la encargada de investigar una venta de tierras que hizo su tío en El Calafate.
La justicia penal fue absolutamente ineficiente para instruir el caso de la valija de Guido Antonini Wilson, una parálisis que contrasta con la eficiencia del FBI y de la justicia norteamericana. Nada se gana con criticar a los Estados Unidos o a sus tribunales. El juez argentino Daniel Petrone debería intentar corroborar o desmentir lo investigado por el FBI, pero la ciudadanía asumirá, como cierto, que la verdad llega desde los Estados Unidos. Por eso, ya no importa el desenlace judicial, sino el político.
El Consejo de la Magistratura nacional anuló un concurso judicial, porque a los consejeros políticos no les gustó el resultado. En fin, la lista de casos es casi infinita.
El titular de la Asociación de Magistrados, Ricardo Recondo, que hace unos meses declaró a LA NACION que "los jueces están bajo presión", ayer agregó: "El Consejo es un instrumento. Usa la selección para discriminar a los candidatos y la acusación, para perseguir a los jueces".
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Los jueces ya realizaron dos conferencias nacionales con anterioridad. La primera, efectuada en Santa Fe en 2006, estuvo dedicada a temas de independencia judicial, prensa, capacitación judicial y ética. La segunda, en 2007, realizada en Salta, se concentró en la eficacia y la incorporación de tecnología, la litigiosidad y la autarquía presupuestaria, un aspecto esencial de la independencia judicial.
En Córdoba, esta vez, habrá muchos anuncios sobre asuntos de gestión -una licitación, la entrega de 5000 computadoras, la puesta en marcha de juzgados modelos, etcétera-.
Pero parece más importante poner sobre la mesa la relación de la Justicia con los poderes políticos. Es hora de avanzar para darle más credibilidad al sistema político. Cualquier debate serio dará por supuesta esa realidad incuestionable: la justicia argentina necesita más libertad política para ser independiente.
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