Por Puerta E
El reclamo salarial planteado por los docentes de Chubut inquietó llamativamente al Gobierno provincial.
El domingo, el gobernador Mario Das Neves usó la tribuna mediática desde El Maitén para anunciar que le descontaría el día a los educadores que hicieran paro.
El lunes, las redacciones de los principales diarios recibieron dos páginas completas de publicidad oficial (eso es mucha plata) donde el Gobierno expandió un “detalle” de la evolución salarial del sector, información que también fue enviada vía gacetilla.
Ayer miércoles, día del paro, la directora provincial de Educación, Mirtha Romero y el subsecretario Gustavo Castán, utilizaron la cadena provincial -sí, consideraron necesaria la cadena provincial- para anunciar “oficialmente” que el paro docente había sido “un fracaso”.
Paralelamente, en el transcurso de la jornada, parece que algún funcionario advirtió que la última ley de aumento salarial para el sector tenía errores (esto es: los docentes cobraban aún menos de lo que se creía) y sacaron el decreto de necesidad y urgencia que reproducimos a continuación.
Más allá de los porcentajes, la adhesión y las versiones cruzadas, los docentes lograron instalar el reclamo salarial y consiguieron que el Gobierno provincial -visiblemente inquieto- gastara plata, energía, saliva y cadena para tratar de que este conflicto pasara lo más desapercibido posible.
El reclamo salarial planteado por los docentes de Chubut inquietó llamativamente al Gobierno provincial.
El domingo, el gobernador Mario Das Neves usó la tribuna mediática desde El Maitén para anunciar que le descontaría el día a los educadores que hicieran paro.
El lunes, las redacciones de los principales diarios recibieron dos páginas completas de publicidad oficial (eso es mucha plata) donde el Gobierno expandió un “detalle” de la evolución salarial del sector, información que también fue enviada vía gacetilla.
Ayer miércoles, día del paro, la directora provincial de Educación, Mirtha Romero y el subsecretario Gustavo Castán, utilizaron la cadena provincial -sí, consideraron necesaria la cadena provincial- para anunciar “oficialmente” que el paro docente había sido “un fracaso”.
Paralelamente, en el transcurso de la jornada, parece que algún funcionario advirtió que la última ley de aumento salarial para el sector tenía errores (esto es: los docentes cobraban aún menos de lo que se creía) y sacaron el decreto de necesidad y urgencia que reproducimos a continuación.
Más allá de los porcentajes, la adhesión y las versiones cruzadas, los docentes lograron instalar el reclamo salarial y consiguieron que el Gobierno provincial -visiblemente inquieto- gastara plata, energía, saliva y cadena para tratar de que este conflicto pasara lo más desapercibido posible.
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