Por Abla Carballo *
Fotos: Germán Pasini
Pensemos en cosas que jamás agendamos, porque son in-olvidables.
Pensemos qué cosas no se escurren al ámbito del olvido porque son carne nuestra.
Nadie se agenda acariciar, besar, cuidar, amar, acordarse de aquello que es entrañable. Palabra fantástica porque pertenece a las entrañas constitutivas del ser.
Calentitas las letras fue una idea importante entrañable e hizo posible un encuentro amable lleno de sensaciones profundas, intensas, simpáticas.
El amor, la emoción, la sensualidad no es sólo noción literaria ni una abstracción. ¿Quién puede decir que no amó aunque sea una vez en su vida? Son los sentidos quienes provocan el sentimiento. A veces carnal pero siempre sensual en donde la simpatía, invariablemente está presente.
La iniciativa es rica y esperanzadora con su desenfado, libertad y naturalidad por el trasfondo del contenido.
Fotos: Germán Pasini
Pensemos en cosas que jamás agendamos, porque son in-olvidables.
Pensemos qué cosas no se escurren al ámbito del olvido porque son carne nuestra.
Nadie se agenda acariciar, besar, cuidar, amar, acordarse de aquello que es entrañable. Palabra fantástica porque pertenece a las entrañas constitutivas del ser.
Calentitas las letras fue una idea importante entrañable e hizo posible un encuentro amable lleno de sensaciones profundas, intensas, simpáticas.
El amor, la emoción, la sensualidad no es sólo noción literaria ni una abstracción. ¿Quién puede decir que no amó aunque sea una vez en su vida? Son los sentidos quienes provocan el sentimiento. A veces carnal pero siempre sensual en donde la simpatía, invariablemente está presente.
La iniciativa es rica y esperanzadora con su desenfado, libertad y naturalidad por el trasfondo del contenido.
Quizás la cotidianidad hace olvidar una construcción de esta naturaleza. La construcción de nosotros mismos para dar más bello sentido a la vida. Además, como uno de tantos modos de provocar un sacudón existencial, que haga que obremos más para no vivir masificados. Para recuperar el valor exquisito y la fuerza de las palabras.
En el transcurso de Calentitas las letras, todos participamos y esa es la clave.
Organizadores, autores, lectores, escuchas disfrutamos una noche especial que se va tejiendo sencilla desde ahora, aunque potencialmente necesaria para todos.
La selección de autores y el video que acompañó la velada; el menú y la cartilla -que llevamos no sólo como recuerdo- es ya una muestra de apertura por la que vamos andando con otros. Como dejarse querer es el primer modo de aprender a querer.
Otra noche en Melipal en donde, a través de hacedores, busca formas nuevas alternativas de participación. Y ello implica no solamente la inquietud por lo social, lo cultural, lo político, sino también la inquietud por sí mismo.
Permitir y permitirse abordar el misterio del fenómeno del amor es plantarse y decir: el amor es lo más utópico y es lo único que no ha sido vencido por la dominación, la guerra y la muerte.-
* DNI 4.159.560
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