Por Docentes Universitarios de la sede Trelew reunidos en Asamblea de ADU
Declaración del 23 de diciembre de 2008
Docentes Universitarios de la sede Trelew reunidos en Asamblea convocada por su organización gremial -ADU- queremos expresar públicamente que:
La renuncia del rector de nuestra querida Universidad Nacional de la Patagonia, Cdor. Jorge Gil, acaecida luego de la aprobación de la Ley para la creación de la Universidad Provincial, nos obliga a insistir con algunas de las cuestiones que planteábamos ya en nuestra Declaración como Integrantes de la Comunidad Universitaria de la UNPSJB publicada en febrero de este año. En especial, sabiendo que ya se ha puesto en marcha un camino que, creemos, no es el mejor para que la comunidad tenga herramientas que le permitan la apropiación de conocimientos e ideas independientes de los gobiernos de turno y de las necesidades del poder económico actual.
Con claros fines políticos-sectoriales, se ha dispuesto por ley crear nuevas estructuras para la educación, las cuales tienen su sustento en las exigencias de las empresas que dominan la economía de la región y no en una visión de las necesidades que tienen la mayoría de los habitantes de la Provincia. Tal como decíamos en nuestra declaración "…Por la forma, la oportunidad y el contenido, el anuncio (de la creación de la Universidad Provincial) parece poco serio, lleno de falacias y con una finalidad netamente política. Sin lugar a dudas, la Universidad de la Provincia es hoy la Universidad Nacional de la Patagonia. Lo demuestra ello varias circunstancias concretas…Todas las carreras, tienen una impronta regional y netamente patagónica. Ello más allá que determinadas carreras, a su vez, se relacionan directamente con el proceso productivo que parece ser el eje de las carreras anunciadas. Todas las unidades académicas dictan sus cursos en la Patagonia, y la mayor parte de ellos específicamente en la Provincia del Chubut. Todas las unidades académicas y la propia Universidad, tienen el asiento de sus autoridades en la Provincia del Chubut. Decimos además que es poco serio, pues se omite una realidad insoslayable, tal cual es que una Universidad no nace de la nada. Se nutre de un capital humano, formado por docentes, personal no docente y alumnos, que hoy por hoy, y en general, no existen en la Provincia, más allá de los que formamos parte de la Universidad Nacional de la Patagonia. La Universidad debe ser un centro de libre pensamiento humano, un lugar de creación de ideas democrática e independiente. Esto es mucho más que un lugar de donde salgan personas que sirvan de mano de obra barata para las grandes empresas. Tampoco se conoce que se hayan realizado estudios que definan la necesidad de tales o cuales carreras y que tengan, efectivamente, una demandada en tal sentido. Esto es así, salvo que se haya consultado directamente a las empresas y estas hayan indicado que es lo que requieren. (…) (S)i en la Provincia existe una casa de altos estudios que no cumple en todo o en parte con satisfacer las necesidades de la región, lo que creemos que es cierto en alguna medida, la solución no es crear de la nada una unidad académica paralela. Es un dispendio de recursos de todo tipo que indica claramente una finalidad subalterna, propia de personas que al no poder dirigir un proyecto colectivo y democrático, como debe ser la Universidad, crean uno de acuerdo con intereses particulares, distintos a los del pueblo que tienen que representar…"
El proyecto resultante carece de un debate serio de cara a la sociedad. Su origen está en las decisiones o acuerdos con intereses que poco tienen que ver con lo colectivo y su desarrollo realizado por funcionarios inexpertos en el tema, que sólo han recibido como soporte profesional, la colaboración de especialistas de algunas universidades privadas. Es claro que para estas últimas, el debate acerca de la función de la educación pasa por ejes muy distintos, más cercanos a la lógica del lucro que a la rigurosidad científico- técnica y académica.
Esto explica por qué las universidades provinciales en nuestro país nacieron al calor de las recetas neoliberales de la década del '90, por lo que sus formas de organización académica y financiera comparten muchas de las consignas de ese modelo hoy rechazado, evidentemente, solo en lo discursivo. Es innegable que las mismas fueron /son posibles debido a la crisis profunda de la universidad nacional. Pero debemos tener muy claro que esta crisis ha sido fuertemente inducida por los sectores que intentan borrar los límites entre lo público y lo privado en detrimento del primero y para ganancia de unos pocos.
Por otra parte, el gobierno provincial y el de la ciudad capital argumentan y pueblan los espacios mediáticos con mensajes falaces. A modo de ejemplo, una encuesta reciente en el blog del Dr. Adrián López, intendente capitalino inquiría "¿Está de acuerdo con una universidad en Rawson? ", con opciones por "si", "no" y no sé", o categorías similares. Pues claro que estamos de acuerdo en la ampliación de la oferta educativa[1]. Pero no de cualquier oferta educativa y a cualquier precio.
Otro ejemplo es la nota del 14 de noviembre por parte del mismo intendente dirigida al Rector de la Universidad Nacional pidiendo la instalación de una sede de la UNP en Rawson en el mismo período cuando se tramitaba la creación de la universidad. Se intuye una falta de análisis riguroso o de claridad en la fijación de los objetivos, toda vez que ni siquiera se había analizado si existiría matrícula suficiente para justificar la convivencia de las dos universidades
Pese a lo intempestivo de la difusión de la nota de renuncia del rector Gil y que no haya sido canalizada adecuadamente en los espacios de co-gobierno y los órganos de representación de las distintos sectores que componen la comunidad universitaria, no nos toma de sorpresa; era una reacción posible que no suma ni resta al proyecto lanzado por la Provincia. Obviamente el hecho de conocerla a través de a los medios nos impidió dialogar y expresar nuestras opiniones al respecto con anterioridad. De todas maneras, creemos importante reiterar la declaración del 14 de febrero de 2008, dado que ahora y más que nunca deberemos atender las verdaderas necesidades de la educación provincial y nacional. No es superponiendo una universidad con otra ni desdoblando y desperdigando recursos que resolveremos la crisis de la educación en la Argentina, sino comprendiendo las causas económicas, políticas sociales y culturales que desencadenaron tal crisis y aunando esfuerzos para revertirlas.
Docentes Universitarios de la sede Trelew reunidos en Asamblea de ADU
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[1] "…pero dígame don:¿A usted le gustaría
ser rico y sano o pobre y enfermo?..."
Declaración del 23 de diciembre de 2008
Docentes Universitarios de la sede Trelew reunidos en Asamblea convocada por su organización gremial -ADU- queremos expresar públicamente que:
La renuncia del rector de nuestra querida Universidad Nacional de la Patagonia, Cdor. Jorge Gil, acaecida luego de la aprobación de la Ley para la creación de la Universidad Provincial, nos obliga a insistir con algunas de las cuestiones que planteábamos ya en nuestra Declaración como Integrantes de la Comunidad Universitaria de la UNPSJB publicada en febrero de este año. En especial, sabiendo que ya se ha puesto en marcha un camino que, creemos, no es el mejor para que la comunidad tenga herramientas que le permitan la apropiación de conocimientos e ideas independientes de los gobiernos de turno y de las necesidades del poder económico actual.
Con claros fines políticos-sectoriales, se ha dispuesto por ley crear nuevas estructuras para la educación, las cuales tienen su sustento en las exigencias de las empresas que dominan la economía de la región y no en una visión de las necesidades que tienen la mayoría de los habitantes de la Provincia. Tal como decíamos en nuestra declaración "…Por la forma, la oportunidad y el contenido, el anuncio (de la creación de la Universidad Provincial) parece poco serio, lleno de falacias y con una finalidad netamente política. Sin lugar a dudas, la Universidad de la Provincia es hoy la Universidad Nacional de la Patagonia. Lo demuestra ello varias circunstancias concretas…Todas las carreras, tienen una impronta regional y netamente patagónica. Ello más allá que determinadas carreras, a su vez, se relacionan directamente con el proceso productivo que parece ser el eje de las carreras anunciadas. Todas las unidades académicas dictan sus cursos en la Patagonia, y la mayor parte de ellos específicamente en la Provincia del Chubut. Todas las unidades académicas y la propia Universidad, tienen el asiento de sus autoridades en la Provincia del Chubut. Decimos además que es poco serio, pues se omite una realidad insoslayable, tal cual es que una Universidad no nace de la nada. Se nutre de un capital humano, formado por docentes, personal no docente y alumnos, que hoy por hoy, y en general, no existen en la Provincia, más allá de los que formamos parte de la Universidad Nacional de la Patagonia. La Universidad debe ser un centro de libre pensamiento humano, un lugar de creación de ideas democrática e independiente. Esto es mucho más que un lugar de donde salgan personas que sirvan de mano de obra barata para las grandes empresas. Tampoco se conoce que se hayan realizado estudios que definan la necesidad de tales o cuales carreras y que tengan, efectivamente, una demandada en tal sentido. Esto es así, salvo que se haya consultado directamente a las empresas y estas hayan indicado que es lo que requieren. (…) (S)i en la Provincia existe una casa de altos estudios que no cumple en todo o en parte con satisfacer las necesidades de la región, lo que creemos que es cierto en alguna medida, la solución no es crear de la nada una unidad académica paralela. Es un dispendio de recursos de todo tipo que indica claramente una finalidad subalterna, propia de personas que al no poder dirigir un proyecto colectivo y democrático, como debe ser la Universidad, crean uno de acuerdo con intereses particulares, distintos a los del pueblo que tienen que representar…"
El proyecto resultante carece de un debate serio de cara a la sociedad. Su origen está en las decisiones o acuerdos con intereses que poco tienen que ver con lo colectivo y su desarrollo realizado por funcionarios inexpertos en el tema, que sólo han recibido como soporte profesional, la colaboración de especialistas de algunas universidades privadas. Es claro que para estas últimas, el debate acerca de la función de la educación pasa por ejes muy distintos, más cercanos a la lógica del lucro que a la rigurosidad científico- técnica y académica.
Esto explica por qué las universidades provinciales en nuestro país nacieron al calor de las recetas neoliberales de la década del '90, por lo que sus formas de organización académica y financiera comparten muchas de las consignas de ese modelo hoy rechazado, evidentemente, solo en lo discursivo. Es innegable que las mismas fueron /son posibles debido a la crisis profunda de la universidad nacional. Pero debemos tener muy claro que esta crisis ha sido fuertemente inducida por los sectores que intentan borrar los límites entre lo público y lo privado en detrimento del primero y para ganancia de unos pocos.
Por otra parte, el gobierno provincial y el de la ciudad capital argumentan y pueblan los espacios mediáticos con mensajes falaces. A modo de ejemplo, una encuesta reciente en el blog del Dr. Adrián López, intendente capitalino inquiría "¿Está de acuerdo con una universidad en Rawson? ", con opciones por "si", "no" y no sé", o categorías similares. Pues claro que estamos de acuerdo en la ampliación de la oferta educativa[1]. Pero no de cualquier oferta educativa y a cualquier precio.
Otro ejemplo es la nota del 14 de noviembre por parte del mismo intendente dirigida al Rector de la Universidad Nacional pidiendo la instalación de una sede de la UNP en Rawson en el mismo período cuando se tramitaba la creación de la universidad. Se intuye una falta de análisis riguroso o de claridad en la fijación de los objetivos, toda vez que ni siquiera se había analizado si existiría matrícula suficiente para justificar la convivencia de las dos universidades
Pese a lo intempestivo de la difusión de la nota de renuncia del rector Gil y que no haya sido canalizada adecuadamente en los espacios de co-gobierno y los órganos de representación de las distintos sectores que componen la comunidad universitaria, no nos toma de sorpresa; era una reacción posible que no suma ni resta al proyecto lanzado por la Provincia. Obviamente el hecho de conocerla a través de a los medios nos impidió dialogar y expresar nuestras opiniones al respecto con anterioridad. De todas maneras, creemos importante reiterar la declaración del 14 de febrero de 2008, dado que ahora y más que nunca deberemos atender las verdaderas necesidades de la educación provincial y nacional. No es superponiendo una universidad con otra ni desdoblando y desperdigando recursos que resolveremos la crisis de la educación en la Argentina, sino comprendiendo las causas económicas, políticas sociales y culturales que desencadenaron tal crisis y aunando esfuerzos para revertirlas.
Docentes Universitarios de la sede Trelew reunidos en Asamblea de ADU
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[1] "…pero dígame don:¿A usted le gustaría
ser rico y sano o pobre y enfermo?..."
Nota relacionada: Ante la supuesta renuncia del rector de la UNP
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