Fuente: ATE Chubut
Rawson, 1° de diciembre de 2008
Al Gobernador de la Provincia
Don Mario Das Neves
De nuestra consideración:
Motiva la presente el reiterar nuestros reclamos verbales y escritos formulados oportunamente al Ministro Coordinador, Cr. Pablo Korn, respecto del pedido de aumento de $500 para todo el personal, a cuenta de futuros aumentos a alcanzar en el marco de las negociaciones en el año próximo.
Asimismo le solicitamos se dé cumplimiento a los acuerdos firmados por el gobierno en el transcurso del corriente año y aun no concretados. Nos referimos al aumento de los valores de la antigüedad y al compromiso de eliminar los rangos con que se pagan las asignaciones familiares.
Solicitamos también instruya la consagración formal de acuerdos largamente conversados, consensuados y redactados con sus funcionarios, vinculados a: la Dirección de Comunicaciones Oficiales, a la Dirección de Impresiones Oficiales, al Centro de Actividades de Montaña La Hoya; el proyecto consensuado para permitir Jubilaciones Especiales para el personal que realiza tareas insalubres; formalizar los acuerdos colectivos para el personal del Ministerio de Educación; regularizar la injustificada morosidad impositiva que sufren los compañeros del MIPROE , -se les descuenta compulsivamente el monotributo y figuran como deudores en la AFIP-, en tránsito a ser incorporados al Estado provincial; subsidio en el transporte público para todos los empleados en todos los horarios; resolver los cuestionamientos crónicos al sistema de Contralor Médico, entre otros.
Estas y muchas cuestiones integran un largo listado de reclamos que están en condiciones de ser resueltos en el marco de las negociaciones sectoriales, pero por distintas razones ajenas a esta organización, decimos que más allá de la voluntad de diálogo, acuerdos homologados, etcétera, se registra una parálisis progresiva a la hora de las decisiones, lo que va degradando las herramientas del diálogo.
Como usted sabe bien, el incremento de los precios de la canasta familiar destruye día a día el valor de nuestros salarios, y los acuerdos alcanzados con dificultad a principios de año han sido superados por la inflación. En este contexto en los últimos meses y semanas observamos las decisiones políticas de incrementar los sueldos de los funcionarios en unos 2.500 pesos, alejándose notablemente de los sueldos de los compañeros jerarquizados de la administración pública; acuerdos salariales justos en sectores encuadrados en CCT y, finalmente, el notable aumento concedido a la jerarquía del Poder Judicial que alcanzó un beneficio retroactivo de 5000$.
Como sabrá interpretar, nuestro reclamo tiene fundamentos sólidos: nuestros salarios se degradan y muchos están por debajo de la canasta familiar. Simultáneamente hay sectores que reciben remuneraciones hasta 20 veces superiores a las de la mayoría de los empleados del sector público y estos agrupamientos avanzan sin pausa fijándose los mejores beneficios.
PROBLEMA APARTE
La situación de los trabajadores de la Secretaría de Salud merece párrafos especiales.
Registramos avances objetivos en la casi totalidad del Estado provincial. Avanzamos en un proceso paulatino que nos permitirá en poco tiempo la inexistencia de trabajo en negro en el Estado chubutense. Hemos firmado Convenios Colectivos en varios sectores y, como citábamos más arriba, tenemos Convenios pendientes que, creemos, serán formalizados en los próximos meses;
También observamos en estos años mejoras objetivas en lo salarial y la resolución de infinidad de conflictos de sectores y situaciones individuales en prácticamente todo el Estado provincial.
La triste excepción es la Secretaría de Salud, donde además de la frustrante e inconducente negociación paritaria, la indolente conducción de la Dra. Di Perna y del tándem Quiroga y Vitetti, arrojaron, entre otras consecuencias, al menos un conflicto colectivo por año, magras resoluciones de estos conflictos y, la continuidad permanente de los problemas de origen.
Esta inocultable realidad se desarrolla en un contexto inédito en materia de inversiones en infraestructura y de recursos materiales cuantiosos. Pero a la hora de la distribución, los beneficiados son: primero la corporación médica, luego secretarias, secretarias de las secretarios y algunos privilegiados.
1. No se brindó respuesta ninguna a un problema central de la salud pública como es el deterioro físico y psicológico y las pobres remuneraciones del personal de Enfermería. Este agrupamiento está sujeto a un sistema casi de explotación, donde no se garantiza ni la jornada de ocho horas, ni los dos días de descanso semanales.
2. Cuando se realizaron medidas de fuerza, desde la propia Secretaría se declaró la ilegalidad de los conflictos. Y luego se castigó con sanciones a los trabajadores en huelga.
3. Sobre algunos compañeros, desde la conducción de los hospitales, de Puerto Madryn por citar un ejemplo, se ejercieron maniobras de persecución que llegaron hasta la denuncia penal y que hoy colocan a algún compañero al borde de la exoneración.
4. En el hospital de Gastre, en una jornada laboral, se sancionó a la totalidad del personal.
5. Los compañeros de Enfermería poseen recibos de sueldos informales, infeliz maniobra administrativa que pretende esconder los bajos salarios del sector.
6. Se denunció hasta el hartazgo, sin obtener ninguna respuesta, el manejo despótico y turbio de la administración del hospital de Rawson.
7. Se adeudan recategorizaciones que corresponden de acuerdo a las Leyes en vigencia. La Secretaría argumenta que la promoción no debe pagarse “porque se trata de una Ley vieja”.
8. Ninguna respuesta se brindó ante las denuncias de quema al aire libre de residuos patológicos en los hospitales del interior. Además se desoyeron las propuestas para resolver el delicado problema.
9. Infinidad de reclamos individuales tales como permutas de cargos, enfrentamientos entre profesionales y no profesionales, denuncias por irregularidades administrativas, espacios con insalubridad manifiesta, aplicaciones arbitrarias del régimen de licencias y un universo de reclamos, recibieron, en el mejor de los casos, la indiferencia de los negociadores paritarios.
Adicionalmente, en las últimas horas la Secretaria Di Perna descubrió que el origen de todos los males está en las conducciones de los sindicatos y a partir de esta teoría poco original, ataca a los gremios por la prensa intentando esconder su falta de comprensión de la crisis. Sin fundamento, imagina en voz alta pretensiones políticas que la persiguen y arroja suspicacias sobre supuestos proyectos económicos y otras vaguedades capciosas dignas de razones más precarias.
Pero a la hora de hablar de la salud pública, por la misma prensa, Di Perna desnuda la inconsistencia de su discurso y la ausencia de políticas que mejoren las condiciones de los trabajadores más esforzados del Estado. Recordamos y creemos que los objetivos son los de siempre: El sistema público de salud universal, gratuito y de calidad, al servicio de toda la población y garantías de bienestar para los trabajadores. Esto significa: trabajadores de salud bien remunerados, en condiciones de trabajo dignas, desprecarizados y en cantidad suficiente en cada hospital, en cada sala, para llegar antes y eficazmente a los problemas de salud de nuestra gente.
“Porque los ladrillos solos no curan. Para curar a las personas hacen falta personas”, decía Ramón Carrillo, gestor de una verdadera revolución sanitaria en nuestro país.
Señor Gobernador, a la espera de un respuesta favorable en función de una distribución más justa de la riqueza y aguardando sepa usted orientar a sus funcionarios en la búsqueda de reflotar las herramientas de la negociación colectiva, saludamos a usted muy atentamente.-
Rawson, 1° de diciembre de 2008
Al Gobernador de la Provincia
Don Mario Das Neves
De nuestra consideración:
Motiva la presente el reiterar nuestros reclamos verbales y escritos formulados oportunamente al Ministro Coordinador, Cr. Pablo Korn, respecto del pedido de aumento de $500 para todo el personal, a cuenta de futuros aumentos a alcanzar en el marco de las negociaciones en el año próximo.
Asimismo le solicitamos se dé cumplimiento a los acuerdos firmados por el gobierno en el transcurso del corriente año y aun no concretados. Nos referimos al aumento de los valores de la antigüedad y al compromiso de eliminar los rangos con que se pagan las asignaciones familiares.
Solicitamos también instruya la consagración formal de acuerdos largamente conversados, consensuados y redactados con sus funcionarios, vinculados a: la Dirección de Comunicaciones Oficiales, a la Dirección de Impresiones Oficiales, al Centro de Actividades de Montaña La Hoya; el proyecto consensuado para permitir Jubilaciones Especiales para el personal que realiza tareas insalubres; formalizar los acuerdos colectivos para el personal del Ministerio de Educación; regularizar la injustificada morosidad impositiva que sufren los compañeros del MIPROE , -se les descuenta compulsivamente el monotributo y figuran como deudores en la AFIP-, en tránsito a ser incorporados al Estado provincial; subsidio en el transporte público para todos los empleados en todos los horarios; resolver los cuestionamientos crónicos al sistema de Contralor Médico, entre otros.
Estas y muchas cuestiones integran un largo listado de reclamos que están en condiciones de ser resueltos en el marco de las negociaciones sectoriales, pero por distintas razones ajenas a esta organización, decimos que más allá de la voluntad de diálogo, acuerdos homologados, etcétera, se registra una parálisis progresiva a la hora de las decisiones, lo que va degradando las herramientas del diálogo.
Como usted sabe bien, el incremento de los precios de la canasta familiar destruye día a día el valor de nuestros salarios, y los acuerdos alcanzados con dificultad a principios de año han sido superados por la inflación. En este contexto en los últimos meses y semanas observamos las decisiones políticas de incrementar los sueldos de los funcionarios en unos 2.500 pesos, alejándose notablemente de los sueldos de los compañeros jerarquizados de la administración pública; acuerdos salariales justos en sectores encuadrados en CCT y, finalmente, el notable aumento concedido a la jerarquía del Poder Judicial que alcanzó un beneficio retroactivo de 5000$.
Como sabrá interpretar, nuestro reclamo tiene fundamentos sólidos: nuestros salarios se degradan y muchos están por debajo de la canasta familiar. Simultáneamente hay sectores que reciben remuneraciones hasta 20 veces superiores a las de la mayoría de los empleados del sector público y estos agrupamientos avanzan sin pausa fijándose los mejores beneficios.
PROBLEMA APARTE
La situación de los trabajadores de la Secretaría de Salud merece párrafos especiales.
Registramos avances objetivos en la casi totalidad del Estado provincial. Avanzamos en un proceso paulatino que nos permitirá en poco tiempo la inexistencia de trabajo en negro en el Estado chubutense. Hemos firmado Convenios Colectivos en varios sectores y, como citábamos más arriba, tenemos Convenios pendientes que, creemos, serán formalizados en los próximos meses;
También observamos en estos años mejoras objetivas en lo salarial y la resolución de infinidad de conflictos de sectores y situaciones individuales en prácticamente todo el Estado provincial.
La triste excepción es la Secretaría de Salud, donde además de la frustrante e inconducente negociación paritaria, la indolente conducción de la Dra. Di Perna y del tándem Quiroga y Vitetti, arrojaron, entre otras consecuencias, al menos un conflicto colectivo por año, magras resoluciones de estos conflictos y, la continuidad permanente de los problemas de origen.
Esta inocultable realidad se desarrolla en un contexto inédito en materia de inversiones en infraestructura y de recursos materiales cuantiosos. Pero a la hora de la distribución, los beneficiados son: primero la corporación médica, luego secretarias, secretarias de las secretarios y algunos privilegiados.
1. No se brindó respuesta ninguna a un problema central de la salud pública como es el deterioro físico y psicológico y las pobres remuneraciones del personal de Enfermería. Este agrupamiento está sujeto a un sistema casi de explotación, donde no se garantiza ni la jornada de ocho horas, ni los dos días de descanso semanales.
2. Cuando se realizaron medidas de fuerza, desde la propia Secretaría se declaró la ilegalidad de los conflictos. Y luego se castigó con sanciones a los trabajadores en huelga.
3. Sobre algunos compañeros, desde la conducción de los hospitales, de Puerto Madryn por citar un ejemplo, se ejercieron maniobras de persecución que llegaron hasta la denuncia penal y que hoy colocan a algún compañero al borde de la exoneración.
4. En el hospital de Gastre, en una jornada laboral, se sancionó a la totalidad del personal.
5. Los compañeros de Enfermería poseen recibos de sueldos informales, infeliz maniobra administrativa que pretende esconder los bajos salarios del sector.
6. Se denunció hasta el hartazgo, sin obtener ninguna respuesta, el manejo despótico y turbio de la administración del hospital de Rawson.
7. Se adeudan recategorizaciones que corresponden de acuerdo a las Leyes en vigencia. La Secretaría argumenta que la promoción no debe pagarse “porque se trata de una Ley vieja”.
8. Ninguna respuesta se brindó ante las denuncias de quema al aire libre de residuos patológicos en los hospitales del interior. Además se desoyeron las propuestas para resolver el delicado problema.
9. Infinidad de reclamos individuales tales como permutas de cargos, enfrentamientos entre profesionales y no profesionales, denuncias por irregularidades administrativas, espacios con insalubridad manifiesta, aplicaciones arbitrarias del régimen de licencias y un universo de reclamos, recibieron, en el mejor de los casos, la indiferencia de los negociadores paritarios.
Adicionalmente, en las últimas horas la Secretaria Di Perna descubrió que el origen de todos los males está en las conducciones de los sindicatos y a partir de esta teoría poco original, ataca a los gremios por la prensa intentando esconder su falta de comprensión de la crisis. Sin fundamento, imagina en voz alta pretensiones políticas que la persiguen y arroja suspicacias sobre supuestos proyectos económicos y otras vaguedades capciosas dignas de razones más precarias.
Pero a la hora de hablar de la salud pública, por la misma prensa, Di Perna desnuda la inconsistencia de su discurso y la ausencia de políticas que mejoren las condiciones de los trabajadores más esforzados del Estado. Recordamos y creemos que los objetivos son los de siempre: El sistema público de salud universal, gratuito y de calidad, al servicio de toda la población y garantías de bienestar para los trabajadores. Esto significa: trabajadores de salud bien remunerados, en condiciones de trabajo dignas, desprecarizados y en cantidad suficiente en cada hospital, en cada sala, para llegar antes y eficazmente a los problemas de salud de nuestra gente.
“Porque los ladrillos solos no curan. Para curar a las personas hacen falta personas”, decía Ramón Carrillo, gestor de una verdadera revolución sanitaria en nuestro país.
Señor Gobernador, a la espera de un respuesta favorable en función de una distribución más justa de la riqueza y aguardando sepa usted orientar a sus funcionarios en la búsqueda de reflotar las herramientas de la negociación colectiva, saludamos a usted muy atentamente.-
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