Por Daniel Moliterno *
“FUMAR ES UN PLACER…GENIAL…SENSUAL…” así decía el gallego, mejor dicho, ¡barcelonés! Juan Viladomat allá por 1923 en el famoso tango interpretado por Tania, Rosita Quiroga, Ignacio Corsini y Argentino Ledesma…entre otros. ¿Qué cincuentón de hoy no escuchó esas palabras seductoras, tentadoras: “¡Fumar es un placer…genial…sensual!”?. Y digo cincuentón porque fue el 1ª de junio de 1955 cuando lo grabó Argentino Ledesma, nada menos que con la orquesta de Héctor Varela. Lo que tal vez pocos sepan es que en los años 60 apareció una curiosa réplica bajo el dramático título de “Fumar no es un placer” que murió en lo olvido casi antes de nacer.
…………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………….(Perdón por la pausa; estaba prendiendo un pucho)
Fue más o menos a los once años que, junto con algunos amigos del rioba, se nos ocurrió encender y fumar unos palitos de zarzaparrilla sacados de la quinta de un vecino; y después, armar unos curiosos cigarritos de yerba (mate, por supuesto). ¿de qué se trataba? ¡de echar humo! De parecerse un poco a aquellos referentes; a esos tipasos que uno veía en la esquina, en el despacho de bebidas entre naipes; a los más grandes…y, cómo no, ¡al maestro del grado!
Después, el secundario. Comprar un cigarrillo, un solo cigarrillo en el kiosquito, sobre la calle Urquiza a metros de Belgrano. ¡Ah…ese pucho! ¡Tan rico!
Y al fin de cuentas…hacerse fumador. ¿Y qué? ¡Sí! ¡Soy fumador! Soy uno de los neo leprosos. Soy fumador por culpa de un marciano que llegó en su plato volador y me obligó a fumar. Jamás vi una publicidad de cigarrillos con unas minas deliciosas y nunca vi a Gardel ni a Perón disfrutando de un faso. ¡No! la culpa es un marciano roñoso. Y por su culpa ahora se me excluye del laburo, del bar, de la vida social y…”se dice de mí” que soy portador de una plaga que debe exterminarse.
Claro que, por mi parte, tengo que convivir con los mil y un comentarios acerca de “bailando por un sueño”…”el gran cuñado”…”el romance de no sé quién con no sé cual” y la descerebración de un sinfín de semejantes. Pero a mí se me excluye ¡porque fumo!.
A veces me pregunto ¿cuál será nuestro modo de ser? ¡Y yo qué sé! – me digo. Debe ser la hamburguesa, halloween, el bingo, el messenger…pilates…no sé; confieso que no sé. Entonces, nostálgico, tanguero y argentino, me dejo acariciar por las graciosas manos que dibuja el humo. Y vuelvo a encolumnarme en la siniestra fila de los descastados. “Si soy así…¿qué voy a hacer?”.
Se sabe que el autoritarismo no es propiedad de ninguna ideología en particular; hay autoritarios de derecha, de izquierda, los hay opositores y oficialistas; ateos, cristianos, musulmanes, ecologistas, ambientalistas…en definitiva, ¡hay de todo como en botica! Lo propio de la mentalidad autoritaria es considerarse la única dueña de la verdad lo que deriva invariablemente en considerar al “otro”, al diferente, como inferior y, en consecuencia y progresivamente privarlo de derechos. Lógicamente esto siempre sucede en nombre de algún valor que se considera incuestionable; en nuestro caso: ¡la salud pública!
A estos promotores del Paraíso libre de humo no se les ocurre imaginar la posibilidad de la existencia de algunos lugares “libres de humo” y otros que no lo sean y que cada uno elija (como si fuera gente libre) adonde quiere ir y adonde no. ¡No señor! A partir de la fundación del Paraíso los que fuman se quedan en su casa… por ahora; más adelante se les prohibirá abrir las ventanas para no contaminar el ambiente y quien sabe si con el tiempo no se los confinará en algún gueto creado a tal efecto; salvo que renieguen de su condición viciosa y se abstengan de infestar el mundo.
Lo cierto es que si prospera la iniciativa de “Esquel, una ciudad libre de humo de tabaco” quedaré, como otros, desterrado del Paraíso; rememorando aquellos años del “prohibido prohibir”; soñando sí, soñando, porque… “flotando el humo me suelo adormecer”.
* Daniel Moliterno, fumador
L.E. 8.007.149
“FUMAR ES UN PLACER…GENIAL…SENSUAL…” así decía el gallego, mejor dicho, ¡barcelonés! Juan Viladomat allá por 1923 en el famoso tango interpretado por Tania, Rosita Quiroga, Ignacio Corsini y Argentino Ledesma…entre otros. ¿Qué cincuentón de hoy no escuchó esas palabras seductoras, tentadoras: “¡Fumar es un placer…genial…sensual!”?. Y digo cincuentón porque fue el 1ª de junio de 1955 cuando lo grabó Argentino Ledesma, nada menos que con la orquesta de Héctor Varela. Lo que tal vez pocos sepan es que en los años 60 apareció una curiosa réplica bajo el dramático título de “Fumar no es un placer” que murió en lo olvido casi antes de nacer.
…………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………….(Perdón por la pausa; estaba prendiendo un pucho)
Fue más o menos a los once años que, junto con algunos amigos del rioba, se nos ocurrió encender y fumar unos palitos de zarzaparrilla sacados de la quinta de un vecino; y después, armar unos curiosos cigarritos de yerba (mate, por supuesto). ¿de qué se trataba? ¡de echar humo! De parecerse un poco a aquellos referentes; a esos tipasos que uno veía en la esquina, en el despacho de bebidas entre naipes; a los más grandes…y, cómo no, ¡al maestro del grado!
Después, el secundario. Comprar un cigarrillo, un solo cigarrillo en el kiosquito, sobre la calle Urquiza a metros de Belgrano. ¡Ah…ese pucho! ¡Tan rico!
Y al fin de cuentas…hacerse fumador. ¿Y qué? ¡Sí! ¡Soy fumador! Soy uno de los neo leprosos. Soy fumador por culpa de un marciano que llegó en su plato volador y me obligó a fumar. Jamás vi una publicidad de cigarrillos con unas minas deliciosas y nunca vi a Gardel ni a Perón disfrutando de un faso. ¡No! la culpa es un marciano roñoso. Y por su culpa ahora se me excluye del laburo, del bar, de la vida social y…”se dice de mí” que soy portador de una plaga que debe exterminarse.
Claro que, por mi parte, tengo que convivir con los mil y un comentarios acerca de “bailando por un sueño”…”el gran cuñado”…”el romance de no sé quién con no sé cual” y la descerebración de un sinfín de semejantes. Pero a mí se me excluye ¡porque fumo!.
A veces me pregunto ¿cuál será nuestro modo de ser? ¡Y yo qué sé! – me digo. Debe ser la hamburguesa, halloween, el bingo, el messenger…pilates…no sé; confieso que no sé. Entonces, nostálgico, tanguero y argentino, me dejo acariciar por las graciosas manos que dibuja el humo. Y vuelvo a encolumnarme en la siniestra fila de los descastados. “Si soy así…¿qué voy a hacer?”.
Se sabe que el autoritarismo no es propiedad de ninguna ideología en particular; hay autoritarios de derecha, de izquierda, los hay opositores y oficialistas; ateos, cristianos, musulmanes, ecologistas, ambientalistas…en definitiva, ¡hay de todo como en botica! Lo propio de la mentalidad autoritaria es considerarse la única dueña de la verdad lo que deriva invariablemente en considerar al “otro”, al diferente, como inferior y, en consecuencia y progresivamente privarlo de derechos. Lógicamente esto siempre sucede en nombre de algún valor que se considera incuestionable; en nuestro caso: ¡la salud pública!
A estos promotores del Paraíso libre de humo no se les ocurre imaginar la posibilidad de la existencia de algunos lugares “libres de humo” y otros que no lo sean y que cada uno elija (como si fuera gente libre) adonde quiere ir y adonde no. ¡No señor! A partir de la fundación del Paraíso los que fuman se quedan en su casa… por ahora; más adelante se les prohibirá abrir las ventanas para no contaminar el ambiente y quien sabe si con el tiempo no se los confinará en algún gueto creado a tal efecto; salvo que renieguen de su condición viciosa y se abstengan de infestar el mundo.
Lo cierto es que si prospera la iniciativa de “Esquel, una ciudad libre de humo de tabaco” quedaré, como otros, desterrado del Paraíso; rememorando aquellos años del “prohibido prohibir”; soñando sí, soñando, porque… “flotando el humo me suelo adormecer”.
* Daniel Moliterno, fumador
L.E. 8.007.149
6 Comentá esta nota:
HOLA ESTOY DE ACUERDO QUE FUMAR ES UN PLACER CON UN BUEN CAFECITO O UNOS BUENOS MATES Y EN CHARLAS CON AMIGOS , MUY BUENA LA NOTA , TENDRÍA QUE EXISTIR LUGARES PARA FUMADORES , O VOLVEMOS A LA ÉPOCA DE LO TODO PROHIBIDO , ESPERO QUE NO SEA ASÍ . FELICITACIONES
LILIANA
Estàs equivocado, nadie te prohìbe fumar, sòlo en lugares pùblicos. En tu casa podès, afuera en cualquier parte podès, en el campo, en el lago, en la plaza, donde quieras. Los que no fumamos que somos muchos, pedimos respeto, sòlo eso; y como somos una sociedad debemos respetarnos entre nosotros. Porque si yo tengo el vicio de comer con la boca abierta, o sacarme los mocos y pegarmelos en la suela del zapato, no voy a ir y hacerlo delante tuyo, se entiende?
Tambièn soy tanguero, argentino, nostàlgico, lector... y miro Tinelli (miralo sin culpa, no pasa nada), ja ja.
La libertad tuya de fumar termina donde empieza mi libertad de respirar aire puro.
Apoyo totalmente el proyecto del Dr. Romano.
Estimado Jose´: con todo respeto te sugiero que hagas un esfuercito más y vuelvas a leer el artículo; nadie pretende fumar delante tuyo ni de ninguna otra persona a quien le moleste; el asunto es un poco más profundo. Y en lo que a mí respecta podés mirar Tinelli todo lo que se te cante; también en ese tema la cuestión de fondo no pasa por ahí. Fraternalmente. Daniel
leyendo la nota (me pareció poeticamente interesante) me puse a pensar en todos los placeres que como seres humanos disfrutamos y aprovechamos hasta el rutinario cansancio.
"cuando no hay mas que decirnos, habla el humo..." tiene cierta belleza, efimera y nociva el humo de un cigarro; a veces parece que detuviera el tiempo (al menos en quien lo fuma)
una ciudad libre de humo? estoy de acuerdo, no fumo, solo el humo del que está a mi lado es lo que a veces contesto.
nadie busca desterrar a los "fumadores" solo que hay placeres que deberian disfrutarse en privado... no a escondidas pero si respetando a ese extraterrestre no fumador!
Los que no fumamos ademàs de molestarnos el humo pensamos en la salud del fumador (vease estado de Sandro). Y ademàs si voy a un bar, por ejemplo en Esquel: Argentino, Moe, un par màs y Disco, es realmente irrespirable. Y eso afecta mi salud. A veces opto por no salir. En la nota leì en algùn lugar "privaciòn de derechos"... y yo me pregunto los derechos de quièn? los del fumador o los mìos de poder salir a divertirme sin estar una semana con dolor de garganta?
hola, hace cinco meses que deje de fumar, y por ahora no me concidero un no fumador, ya que todos los dias a la mañana cuando me levanto pienso en lo grtificante que es un cigarrillo con el cafe o con el mate, en la facultad, a la entrada o en ese lugarcito que te queda entre materia, en un bar o en una charla entre amigos... Y creo que siempre que a la persona que este enfrete tuyo, sea una persona respetuosa y seapa rasonar: te pida amablemte que no fumes delante de ella, es convenente apagar el cigarrillo o trasladarse de lugar, porque existen personas muy mal educadas e irrespetuosas que te tratan como si fueras un delincuante, el cigarrillo es un vicio mas en la vida de una persona, como por ejemplo, el alcohol ya sea cerveza, vino, tequila, etc, cafe, gaseosa, mate, golosinas, etc
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