Fuente: La Nación
Por Marcelo Veneranda
La fiesta de Proyecto Sur fue total, pero a la vez incompleta. No por los resultados, que al cierre de esta edición colocaban al partido de Fernando "Pino" Solanas en un cómodo segundo lugar de la votación y con una inesperada ventaja de más de cinco puntos sobre el Acuerdo Cívico y Social.
Tampoco para los militantes, que anoche colmaron el lobby del hotel Bauen, deliraron con cada llamada de los fiscales desde las escuelas y terminaron festejando sobre la avenida Callao, a pesar del intenso frío.
La fiesta fue incompleta porque así lo quisieron los candidatos de Proyecto Sur. Incluso aquellos que, como Alcira Argumedo, Jorge Cardelli y Liliana Parada, ni soñaban este resultado al comienzo de la campaña. Pero especialmente porque "Pino" Solanas, su líder, intentó convertir "el gran triunfo" del domingo, como lo calificó, en sólo una "etapa más" del crecimiento que esperan lograr en 2011.
El objetivo por concretar fue delineado claramente: "Proyecto Sur comienza a ser la columna vertebral de un movimiento que disputará el gobierno de la ciudad", dijo Solanas, para completar: "Queremos gobernar la Argentina. No hicimos este esfuerzo para dejar que los mismos sigan administrando el país".
Temas que no se hablan
Para Solanas, el triunfo real de su campaña fue debatir los temas sobre los que "malintencionadamente" no se hablaba: "Vinimos a plantear la recuperación de nuestros recursos naturales y energéticos, a través de la nacionalización y estatización del petróleo y el gas, para acabar con el crimen del hambre", resumió.
A ese motivo y al "hartazgo" de los porteños que "no están encerrados por ningún corralito ideológico" atribuyó el crecimiento de Proyecto Sur. "Agradezco el voto lúcido del ciudadano de Buenos Aires, que demostró que estaba esperando una campaña con sustancia", expresó el cineasta.
Siempre a su lado, la segunda candidata a diputada nacional, Alcira Argumedo, cargó las tintas contra el macrismo: "Demostramos que se puede competir con la derecha, aun sin recursos, pero con un proyecto en serio".
Solanas dijo que no espera maniobras "abruptas" en el Congreso por parte del oficialismo. "Los cimbronazos ayudan a bajar a la señora soberbia", sentenció. También se refirió a la "necesidad" de recuperar con urgencia al Indec, al que se refirió como un "error monumental" de un Gobierno "preocupado en tapar sus propios errores", y a la "indignidad" de salvar a la General Motors, "sin tomar una acción, cuando los jubilados viven con 25 pesos por día".
Pero no cerró las puertas para futuros acuerdos, como ya sucedió con la estatización de Aerolíneas Argentinas, aunque puso un límite en "atropellos como la resolución 125".
También se refirió a Elisa Carrió, con quien tuvo más de un contrapunto en los últimos días de campaña. "Que se haya puesto tercera y hoy pueda no ingresar al Congreso demuestra que la especulación política es un error." Con todo, adelantó coincidencias con el ACyS en la búsqueda de "más democracia y más república".
Sobre la avenida Callao, militantes de varias generaciones seguían desafiando al frío, la lluvia y sus propias gargantas: "No queremos más alianzas, no queremos más traición, queremos un movimiento para la liberación", cantaban, para celebrar la fiesta total, pero inacabada, de Proyecto Sur.
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Por Marcelo Veneranda
La fiesta de Proyecto Sur fue total, pero a la vez incompleta. No por los resultados, que al cierre de esta edición colocaban al partido de Fernando "Pino" Solanas en un cómodo segundo lugar de la votación y con una inesperada ventaja de más de cinco puntos sobre el Acuerdo Cívico y Social.
Tampoco para los militantes, que anoche colmaron el lobby del hotel Bauen, deliraron con cada llamada de los fiscales desde las escuelas y terminaron festejando sobre la avenida Callao, a pesar del intenso frío.
La fiesta fue incompleta porque así lo quisieron los candidatos de Proyecto Sur. Incluso aquellos que, como Alcira Argumedo, Jorge Cardelli y Liliana Parada, ni soñaban este resultado al comienzo de la campaña. Pero especialmente porque "Pino" Solanas, su líder, intentó convertir "el gran triunfo" del domingo, como lo calificó, en sólo una "etapa más" del crecimiento que esperan lograr en 2011.
El objetivo por concretar fue delineado claramente: "Proyecto Sur comienza a ser la columna vertebral de un movimiento que disputará el gobierno de la ciudad", dijo Solanas, para completar: "Queremos gobernar la Argentina. No hicimos este esfuerzo para dejar que los mismos sigan administrando el país".
Temas que no se hablan
Para Solanas, el triunfo real de su campaña fue debatir los temas sobre los que "malintencionadamente" no se hablaba: "Vinimos a plantear la recuperación de nuestros recursos naturales y energéticos, a través de la nacionalización y estatización del petróleo y el gas, para acabar con el crimen del hambre", resumió.
A ese motivo y al "hartazgo" de los porteños que "no están encerrados por ningún corralito ideológico" atribuyó el crecimiento de Proyecto Sur. "Agradezco el voto lúcido del ciudadano de Buenos Aires, que demostró que estaba esperando una campaña con sustancia", expresó el cineasta.
Siempre a su lado, la segunda candidata a diputada nacional, Alcira Argumedo, cargó las tintas contra el macrismo: "Demostramos que se puede competir con la derecha, aun sin recursos, pero con un proyecto en serio".
Solanas dijo que no espera maniobras "abruptas" en el Congreso por parte del oficialismo. "Los cimbronazos ayudan a bajar a la señora soberbia", sentenció. También se refirió a la "necesidad" de recuperar con urgencia al Indec, al que se refirió como un "error monumental" de un Gobierno "preocupado en tapar sus propios errores", y a la "indignidad" de salvar a la General Motors, "sin tomar una acción, cuando los jubilados viven con 25 pesos por día".
Pero no cerró las puertas para futuros acuerdos, como ya sucedió con la estatización de Aerolíneas Argentinas, aunque puso un límite en "atropellos como la resolución 125".
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Sobre la avenida Callao, militantes de varias generaciones seguían desafiando al frío, la lluvia y sus propias gargantas: "No queremos más alianzas, no queremos más traición, queremos un movimiento para la liberación", cantaban, para celebrar la fiesta total, pero inacabada, de Proyecto Sur.
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* "La sociedad votó a la derecha", por Eduardo Aliverti
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