Por José Hernán Díaz Varela *
En lugar de cerrar la sesión, como correspondía reglamentariamente dado que era una extraordinaria de tema único, los concejales oficialistas fueron por más y elaboraron otra ordenanza allí mismo (817/09) en la que se autorizaba al Ejecutivo municipal “a iniciar las investigaciones necesarias para aclarar la forma en que fueron adquiridos los títulos de propiedad” por parte del señor Massacese y para “aclarar cómo fue registrado el título”. Es decir, los concejales pusieron en sospecha la legitimidad del título de propiedad en virtud del cual el intendente Mantegna celebró el contrato de permuta que ellos mismos habían aprobado minutos antes “en todos sus términos”. Ante tamaña esquizofrenia legislativa me pregunto: ¿son o se hacen?. Las grabaciones de esta sesión despejan cualquier duda al respecto. Como se suele decir, pocos resisten un archivo.
Y pasaron las elecciones, el tema cayó en el olvido pero esta semana lo que cayó fue la orden de desalojo de la familia Barría al juzgado de Trevelin, y la jueza Thomas se vio en el dilema de echar a toda la familia a la calle, con lluvia y frío, o cuestionar un fallo del juez Petris en el expediente n° 205-F° 55 del año 2006, caratulado “Massacese, Juan Alberto c/ Barría, María Inés s/reivindicación”. En ese expediente, que tiene ya cuatro años de trámite, se encuentran todos los antecedentes que tan afanosamente buscaban los señores concejales. Una tortuga a la derecha, por favor.
Ahora este desalojo parece quedar sin efecto, según aseguró el intendente Mantegna a una radio de Esquel. Pero mañana, jueves 27, el Concejo Deliberante del Pueblo del Molino volverá a tratar el tema, intentará emparchar nuevamente y deberá admitir que en estos setenta días no hizo nada y quedará una vez más en evidencia la irresponsabilidad de los funcionarios que pusieron a muchas familias de Trevelin en un estado de precariedad tal que incluyó el riesgo de perder sus viviendas. ¿Cómo se tapa la ineptitud de los gobernantes? ¿Con dineros públicos que aportamos todos los contribuyentes? ¿Permutando y/o malvendiendo bienes que son del Estado porque no hubo suficiente previsión? Porque el tema tiene más de cuatro años, y el gobierno municipal es el mismo. Es más, alguno que ahora es concejal era funcionario del ejecutivo municipal en el mandato anterior de Mantegna, pero ahora muestran cara de sorprendidos, balbucean explicaciones absurdas y tratan de sacarse el lazo cargando la romana a la actual responsable de Acción Social municipal, Sonia Giménez. Pasa tortuga por la izquierda.
Recuerdo a un viejo político que insistentemente señalaba: “los hechos son testarudos”. Y acá están los hechos. Y los hechos son que la irresponsabilidad, la negligencia y la desidia de funcionarios públicos han generado una situación límite para muchos de nuestros convecinos. Y hay que llevar una solución real a la gente o, más castizamente como me dice un amigo, “con la gente no se jode”.
Y si debe hacerse con dineros públicos, que sea mediante un procedimiento verdaderamente transparente, que incluya una investigación seria sobre todos los funcionarios, municipales y/o provinciales, tanto del ejecutivo como del legislativo, para determinar la responsabilidad que podría caberles por llevar la situación a este extremo. Esperaremos la sesión del Concejo Deliberante y veremos si deciden tomar el toro por las astas o perpetuar con parches una vocación de cazadores de tortugas.
* DNI 17536512
Trevelin - Chubu
En lugar de cerrar la sesión, como correspondía reglamentariamente dado que era una extraordinaria de tema único, los concejales oficialistas fueron por más y elaboraron otra ordenanza allí mismo (817/09) en la que se autorizaba al Ejecutivo municipal “a iniciar las investigaciones necesarias para aclarar la forma en que fueron adquiridos los títulos de propiedad” por parte del señor Massacese y para “aclarar cómo fue registrado el título”. Es decir, los concejales pusieron en sospecha la legitimidad del título de propiedad en virtud del cual el intendente Mantegna celebró el contrato de permuta que ellos mismos habían aprobado minutos antes “en todos sus términos”. Ante tamaña esquizofrenia legislativa me pregunto: ¿son o se hacen?. Las grabaciones de esta sesión despejan cualquier duda al respecto. Como se suele decir, pocos resisten un archivo.
Y pasaron las elecciones, el tema cayó en el olvido pero esta semana lo que cayó fue la orden de desalojo de la familia Barría al juzgado de Trevelin, y la jueza Thomas se vio en el dilema de echar a toda la familia a la calle, con lluvia y frío, o cuestionar un fallo del juez Petris en el expediente n° 205-F° 55 del año 2006, caratulado “Massacese, Juan Alberto c/ Barría, María Inés s/reivindicación”. En ese expediente, que tiene ya cuatro años de trámite, se encuentran todos los antecedentes que tan afanosamente buscaban los señores concejales. Una tortuga a la derecha, por favor.
Ahora este desalojo parece quedar sin efecto, según aseguró el intendente Mantegna a una radio de Esquel. Pero mañana, jueves 27, el Concejo Deliberante del Pueblo del Molino volverá a tratar el tema, intentará emparchar nuevamente y deberá admitir que en estos setenta días no hizo nada y quedará una vez más en evidencia la irresponsabilidad de los funcionarios que pusieron a muchas familias de Trevelin en un estado de precariedad tal que incluyó el riesgo de perder sus viviendas. ¿Cómo se tapa la ineptitud de los gobernantes? ¿Con dineros públicos que aportamos todos los contribuyentes? ¿Permutando y/o malvendiendo bienes que son del Estado porque no hubo suficiente previsión? Porque el tema tiene más de cuatro años, y el gobierno municipal es el mismo. Es más, alguno que ahora es concejal era funcionario del ejecutivo municipal en el mandato anterior de Mantegna, pero ahora muestran cara de sorprendidos, balbucean explicaciones absurdas y tratan de sacarse el lazo cargando la romana a la actual responsable de Acción Social municipal, Sonia Giménez. Pasa tortuga por la izquierda.
Recuerdo a un viejo político que insistentemente señalaba: “los hechos son testarudos”. Y acá están los hechos. Y los hechos son que la irresponsabilidad, la negligencia y la desidia de funcionarios públicos han generado una situación límite para muchos de nuestros convecinos. Y hay que llevar una solución real a la gente o, más castizamente como me dice un amigo, “con la gente no se jode”.
Y si debe hacerse con dineros públicos, que sea mediante un procedimiento verdaderamente transparente, que incluya una investigación seria sobre todos los funcionarios, municipales y/o provinciales, tanto del ejecutivo como del legislativo, para determinar la responsabilidad que podría caberles por llevar la situación a este extremo. Esperaremos la sesión del Concejo Deliberante y veremos si deciden tomar el toro por las astas o perpetuar con parches una vocación de cazadores de tortugas.
* DNI 17536512
Trevelin - Chubu
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