Por David Patricio Romero para Nuevo Espacio Político (NEP) *
La definición del entredicho suscitado por la conducción de los intereses del pueblo del Chubut en el área de los recursos petroleros y energéticos era de indudable previsión. La remoción de Néstor Di Pierro del organismo oficial Petrominera S.E. no fue simplemente una decisión administrativa sino toda una definición política.
Para ponerle marco al problema planteado corresponde indicar que el conflicto se suscita a partir de la asunción por parte de Di Pierro de la defensa de intereses locales y provinciales frente a una de las grandes empresas explotadoras de petróleo en Chubut. Protesta que ya la había anticipado con cierta timidez el Intendente municipal de Comodoro Rivadavia.
Cualquiera sea el color que se le quiera poner, la resolución del conflicto ilumina el verdadero escenario. Porque hay que reconocer que es la empresa YPF quien finaliza con la intromisión del entonces interventor de Petrominera. S.E.
Pero lo acontecido tiene quizá una principal lectura que merece realizarse. Para empezar cabe consignar que la política petrolera que adoptó la actual administración justicialista de Mario Das Neves en Chubut implica la adhesión a la política neoliberal en sus más crudos términos. La misma se inclina por el otorgamiento del manejo total del recurso petrolero – también del resto de los minerales – al sector privado. La muestra de esto no está solo en los contratos petroleros heredados de la época menemista, sino del que realizaron en esta etapa de Das Neves con Pan Amerícan Energy.
Podrán discutir los amigos justicialistas de Chubut la legalidad o no del contrato con PAE, si es conveniente o no desde el punto de vista económico, pero lo que no podrán poner en duda es que el manejo de la exploración y explotación en todas sus etapas del recurso petrolero lo tienen las empresas privadas. Esto es el capitalismo actual. Dentro de las principales características de este capitalismo exacerbado está la de máxima ganancia. Entonces todo aquello que atente contra tan “sagrado principio” va a ser objeto de exclusión.
Los amigos justicialista hoy tan quejosos y dolientes por lo que les ha pasado han de recordar que fueron uno de los principales militantes de esta política. Recordemos todos los hechos en ocasión del contrato de PAE tanto en la Legislatura como en los medios de comunicación como en manifestaciones en que fueron partícipes primarios.
El ex interventor de Petrominera Di Pierro como todo una serie integrantes de la misma, provenían del sector político. Como tal pensaron poner en práctica aquellos derechos que pensaban que correspondían a la defensa de un patrimonio de los chubutenses. Hoy le han demostrado quien tiene la conducción de uno de los principales recurso de nuestra provincia. Los que intentaron aún lo mínimo han sido excluidos. La Secretaría de Energía está en manos de un empresario del petróleo, el Geólogo Sergio Schiavone.
Podrá argumentarse que representa lo intereses de los empresarios locales, pero ¿los intereses del pueblo del Chubut, quien los representa?.
De este incidente, como una primera conclusión, y en esto no estoy realizando sólo un posicionamiento personal, cabe reflexionar que dentro de este sistema propuesto por el gobierno del Chubut respecto de los recursos naturales, no hay garantía ninguna de defensa de los mismos. Lo demás es una discusión política sobre los recursos naturales.
Trelew, julio 2009.-
* D.N.I. Nº 07.325.268
Nota relacionada: Romero sospecha que el descubrimiento de petróleo fue anterior a la renegociación
La definición del entredicho suscitado por la conducción de los intereses del pueblo del Chubut en el área de los recursos petroleros y energéticos era de indudable previsión. La remoción de Néstor Di Pierro del organismo oficial Petrominera S.E. no fue simplemente una decisión administrativa sino toda una definición política.
Para ponerle marco al problema planteado corresponde indicar que el conflicto se suscita a partir de la asunción por parte de Di Pierro de la defensa de intereses locales y provinciales frente a una de las grandes empresas explotadoras de petróleo en Chubut. Protesta que ya la había anticipado con cierta timidez el Intendente municipal de Comodoro Rivadavia.
Cualquiera sea el color que se le quiera poner, la resolución del conflicto ilumina el verdadero escenario. Porque hay que reconocer que es la empresa YPF quien finaliza con la intromisión del entonces interventor de Petrominera. S.E.
Pero lo acontecido tiene quizá una principal lectura que merece realizarse. Para empezar cabe consignar que la política petrolera que adoptó la actual administración justicialista de Mario Das Neves en Chubut implica la adhesión a la política neoliberal en sus más crudos términos. La misma se inclina por el otorgamiento del manejo total del recurso petrolero – también del resto de los minerales – al sector privado. La muestra de esto no está solo en los contratos petroleros heredados de la época menemista, sino del que realizaron en esta etapa de Das Neves con Pan Amerícan Energy.
Podrán discutir los amigos justicialistas de Chubut la legalidad o no del contrato con PAE, si es conveniente o no desde el punto de vista económico, pero lo que no podrán poner en duda es que el manejo de la exploración y explotación en todas sus etapas del recurso petrolero lo tienen las empresas privadas. Esto es el capitalismo actual. Dentro de las principales características de este capitalismo exacerbado está la de máxima ganancia. Entonces todo aquello que atente contra tan “sagrado principio” va a ser objeto de exclusión.
Los amigos justicialista hoy tan quejosos y dolientes por lo que les ha pasado han de recordar que fueron uno de los principales militantes de esta política. Recordemos todos los hechos en ocasión del contrato de PAE tanto en la Legislatura como en los medios de comunicación como en manifestaciones en que fueron partícipes primarios.
El ex interventor de Petrominera Di Pierro como todo una serie integrantes de la misma, provenían del sector político. Como tal pensaron poner en práctica aquellos derechos que pensaban que correspondían a la defensa de un patrimonio de los chubutenses. Hoy le han demostrado quien tiene la conducción de uno de los principales recurso de nuestra provincia. Los que intentaron aún lo mínimo han sido excluidos. La Secretaría de Energía está en manos de un empresario del petróleo, el Geólogo Sergio Schiavone.
Podrá argumentarse que representa lo intereses de los empresarios locales, pero ¿los intereses del pueblo del Chubut, quien los representa?.
De este incidente, como una primera conclusión, y en esto no estoy realizando sólo un posicionamiento personal, cabe reflexionar que dentro de este sistema propuesto por el gobierno del Chubut respecto de los recursos naturales, no hay garantía ninguna de defensa de los mismos. Lo demás es una discusión política sobre los recursos naturales.
Trelew, julio 2009.-
* D.N.I. Nº 07.325.268
Nota relacionada: Romero sospecha que el descubrimiento de petróleo fue anterior a la renegociación
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