Por Docentes de la EAS 902 *
En el año 1990 da comienzo en Epuyén, entre otras localidades, la implementación del Proyecto Educación y Trabajo. El mismo se planteaba la articulación de la educación rural con el mundo del trabajo, contemplando características de la localidad que al día de hoy, con las modificaciones propias de la evolución social, se mantienen vigentes (dispersión geográfica, ruralidad), agregándose otras que refuerzan la necesidad de potenciar la modalidad (maternidad adolescente, jóvenes que trabajan, etc.), siendo en ese momento la única alternativa de nivel Medio en la localidad y cuyo resultado fue multiplicar en forma exponencial la cantidad de jóvenes que pudieron terminar sus estudios secundarios y su permanencia en la localidad.
El Proyecto empieza a implementarse como ciclo básico, transformándose luego en la EAS (núcleo 902), cubriendo todo el nivel medio, es decir el programa del entonces bachillerato y desde el año 2000 se da la transformación de la EAS en Polimodal Rural.
En el año 1990 da comienzo en Epuyén, entre otras localidades, la implementación del Proyecto Educación y Trabajo. El mismo se planteaba la articulación de la educación rural con el mundo del trabajo, contemplando características de la localidad que al día de hoy, con las modificaciones propias de la evolución social, se mantienen vigentes (dispersión geográfica, ruralidad), agregándose otras que refuerzan la necesidad de potenciar la modalidad (maternidad adolescente, jóvenes que trabajan, etc.), siendo en ese momento la única alternativa de nivel Medio en la localidad y cuyo resultado fue multiplicar en forma exponencial la cantidad de jóvenes que pudieron terminar sus estudios secundarios y su permanencia en la localidad.
El Proyecto empieza a implementarse como ciclo básico, transformándose luego en la EAS (núcleo 902), cubriendo todo el nivel medio, es decir el programa del entonces bachillerato y desde el año 2000 se da la transformación de la EAS en Polimodal Rural.
Desde sus inicios y hasta 2002 el núcleo de la EAS 902 de Epuyén sufrió varios intentos de cierre, felizmente evitados gracias al compromiso y participación de la comunidad y de distintos actores en pos de su continuidad y su mejoramiento. De dicho compromiso habla hoy una matrícula de 40 alumnos en nivel Polimodal, sensiblemente menor a la de años atrás, pero muy significativa siendo que desde hace varios años se comparte la oferta del nivel medio con el Colegio 774 (en principio anexo Colegio 734) y que desde la transformación en virtud de la Ley Federal el nivel Medio se redujo de cinco a tres años.
Por otra parte en octubre de 1999 se crea en nuestra localidad el Proyecto 6 de terminalidad de EGB3 para jóvenes y adultos, con las mismas características de semipresencialidad que la EAS, dirigido a las personas que teniendo 7mo año aprobado no habían concluido 8vo y 9no años. La matrícula quedó mayoritariamente compuesta por jóvenes desocupados ó subocupados, madres jóvenes, etc. Todos provenientes del sector socioeconómicamente más vulnerable de nuestra población, característica que a casi diez años de funcionamiento permanece.
Dicha matrícula, sumada a la de la EAS 902, los mas de cien egresados de nivel Medio y treinta de EGB3, hacen necesario y pertinente plantearse la continuidad de una oferta educativa semipresencial en la localidad adecuada a la realidad de la nueva trasformación educativa en curso, en virtud de la aplicación de la Ley Nacional de Educación. Desde Epuyén se elaboró una propuesta elevada por la EAS en diciembre pasado, basada en 200 encuestas realizadas a personas de la comunidad.
Sin embargo, lamentablemente este año hay malas noticias: comenzamos siendo ignorados respecto del proyecto elevado y declarado de interés por nuestro HCD. Luego vino la humillación a que se sometió a toda la comunidad educativa de la EAS en el acto del edificio, el cual, como lo indican desde los títulos de los pliegos de licitación hasta el cartel de entrada, es compartido el Colegio 774 y 902. Sin embargo a la hora del acto, ni siquiera se nos nombró, ni invitó a nuestras autoridades a hablar ni subir al palco y se consideró a nuestra bandera de ceremonia como invitada: todo ante el desconcierto, indignación y tristeza de docenas de alumnos, ex alumnos, padres y docentes. Finalmente tras insistentes rumores y ante nuestra requisitoria llega al HCD local durante el mes en curso una desconcertante nota ministerial que da por sentado que nosotros no deberíamos haber abierto inscripción (lo cual hubiera sido incumplir nuestra tarea); que dice que no tenemos “cobertura legal”, mientras que no hay ningún instrumento legal que haya modificado la situación (nos preguntamos por qué no generar la cobertura legal en la transformación como se hace con todo el sistema); y que pretende reemplazar la oferta de calidad que se brinda por un programa semipresencial de estudio del año 1983 diseñado para personas en situación de encierro(¿?) que permite hacer el nivel Secundario en tres cuatrimestres!!.
Hasta aquí esta breve reseña. Ahora cabe plantearse la pregunta del momento: ¿es oportuno que una localidad abandone una modalidad de educación que ha dado resultado durante 20 años?. Esta modalidad le imprimió a nuestra localidad una identidad, al punto que la misma propuesta educativa tuvo una fuerte influencia local. No ha desaparecido y mantiene una matrícula e ingreso estables, a pesar de compartir hace años la oferta con la modalidad presencial. La educación semipresencial es una opción y a la vez una necesidad de la población local. Su matrícula combina quienes la eligen y quienes la necesitan, porque no pueden sostener la presencialidad.
Nuestra sociedad ha cambiado y a la ruralidad se le ha sumado la realidad de maternidad adolescente, jóvenes que trabajan, adultos, etc. Por lo tanto se han multiplicado las razones.
Es grave hoy la situación de Proyecto 6, con 15 alumnos estudiando y por lo que sabemos nadie quiere acreditar sus saberes, o sea nadie quiere dar los títulos ni tampoco nombrar a un docente en unas horas vacantes de Lengua, así como la de los alumnos de la EAS, a quienes se amenaza con el cierre a plazo fijo de la institución.
¿El Ministerio hace trabajar a docentes 10, 15, 20 años, acumulando experiencia y capacidad en la modalidad, para ahora quitarle entidad a lo que hacen, solo porque sí?.
¿Por qué una localidad no puede intervenir en la política educativa, planteando sus necesidades al Ministerio, tal cual lo dice el artículo 118 de Nuestra Constitución Provincial?. ¿No es esto verdadero federalismo, que tanto reclamamos y declamamos?.
¿Por qué no puede abrirse una discusión institucional al respecto, escuchando a los involucrados?.
En síntesis, lo que piden alumnos, docentes, gran parte de la comunidad es respeto:
No se cierra una escuela porque sí, más aún si hay propuestas para mejorarla, 60 alumnos con 60 familias que van a vivir una frustración en su seno, que la van a transmitir a otros, porque sienten pertenencia por la EAS.
Por eso volvemos a reiterar a las autoridades nuestra solicitud, cada vez más urgente, de que se hagan presentes en la localidad como lo han prometido verbalmente varias veces en lo que va del ciclo lectivo, sin hacerlo realidad. Nuestra comunidad educativa no puede seguir sufriendo las consecuencias de decisiones tomadas en despachos ministeriales a 700 km de distancia que desconocen la realidad local.
* Epuyén -Abril 2010
1 Comentá esta nota:
Habria que agregar que en el anteproyecto de ley de educación de la provincia se contempla la educacion a distancia, e incluida alli la educación abierta. Partir de la experiencia de EAS y en todo caso modificar algun aspecto parece ser el camino más constructivo. En mi experiencia docente en el nivel superior siempre he valorado la buena formación de los egresados de la EAS 902, su grado de autonomia en los estudios y su pensamiento crítico.
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