Por Nélson Ávalos *
La Comunidad Mapuche Leopoldo Quilodrán debió enfrentar una nueva invasión a su territorio. Los intrusos resultaron ser miembros del cuerpo de seguridad del empresario Enrique Alejandro Korn. La respuesta de las Comunidades cercanas y de vecinos solidarios fue inmediata. Luego de varias horas de resistencia y debates, los vigiladores se fueron. El equipamiento de los invasores fue retirado por la propia gente.
Ayer por la mañana Inés Campos Larenas detectó movimiento de vehículos y gentes en un sector del territorio comunitario que ella ocupa. Cuando se acercó a observar comprobó que había una casilla rodante instalada junto a una curva del camino que asciende hacia la laguna El Espejo.
Inmediatamente se puso en comunicación con otros integrantes de la Comunidad - y del movimiento que la apoya - y la cadena solidaria se puso en marcha. Al poco rato, unas cuarenta personas estaban reunidas en el lugar. Habían representantes de las comunidades mapuche Motoco Cárdenas, Cayún y Huanguelén Puelo, de Lago Puelo; Lorenzo Pulgar Huentuquidel, de El Hoyo y Las Huaytecas, de Los Repollos.
Dos casillas habían sido instaladas por los empleados de Korn. Cada una con su baño. Y ya se estaba llevando luz eléctrica desde la vivienda de un vecino.
Pero los vecinos e integrantes de la Comunidad fueron tajantes: se tienen que retirar y llevarse sus cosas. Esto se logró por la tarde, cerca de las 18. Y ya de noche, a pulso, fueron bajadas hasta la Ruta 40 las dos casillas.
El responsable de los hombres que habían ingresado al territorio era Julio Villarruel, un comisario retirado que dijo trabajar para Korn. En diálogo con la Cabina Radiofónica – por FM Alas – expresó “la documentación que tengo yo me está autorizando a través de un título de propiedad para realizar la actividad” “Los trabajos serán de limpieza, forestación…yo solo hago la vigilancia con vigiladores, para que no se altere el orden público acá”. Luego reconoció que pertenecía a una empresa privada de seguridad.
Cuando el abogado Edgardo Manosalva, asesor de la Comunidad, le pidió ver la autorización para su entrada al lugar, el vigilador le alcanzó una de la Delegación de Bosques extendida a favor de Adán Nozijkowski, apoderado de Korn y empresario maderero. La misma autoriza un aprovechamiento de pinos en ese sector. Es decir que dicho aprovechamiento se realizaría bajo vigilancia de seguridad del personal a cargo de Villarruel.
Manosalva leyó un escrito que será presentado hoy a Finster y que lo intima a cesar de dar permisos de explotación de los recursos forestales dentro del territorio ancestral.
Las Comunidades y vecinos reunidos elaboraron un comunicado en el que expresan que “el orden público lo alteran ellos, por lo que las Comunidades proceden a hacer la defensa extrajudicial del Territorio”.
Dos Derechos se enfrentan otra vez. El de los Pueblos Originarios y el del Código Civil. Dos formas de ver el mundo también se enfrentan. El de la propiedad privada a toda costa y el otro: el de la vida y la lucha comunitarias.
Ya de noche, se escucharon los “marici weu” en El Pedregoso. El pueblo mapuche, acompañado de los solidarios con su lucha, habían depositado dos casillas rodantes junto a la ruta. Y echado del territorio a los intrusos.
* Cabina Radiofónica de El Pedregoso- FM AlasRed de Comunicación Campesina
Nota relacionada: Comunicado de las comunidades mapuche ante la nueva embestida, enviado por Nora Corvalán
La Comunidad Mapuche Leopoldo Quilodrán debió enfrentar una nueva invasión a su territorio. Los intrusos resultaron ser miembros del cuerpo de seguridad del empresario Enrique Alejandro Korn. La respuesta de las Comunidades cercanas y de vecinos solidarios fue inmediata. Luego de varias horas de resistencia y debates, los vigiladores se fueron. El equipamiento de los invasores fue retirado por la propia gente.
Ayer por la mañana Inés Campos Larenas detectó movimiento de vehículos y gentes en un sector del territorio comunitario que ella ocupa. Cuando se acercó a observar comprobó que había una casilla rodante instalada junto a una curva del camino que asciende hacia la laguna El Espejo.
Inmediatamente se puso en comunicación con otros integrantes de la Comunidad - y del movimiento que la apoya - y la cadena solidaria se puso en marcha. Al poco rato, unas cuarenta personas estaban reunidas en el lugar. Habían representantes de las comunidades mapuche Motoco Cárdenas, Cayún y Huanguelén Puelo, de Lago Puelo; Lorenzo Pulgar Huentuquidel, de El Hoyo y Las Huaytecas, de Los Repollos.
Dos casillas habían sido instaladas por los empleados de Korn. Cada una con su baño. Y ya se estaba llevando luz eléctrica desde la vivienda de un vecino.
Pero los vecinos e integrantes de la Comunidad fueron tajantes: se tienen que retirar y llevarse sus cosas. Esto se logró por la tarde, cerca de las 18. Y ya de noche, a pulso, fueron bajadas hasta la Ruta 40 las dos casillas.
El responsable de los hombres que habían ingresado al territorio era Julio Villarruel, un comisario retirado que dijo trabajar para Korn. En diálogo con la Cabina Radiofónica – por FM Alas – expresó “la documentación que tengo yo me está autorizando a través de un título de propiedad para realizar la actividad” “Los trabajos serán de limpieza, forestación…yo solo hago la vigilancia con vigiladores, para que no se altere el orden público acá”. Luego reconoció que pertenecía a una empresa privada de seguridad.
Cuando el abogado Edgardo Manosalva, asesor de la Comunidad, le pidió ver la autorización para su entrada al lugar, el vigilador le alcanzó una de la Delegación de Bosques extendida a favor de Adán Nozijkowski, apoderado de Korn y empresario maderero. La misma autoriza un aprovechamiento de pinos en ese sector. Es decir que dicho aprovechamiento se realizaría bajo vigilancia de seguridad del personal a cargo de Villarruel.
Manosalva leyó un escrito que será presentado hoy a Finster y que lo intima a cesar de dar permisos de explotación de los recursos forestales dentro del territorio ancestral.
Las Comunidades y vecinos reunidos elaboraron un comunicado en el que expresan que “el orden público lo alteran ellos, por lo que las Comunidades proceden a hacer la defensa extrajudicial del Territorio”.
Dos Derechos se enfrentan otra vez. El de los Pueblos Originarios y el del Código Civil. Dos formas de ver el mundo también se enfrentan. El de la propiedad privada a toda costa y el otro: el de la vida y la lucha comunitarias.
Ya de noche, se escucharon los “marici weu” en El Pedregoso. El pueblo mapuche, acompañado de los solidarios con su lucha, habían depositado dos casillas rodantes junto a la ruta. Y echado del territorio a los intrusos.
* Cabina Radiofónica de El Pedregoso- FM AlasRed de Comunicación Campesina
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