Por Dr. Fernando Urbano *
El personal policial provincial presta servicios en condiciones lamentables. En una nota anterior expresé que la carga horaria a la cual se los sometía es de 56 horas semanales, sin tener un solo día de descanso y que además debían estar a disposición de sus superiores para trabajar aún más horas, sin que se les abone por este concepto compensación alguna.
También se encuentran muy desfavorecidos si se compara el salario promedio que ellos perciben con cualquier otro empleado público. Esto se puede corroborar observando la página Web oficial (salarios).
De una u otra forma el Gobierno está arremetiendo permanentemente contra los efectivos policiales, por ejemplo a principio de este año, el Gobernador decidió convocar a los diputados en forma urgente a una sesión extraordinaria en la Legislatura Provincial , con el objetivo de aumentarles el sueldo (con grandes titulares en los diarios de por medio, por supuesto). El mencionado proyecto de ley fue sancionado por unanimidad el 4-2-10, esta misma urgencia no se reflejó a la hora de efectivizar el incremento salarial estipulado ya que ha pasado más de cinco meses sin que se de cumplimiento a la misma. Nótese las consecuencias dramáticas que hubiera acarreado, si esta misma “tomada de pelo” se hubiera hecho con cualquier otro gremio de trabajadores.
Otra más: cuatro días después de que se haya sancionado la norma aludida, el día 8 de febrero, mediante Decreto 104/10 el Poder Ejecutivo los castigó suprimiendo el presentismo en el caso que faltasen por algunas de las siguientes causales: accidentes de trabajo, enfermedad certificada, atención familiar enfermo, paternidad, etc. Nadie se hubiera animado a quitarle este derecho a otro empleado público.
Los perjuicios al que son sometidos los trabajadores policiales parece que no tiene fin, es así que hace pocos días el bloque del partido gobernante ha hecho conocer que presentará un proyecto de ley para que al personal policial se le descuente un 2% más de sus haberes con el único objetivo de apuntalar la caja de jubilaciones provincial. Y otra vez, nadie espera que puedan defenderse….
Hay una especie de ensañamiento con dichos trabajadores, a quienes cada vez se los somete a laborar en condiciones de mayor precariedad, estas mismas medidas tomadas en contra de los policías, sería inimaginable que se pudieran ejecutar con cualquier otro trabajador por la reacción que provocaría. Los policías, por ahora, no tienen ninguna posibilidad de realizar cualquier tipo de reclamos por tenerlo expresamente prohibido, tampoco pueden difundir las condiciones laborales y salariales en la cual deben desarrollar sus actividades.
Quienes se han arriesgado a romper con esta directiva y han hecho conocer sus condiciones laborales o han reclamado por causas justas, ya sea para ellos individualmente o para el cuerpo, invariablemente han sido severamente sancionados, por considerarlo un acto de insolencia hacia sus superiores. Algunos de ellos fueron trasladados a zonas inhóspitas, otros han sido directamente dejado cesantes o exonerados por el Gobernador, tal es el caso del sargento Carlos MICHIA, que hace más de dos años fue dejado cesante, solamente por haber tenido la osadía de proponer la sindicalización policial en la Provincia del Chubut.
El Bloque del CC-ARI en la próxima sesión legislativa, solicitará la interpelación del Ministro de Gobierno para que acuda a la Legislatura y brinde las explicaciones pertinentes sobre los aspectos señalados y de otros más que también tienen relación con las deficientes condiciones de trabajo, al que cotidianamente es sometido el personal subalterno de la Policía Provincial.
* Diputado Bloque CC-ARI
Nota relacionada: Opinión: “Sin posibilidades de defenderse”
El personal policial provincial presta servicios en condiciones lamentables. En una nota anterior expresé que la carga horaria a la cual se los sometía es de 56 horas semanales, sin tener un solo día de descanso y que además debían estar a disposición de sus superiores para trabajar aún más horas, sin que se les abone por este concepto compensación alguna.
También se encuentran muy desfavorecidos si se compara el salario promedio que ellos perciben con cualquier otro empleado público. Esto se puede corroborar observando la página Web oficial (salarios).
De una u otra forma el Gobierno está arremetiendo permanentemente contra los efectivos policiales, por ejemplo a principio de este año, el Gobernador decidió convocar a los diputados en forma urgente a una sesión extraordinaria en la Legislatura Provincial , con el objetivo de aumentarles el sueldo (con grandes titulares en los diarios de por medio, por supuesto). El mencionado proyecto de ley fue sancionado por unanimidad el 4-2-10, esta misma urgencia no se reflejó a la hora de efectivizar el incremento salarial estipulado ya que ha pasado más de cinco meses sin que se de cumplimiento a la misma. Nótese las consecuencias dramáticas que hubiera acarreado, si esta misma “tomada de pelo” se hubiera hecho con cualquier otro gremio de trabajadores.
Otra más: cuatro días después de que se haya sancionado la norma aludida, el día 8 de febrero, mediante Decreto 104/10 el Poder Ejecutivo los castigó suprimiendo el presentismo en el caso que faltasen por algunas de las siguientes causales: accidentes de trabajo, enfermedad certificada, atención familiar enfermo, paternidad, etc. Nadie se hubiera animado a quitarle este derecho a otro empleado público.
Los perjuicios al que son sometidos los trabajadores policiales parece que no tiene fin, es así que hace pocos días el bloque del partido gobernante ha hecho conocer que presentará un proyecto de ley para que al personal policial se le descuente un 2% más de sus haberes con el único objetivo de apuntalar la caja de jubilaciones provincial. Y otra vez, nadie espera que puedan defenderse….
Hay una especie de ensañamiento con dichos trabajadores, a quienes cada vez se los somete a laborar en condiciones de mayor precariedad, estas mismas medidas tomadas en contra de los policías, sería inimaginable que se pudieran ejecutar con cualquier otro trabajador por la reacción que provocaría. Los policías, por ahora, no tienen ninguna posibilidad de realizar cualquier tipo de reclamos por tenerlo expresamente prohibido, tampoco pueden difundir las condiciones laborales y salariales en la cual deben desarrollar sus actividades.
Quienes se han arriesgado a romper con esta directiva y han hecho conocer sus condiciones laborales o han reclamado por causas justas, ya sea para ellos individualmente o para el cuerpo, invariablemente han sido severamente sancionados, por considerarlo un acto de insolencia hacia sus superiores. Algunos de ellos fueron trasladados a zonas inhóspitas, otros han sido directamente dejado cesantes o exonerados por el Gobernador, tal es el caso del sargento Carlos MICHIA, que hace más de dos años fue dejado cesante, solamente por haber tenido la osadía de proponer la sindicalización policial en la Provincia del Chubut.
El Bloque del CC-ARI en la próxima sesión legislativa, solicitará la interpelación del Ministro de Gobierno para que acuda a la Legislatura y brinde las explicaciones pertinentes sobre los aspectos señalados y de otros más que también tienen relación con las deficientes condiciones de trabajo, al que cotidianamente es sometido el personal subalterno de la Policía Provincial.
* Diputado Bloque CC-ARI
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