Por Diego Bukay *El lunes 25 del corriente la Uatre, en representación de sus afiliados, realizó una medida de acción directa (una retención de servicios, no ingresando al establecimiento la mayoría de los trabajadores).
El martes 26, después de dos días de paro y de soportar la presión psicológica que significa la presencia de agentes de la policía, una abogada y una escribana que intentaban intimidar a los más débiles en la cadena del poder, una dubitativa subsecretaría de Trabajo dicta a pedido del señor Gobernador -según ellos dijeron- la conciliación obligatoria, en la cual se estipula que los despidos se retrotraen, que no debe haber ninguna clase de represalia contra los trabajadores y que entran en vigencia los tiempos legales de la misma y la sanciones previstas para aquella parte que no la acatare, siendo en ese momento acatada por ambas partes.
El 27 fue feriado por el censo nacional y, a las 19.30 horas, los trabajadores comienzan a recibir en sus domicilios, redactadas por una escribana, telegramas en los que se les notifica sus despidos. Se le notifica a Uatre de esta violación a lo dispuesto por la autoridad competente y ésta contesta que no hay problema, ya que la empresa está notificada de lo resuelto por la Subsecretaría.
Los más indignamente ocurrió hoy (por ayer 28) a la mañana cuando la gente con la conciliación obligatoria y creyendo que la ley nos iguala a todos, eliminando la barrera de los roles y posiciones sociales, se encuentra con la negativa de la empresa para que ingresen los 12 despedidos y, resaltando su poco compromiso social y ante la ley, dispuso más despidos ante la tibia respuesta de los entes que deberían defender irrenunciablemente los derechos de los trabajadores (llámase autoridad laboral y sindicato).
De surgir más novedades los mantendré al tanto, rogándoles desde ya su ayuda y respaldo para este sector casi indefenso y sometido por un poder económico, al cual muy pocos se les oponen.
En este preciso momento (ayer a la noche) me avisan que los trabajadores se encuentran en la comisaría local intentando realizar una exposición y se encuentran con la noticia de que son retenidos por la policía, se les sacan fotos y toman huellas digitales.
Debido al acta disponible acá la policía argumentó que podía detener hasta 6 horas a los trabajadores si estos no accedían a sacarse las fotos. Los detuvieron y, luego de 6 horas de permanencia, en la comisaría aun no han podido retirarse.
* DNI 20.822.983
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