Por Nehuen Corbeletto *
Hace casi veinte años se privatizó el ferrocarril. Fue en
1993. Gracias a esa medida hoy tenemos las rutas superpobladas de camiones y
autos, hay accidentes y se concentró al extremo el transporte de larga
distancia: por ejemplo, Vía Bariloche tiene 15 empresas. Incluidas en ellas a
Ko-Ko (1). Las muertes por accidentes en la ruta 22 (y en muchas rutas del
país) son la consecuencia de esto.
Se van a cumplir 20 años de las nefastas privatizaciones
menemistas, 20 años donde desaparecieron pueblos que vivían del tren. Miles de
ferroviarios quedaron sin trabajo y se cerraron los talleres. Hay accidentes
como los de Once, donde empresas como TBA reciben millones en subsidios del
Estado y el servicio es cada vez peor.
Pasaron 20 años y ahora, según Cristina tenemos que seguir
esperando que la justicia determine que pasó en la tragedia de Once para que
desde el Estado se tomen "las decisiones necesarias".
En el siglo XIX (1896) se construyó el ramal Bahía
Blanca-Zapala. Fueron 552 km
de vías construidas en apenas tres años ¿Por qué después de ocho años de
crecimiento económico y en pleno siglo XXI hoy no circula ningún tren de
pasajeros por esos rieles?
Si recorremos la historia, pero sobre todo éstas dos
décadas, hay pruebas suficientes para tomar la decisión que desde la Rosada no se quiere tomar:
estatizar los Ferrocarriles y que éstos sean controlados por sus trabajadores y
usuarios. Este gobierno dice ser peronista, sin embargo Perón los estatizó sin
recurrir ni esperar a la justicia (2).
* DNI: 34.663.626
1. Empresa de transporte interurbano que monopoliza los
recorridos en la zona del Alto Valle de Río Negro y Neuquén. Brinda un servicio
pésimo.
2. Digo esto sin ser peronista, pero es llamativa la
contradicción y el abismo entre las medidas de 1947 y las actuales.
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