Por Ángel Callupil
Se llevo a cabo en la fría tarde del pasado miércoles 11 una
marcha, al cumplirse un año de la desaparición del poblador mapuche REIMUNDO
NAZARIO PINO (43)
Familiares y vecinos se dieron cita para recorrer las calles del
poblado de la meseta central norte, sorpresivamente llego al centro
comunitario, donde se hizo la convocatoria, el jefe de policía del lugar quien expreso que ellos quieren que aparezca
Reimundo y que se harían presentes acompañando
la marcha; así lo hizo todo el
cuerpo de policía de Gan-Gan.
En su recorrido, la marcha paso frente al edificio comunal,
donde una de las hermanas Pino, recordó las tantas promesas del gobernador (se
reunieron dos veces) como de otros funcionarios provinciales, pero que han
quedado en palabras, haciendo notar en sus palabras el enojo por tal situación.
En otra parada, tomo la palabra doña Hortencia Hueicha,
quien agradeció en primer término el acompañamiento de toda la comunidad y
luego con lágrimas en los ojos, recordando a su hijo reclamo que se pueda
seguir con la investigación, que puedan conocer la verdad y encontrar a los
culpables de esta desaparición.
Finalmente donde fuera la casa de Reimundo, se recordó en
palabras de Belén su joven hija, que en este año transcurrido si bien se ha
buscado, no ha sido de manera intensa
como se esperaba desde un primer momento.
“solo pedimos justicia y que esta desaparición, no quede así nomás, como ha
pasado con tantos otros casos en toda nuestra zona”, recordando las
muertes dudosas de las que no se ha
conocido la verdad, de los pobladores
Cervantes Huayquilaf, Daniel Muñoz, Victoriano Cual, José Pichalao, Juan
Crespo y Juan Carlos Cañiu.
En esta pequeña localidad de la meseta, resonó como una
letanía “¿Dónde está Reimundo Nazario Pino?”, “queremos saber la verdad”
mientras a paso firme se camino las calles que hace un año ya no transita este
trabajador rural, miembro de la comunidad mapuche-tehuelche Los Pino.
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