Por José Luis Beovidez *
Estamos transitando un periodo atravesado por los derechos
humanos. El eje de la vida social y política es transversalmente cruzado por la
idea de derechos humanos, eso está bien y tiene que expandirse y profundizarse.
Tal es así, que sorprendidos nos enteramos que familiares de las victimas por
la masacre de Trelew de 1972 van a presentar un proyecto a Nación para declarar
a la ciudad como capital nacional de los derechos humanos. Conocemos de la gran
labor solidaria y el compromiso asumido de la comunidad en aquellos tiempos en
que el Estado fue atrapado por una banda de asesinos alimentando impunemente su
sadismo criminal, por lo tanto no hay duda que es un reconocimiento merecido.
Ahora la pregunta es ¿Se lo merece el gobierno de BuSSi?
Soy uno de los policías autoconvocados; administrativo,
percibiendo un salario de $3500 cuando la canasta básica es superior a los
$9500, vale la triple aclaración, y cesanteado junto a cuatro compañeros más de
forma anticonstitucional y arbitraria, también fuimos presos políticos porque
fue una decisión política y no dentro del marco del derecho lo de aquella
madrugada del 18 de abril de este año.
La necedad y la soberbia en la política tienen como
resultado y como victima a la gente. En este caso somos nosotros que, ante la
indiferencia del gobierno de turno aunque ellos se consideran dueños y amos de
los recursos humanos y materiales del Estado no toman consciencia eso de “de
turno”, dejando de lado que ellos son unos empleados más del estado, con más
responsabilidad porque son los encargados del bienestar general.
Nosotros que, hace más de cuarenta días que estamos
acampando en Rawson esperando un gesto político, sino también humano de ser
escuchados. Nosotros que, somos más de cincuenta que, mediante feria de ropa,
venta de empanadas, de tortas fritas, limpieza de parabrisas estamos
solventando nuestra estadía en la peatonal de Rawson. Nosotros que,
depositarios de todos los malos tratos, las mentiras, hartos de la hipocresía,
saciados de la corrupción no solo material y humana decidimos hacernos
escuchar, la comunidad nos escucha, la gente nos escucha, la dirigencia
política nos aborrece. Nosotros que tuvimos que recurrir a la transgresión,
porque solo la transgresión dice lo que siempre se negò.
El ministro Touriñan, con todo el respeto hacia su
investidura no así a su persona, sale a declarar sobre nuestras vidas y se
“preocupa” insidiosamente por nuestros financiamiento (dejando entrever que
existe algún sostén político), utilizando siempre el mismo recurso retórico de
des centrar el foco de la problemática, tomando las partes por el todo. ¿Cuál
es su importante función para recibir tan pletórico salario? Dedicate a lo tuyo
- ¿Hablar mal de los demás? - y te invitamos a que cierres la boca, de allí
solo sale fuego – sos el verdadero dragón - tus declaraciones son siempre
agresivas ninguneando un reclamo originado por una necesidad real y reconocida
por todos. No nos desmerezcas; somos pensantes, reflexivos pero tenemos
emociones que a veces son difíciles de controlar. Vos, junto a tus lacayos, son
en gran parte responsable por tu autismo político ante las problemáticas
sociales. Ante lo último, repito ¿Para qué te pagan?
Glinsky habla de una “democratización” que tiene más en
cuenta las formas que el contenido, porque si enuncia tanto un concepto podría
hacer un gesto acompañando a esa enunciación para así otorgarle sentido. Con
recibirnos y escucharnos, es un buen comienzo.
Tengo el placer de pertenecer al equipo de trabajo que cubre
el Juicio por la masacre de Trelew y lo reflejamos en el blog
veintidosdeagosto.blogspot.com.ar y, honestamente brinda satisfacción ser parte
de un acontecimiento histórico en la que la memoria colectiva renace activada
por un nuevo paradigma envuelto de un valor ético: la justicia; no solo
buscando un sentido evocatorio sino tendiendo un puente hacia el futuro capaz
de ser el magma para una sociedad más justa y democrática. Ahora, lo discursivo
cae en saco roto cuando pasamos a la praxis política, cuando vemos que la conducción
de la institución policial quedo anclado en los principios vectores de la
disciplina irrestricta y obediencia absoluta al superior permitiéndoles actuar
fuera de las leyes. Es grave.
¿Cuándo pretende el gobierno escuchar a hombres, mujeres,
niños, retirados que estamos acampando en Rawson? ¿Cuándo Glinsky atenderá a
policías autoconvocados demostrando un verdadero gesto democratizador y no solo
una muletilla para la popular? Como se lo hicimos llegar en la Universidad a ciertas
personalidades celebres del derecho como Perez Galimberti, Mario Juliano, Hugo
Barone, y, el muy vanagloriado por los anteriores José Glinsky en la ficcional,
aunque bien intencionada charla sobre “seguridad y democracia” desplegando una
batería enorme de conceptos jurídicos, y como dijo el respetadísimo Alfredo
Perez Galimberti, quien no se cansó de reverenciar a Glinsky, “la universidad
no está solo para el saber sino para transformar” Bue… por un lado el discurso
aparente desplegado al imaginario colectivo, por el otro, las reales
problemáticas sociales que no brinda derechos constitucionales a los
trabajadores policiales.
Mientras, nosotros seguimos haciendo Historia: presente en
Legislatura, presente en la
Universidad, encadenándonos, visibilizándonos aunque no hay
peor ciego…, siendo un tábano molesto, estamos esperando que nos convoquen al
dialogo. Una nueva fuerza social ha irrumpido en la arena histórica, es obvio
que la tendencia institucionalista tradicional la desconozca pero más tarde o
más temprano deberá ser reconocida. ¿Cuándo Policía va a dejar de ser una
escenografía institucional de cartón, como señala Aliverti- para involucrarse en los problemas reales de
seguridad pública no solo integral sino inclusiva y haciendo participes a los
trabajadores más pobres de la seguridad? Como señala Saín hay dos tipos de
policía: una plebeya y pobre que es la trabajadora y otra rica la del
comisariato muchas veces asociada al delito. Más allá de los discursos: ¿Existe
voluntad política para romper con la coraza de corrupción y brindar derechos
constitucionales a los más desamparados?
* DNI 24 133 899
Nota relacionada: Tres policías que sólo podrán hacer tareasadministrativas
0 Comentá esta nota:
Publicar un comentario