Anacrónico: un fiscal de Rosario reflotó la denominada “teoría de los dos demonios”

Por Red Eco

Organizaciones de derechos humanos de Rosario repudian el dictamen del Fiscal General de esa ciudad en el que estableció que los presuntos delitos cometidos por el PRT- ERP pueden ser considerados crímenes de lesa humanidad

(APDH Rosario) Santa Fe- El Fiscal general de Rosario, Dr. Claudio Palacín dictaminó que los presuntos delitos cometidos por el PRT ERP, en el caso de la muerte de Argentino Larrabure, pueden ser considerados crímenes de lesa humanidad. Otro tanto opinó la Dra. German Suter Schneider, Juez Federal de Rosario, a cargo de todas las causas en las que se investiga el accionar de los terroristas de estado en nuestra zona.

Los delitos de lesa humanidad, por definición y desde su origen solo los puede cometer un Estado. Esta doctrina clásica, evoluciona en el derecho internacional, agregando requisitos diversos y nuevas características, creando lo que ha dado en llamarse doctrina semi clásica. En ella se enrolan la mayoría de los autores.

Esta posición incluye en la categoría de lesa humanidad delitos cometidos por particulares, pero solo en los casos en que estos cuenten con la anuencia activa u omisiva del Estado, o bien suplanten su autoridad en un territorio determinado, sean capaces de legislar con algún grado de éxito y cuenten con reconocimiento internacional.

Estas características no se dieron en ningún momento de nuestra historia. Los grupos insurgentes argentinos nunca se impusieron por sobre el Estado Nacional y siempre fueron perseguidos por este último.

Esta verdad histórica incontrastable tuvo su acogida en la jurisprudencia nacional, desde el propio Juicio a las Juntas hasta los fallos de la Corte Suprema de Justicia en nuestro siglo. Las interpretaciones en otro sentido son contrarias a derecho y solo reflotan una perversa y falaz teoría que sostiene la existencia de dos demonios que luchaban entre sí. El Fiscal Palacín habla de un "conflicto armado!!!"

Después de los fallos de Corte Simón, Lariz Iriondo y Arancibia Clavel, de las sentencias del Tribunal Oral que juzgó a Etchecolatz y a Von Wernich en Argentina, no caben dudas de que aquí ocurrió un genocidio.

Este escenario jurídico desplaza por completo la temeraria idea de que pudieron haber ocurrido delitos de lesa humanidad cometidos por las organizaciones insurgentes de la década del 70. Solo hay genocidas, terroristas de estado y víctimas que hace tres décadas esperan la llegada de la justicia.

Por eso insistimos en la necesidad urgente de que la Procuración General de La Nación dicte instrucciones claras a todos los fiscales a fines de que estos hechos no vuelvan a reiterarse en todo el territorio nacional.
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