Por Jorge Caprano y Amilcar Andreassi *
Quienes suscribimos somos consejeros electos en el año 2007 para integrar el consejo de Administración de Coopetel.
En ese carácter convocamos a Asamblea General Ordinaria para el día 17 de mayo de 2008. En dicha Asamblea debían, entre otros temas, elegirse cuatro consejeros titulares y tres suplentes para la renovación parcial y anual del Consejo de Administración, único órgano de ejercicio colegiado y permanente de la cooperativa.
La convocatoria a asamblea se hizo en base al Estatuto Social 4° Reforma, ya que pese a haberse aprobado una quinta reforma en el año 2006, aún no se encontraba vigente por demoras en los organismos de control, a la fecha del llamado.
El día lunes 12 de mayo la Junta Electoral de Coopetel decide no tener por presentada a una de las listas, por no haber presentado en término los descargos ante las observaciones que ella misma les planteara.
Ese mismo día, llega a Coopetel la comunicación formal de que se habían concluido los trámites relativos a poner en vigencia la quinta reforma del Estatuto. Esto modifica un asunto que hace a la forma de desarrollo de las Asambleas, se elimina el voto por poder.
Ante esta situación, no pudiendo continuar con la convocatoria realizada para el día 17 de mayo con un estatuto que ya no podía ser aplicado, decidimos anular la convocatoria para ese día y volver a convocar a nueva asamblea para el día 14 de junio.
Estas decisiones se tomaron y ratificaron por parte del Consejo de Administración de Coopetel que integramos los días 13 y 15 de mayo. Es el Consejo de Administración el órgano estatutario con facultad para decidir sobre estas cuestiones (convocatoria, suspensión y/o anulación de un llamado a Asamblea), según lo que establece expresamente el estatuto social y las facultades implícitas que le otorga la ley de cooperativas en su artículo 68.
La decisión de anular y reconvocar a asamblea no se tomo en forma caprichosa, poderosas razones de orden jurídico, fáctico, y éticos relacionados con los principios del cooperativismo nos llevaron a tomarla, pese a saber que nos encontraríamos con la oposición de la única lista habilitada por la Junta Electoral. Sin embargo lejos estábamos de sospechar hasta donde podrían llegar con tal de ver concretados sus egoístas intereses, no podíamos imaginar que realizarían de hecho la asamblea anulada, con la instigación y anuencia de la sindicatura de Coopetel, ni mucho menos que pretenderían destituirnos y autonombrarse autoridades, recordando el oscuro pasado institucional de nuestro país que creíamos todos los argentinos queríamos dejar atrás para siempre.
Es nuestra responsabilidad como ciudadanos comprometidos con el sistema democrático y como autoridades electas de Coopetel tomar todas las medidas necesarias para revertir esta situación que carece de todo sustento legal, para asegurar los intereses de nuestra cooperativa y de los socios y empleados de Coopetel que se han visto engañados y manipulados por estas personas. Nuestro honor y compromiso social están en juego, haremos todo lo posible por castigar a los responsables que tanto daño le hacen a la Cooperativa que fundamos en El Bolsón con el fin de brindar servicios a toda su comunidad y no para ser utilizada como comité político o quiosco desde donde concretar los intereses de unos pocos.
Coopetel nos necesita este es el momento de recordar porque queremos tener en El Bolsón una cooperativa y no una simple empresa que responda solo a los intereses del mercado. Todos los socios somos los dueños de nuestra cooperativa y solo nosotros podemos decidir quienes serán nuestros representantes, queremos elegir y ser elegidos respetando nuestro sistema democrático y los procedimientos que nos dimos en nuestro estatuto, y nadie puede quitarnos ese derecho.
Si esta de acuerdo con nuestros principios y quiere a la cooperativa como nosotros, es tiempo de manifestarse. Pregúntese, ¿Es motivo suficiente correr 28 días una asamblea para destituir seis personas? ¿Qué más hay detrás de esto?
Jorge Caprano, Rene Peñas, Amilcar Andreassi, Víctor Hugo Aguila, Gisela Rudolph y Pablo Carretero.
* Amilcar Andreassi - DNI 10077567
Quienes suscribimos somos consejeros electos en el año 2007 para integrar el consejo de Administración de Coopetel.
En ese carácter convocamos a Asamblea General Ordinaria para el día 17 de mayo de 2008. En dicha Asamblea debían, entre otros temas, elegirse cuatro consejeros titulares y tres suplentes para la renovación parcial y anual del Consejo de Administración, único órgano de ejercicio colegiado y permanente de la cooperativa.
La convocatoria a asamblea se hizo en base al Estatuto Social 4° Reforma, ya que pese a haberse aprobado una quinta reforma en el año 2006, aún no se encontraba vigente por demoras en los organismos de control, a la fecha del llamado.
El día lunes 12 de mayo la Junta Electoral de Coopetel decide no tener por presentada a una de las listas, por no haber presentado en término los descargos ante las observaciones que ella misma les planteara.
Ese mismo día, llega a Coopetel la comunicación formal de que se habían concluido los trámites relativos a poner en vigencia la quinta reforma del Estatuto. Esto modifica un asunto que hace a la forma de desarrollo de las Asambleas, se elimina el voto por poder.
Ante esta situación, no pudiendo continuar con la convocatoria realizada para el día 17 de mayo con un estatuto que ya no podía ser aplicado, decidimos anular la convocatoria para ese día y volver a convocar a nueva asamblea para el día 14 de junio.
Estas decisiones se tomaron y ratificaron por parte del Consejo de Administración de Coopetel que integramos los días 13 y 15 de mayo. Es el Consejo de Administración el órgano estatutario con facultad para decidir sobre estas cuestiones (convocatoria, suspensión y/o anulación de un llamado a Asamblea), según lo que establece expresamente el estatuto social y las facultades implícitas que le otorga la ley de cooperativas en su artículo 68.
La decisión de anular y reconvocar a asamblea no se tomo en forma caprichosa, poderosas razones de orden jurídico, fáctico, y éticos relacionados con los principios del cooperativismo nos llevaron a tomarla, pese a saber que nos encontraríamos con la oposición de la única lista habilitada por la Junta Electoral. Sin embargo lejos estábamos de sospechar hasta donde podrían llegar con tal de ver concretados sus egoístas intereses, no podíamos imaginar que realizarían de hecho la asamblea anulada, con la instigación y anuencia de la sindicatura de Coopetel, ni mucho menos que pretenderían destituirnos y autonombrarse autoridades, recordando el oscuro pasado institucional de nuestro país que creíamos todos los argentinos queríamos dejar atrás para siempre.
Es nuestra responsabilidad como ciudadanos comprometidos con el sistema democrático y como autoridades electas de Coopetel tomar todas las medidas necesarias para revertir esta situación que carece de todo sustento legal, para asegurar los intereses de nuestra cooperativa y de los socios y empleados de Coopetel que se han visto engañados y manipulados por estas personas. Nuestro honor y compromiso social están en juego, haremos todo lo posible por castigar a los responsables que tanto daño le hacen a la Cooperativa que fundamos en El Bolsón con el fin de brindar servicios a toda su comunidad y no para ser utilizada como comité político o quiosco desde donde concretar los intereses de unos pocos.
Coopetel nos necesita este es el momento de recordar porque queremos tener en El Bolsón una cooperativa y no una simple empresa que responda solo a los intereses del mercado. Todos los socios somos los dueños de nuestra cooperativa y solo nosotros podemos decidir quienes serán nuestros representantes, queremos elegir y ser elegidos respetando nuestro sistema democrático y los procedimientos que nos dimos en nuestro estatuto, y nadie puede quitarnos ese derecho.
Si esta de acuerdo con nuestros principios y quiere a la cooperativa como nosotros, es tiempo de manifestarse. Pregúntese, ¿Es motivo suficiente correr 28 días una asamblea para destituir seis personas? ¿Qué más hay detrás de esto?
Jorge Caprano, Rene Peñas, Amilcar Andreassi, Víctor Hugo Aguila, Gisela Rudolph y Pablo Carretero.
* Amilcar Andreassi - DNI 10077567
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