Por Nelson Ávalos *
Que siga un solo camino /quien quiera ser sembrador
(Atahualpa Yupanqui)
Un conflicto mal llevado, mal negociado (me dan ganas de ponerlo entre comillas) por el Gobierno nacional y enrevesado por los adversarios del momento: los ruralistas, "el campo", "las entidades agrarias" y demás formas de llamarlos, tuvo como uno de sus resultados el que podríamos llamar "derechización del escenario político argentino".
La reaparición de personajes que se creía felizmente sepultados por el peso de una realidad que avanzaba hacia rumbos lejanos de los de sus propuestas, es parte de un proceso digno del realismo mágico. Pero no por bien latinoamericana, esta situación debería ser vista por el campo popular y la izquierda como una derrota. Siempre hay un margencito pa' la esperanza…
Hay que decirlo. La derrota existe más en nuestros traumáticos recuerdos de guerra fría y caída de Muro que en lo que deberíamos ver como nuestra realidad, hoy que en el Continente del Sur soplan vientos aromados de rebeldía revolucionaria.
Ahora bien. Ver detrás del sotreta de Miguens, oligarca de la Sociedad Rural, en una charla con periodistas, a una importante compañera de la izquierda es duro, compañeras y compañeros. El ver en las marchas del campo entre comillas las banderas del Partido Comunista Revolucionario, a las del MST… y de la CCC… dio ganas de llorar… Porque del otro lado, en el de "los K", estaban las banderas de otras esquirlas de la izquierda…
Pregunto: ¿vamos a creer que realmente el PJ se divide, que nuevamente la CGT hace lo propio? ¿Cuántas veces lo han hecho ya? Y lo peor de todo: ¿Cuál ha sido siempre el resultado, sino el advenimiento de otro miembro del partido hegemónico (o sea el del Poder de siempre) accediendo al gobierno?
Antes… Antes de la Dictadura… y un tiempito después también ¿recuerdan?, se hablaba dentro y fuera de cualquier partido de temas que raramente forman parte del discurso de los actores de la política actual; verbigracia: liberación, revolución social, soberanía política, económica y social, imperialismo, antiimperialismo, marxismo, socialismo… comunismo… anarquismo… Ni hablar de que en las Unidades Básicas, Comités, Casa del Pueblo, etc., hoy se converse, se eduque la militancia sobre esos temas…
Vengo a mí realidad... Al lugar en el que habito. Queda en el noroeste de la provincia del Chubut, en la cordillera. Lo rodea una belleza increíble… Pero da lástima aquí el bajo nivel de discusión política de los que ocupan cargos dirigenciales. La política aquí es la capacidad de conseguir del gobernante de turno la plata para tal o cual obra. Eso es todo. Es anunciar Obra Pública y dádivas. "¡¡¡2.001.870 pesos en obras en la localidad de El Hoyoooo!!! ¡¡¡114 subsidios!!! ¡¡¡Aportes por 280.000 pesooooos!!! , vocifera el locutor oficial después del discurso lamentable del Intendente y del vacío y lamentable del Gobernador. La política como show… Eso es, para ellos, la Política...
Pero bueno… ¿No fueron un show los 125 días de "conflicto campo-Gobierno"? Y el resultado más palpable fue la "derechización", la re aparición de lo más detestable de la política argentina. Y la proyección de los "tapados" de la derecha, como es el caso del Gobernador chubutense que visitó El Hoyo el sábado 26 de junio.
Ante eso, tenemos el deber, si no queremos traicionar un par de siglos de lucha popular, de persecuciones, rebeliones, revoluciones, desterrados, presos; de combate a las dictaduras; de cultura, poesía, canciones, utopías, mártires, pueblos marginados…; de belleza en el pensamiento, en el arte, en la vida; … tenemos el deber de izquierdizar nuestras posturas. Revolucionarnos para revolucionar. Re- pensarnos para pensar… Y unificar el abrazo. No queda otra.
(En el medio, una pregunta suelta…: ¿la derecha fue capaz alguna vez siquiera de concebir la belleza?…)
Un viejo sabio me enseñó una vez lo que es la realidad... Dijo que es lo que fue, es decir el pasado, nuestra historia personal y social; lo que es, es decir, el presente, lo que nos pasa ahora; y lo que será; es decir, los sueños, lo que queremos que sea… O sea, el futuro. Pasado, presente y futuro forman nuestra Realidad, dijo…
Estoy sentado ante una computadora y escribo. Cada tanto veo por la ventana cómo se va la tarde… Es mi ahora, mi presente... Soy parte del colectivo de una FM comunitaria y luchadora. Soy cantor… trovador… militante… Recuerdo mi historia mientras escribo. Mi pasado. De dónde vengo. Vengo de donde vienen mis abuelos y mis viejos… Todos de abajo. Peones, empleados, laburantes…
Recuerdo que la realidad también incluye el futuro y me siento mejor, después de la bronca de los discursos vacíos y el reparto de plata compravotos…
Ahora confieso que me puse a cantar, porque en mi realidad actual está el futuro que quiero. No canto cualquier Futuro. Canto el aprendido de los que soñaron y cantaron antes. Canto el Futuro que soñaron Moreno, San Martín, Bolívar… (Revolución francesa mediante). El que soñaron Zapata y Sandino… El de los libertarios; el que vislumbraron Antonio Soto y Facón Grande; el Futuro del Che, el de Fidel; el que cantan Atahualpa, la Violeta y Víctor y Alfredo y Armando y el Chele y el Mochi y la Panchi y el Ramón (y en ellos tantos otros). Canto el Futuro que gritó Evita, el de los 30.000, el de Rodolfo Walsh y tantos compañeros valientes; el que nos dicen Osvaldo Bayer, el Tato Iglesias; el Futuro de las Madres de siempre; el de los pu peñi y pu lamguen mapuche que nos enseñan tanto del Futuro. El que empieza a nombrar de nuevo nuestro Continente. El que no tiene miedo de llamarse Socialismo. El de la solidaridad y la revolución. El de un mundo donde quepan muchos mundos… El de barajar y dar de nuevo…
La canción que canto dice que el Futuro que queremos está aquí, hoy; que un abrazo izquierdo y colectivo lo hará nuestro. Y que lo hará verdad.
Abrazo zurdo y patagónico para todas y todos.
* DNI es 18.000.947
Cordillera chubutana
Que siga un solo camino /quien quiera ser sembrador
(Atahualpa Yupanqui)
Un conflicto mal llevado, mal negociado (me dan ganas de ponerlo entre comillas) por el Gobierno nacional y enrevesado por los adversarios del momento: los ruralistas, "el campo", "las entidades agrarias" y demás formas de llamarlos, tuvo como uno de sus resultados el que podríamos llamar "derechización del escenario político argentino".
La reaparición de personajes que se creía felizmente sepultados por el peso de una realidad que avanzaba hacia rumbos lejanos de los de sus propuestas, es parte de un proceso digno del realismo mágico. Pero no por bien latinoamericana, esta situación debería ser vista por el campo popular y la izquierda como una derrota. Siempre hay un margencito pa' la esperanza…
Hay que decirlo. La derrota existe más en nuestros traumáticos recuerdos de guerra fría y caída de Muro que en lo que deberíamos ver como nuestra realidad, hoy que en el Continente del Sur soplan vientos aromados de rebeldía revolucionaria.
Ahora bien. Ver detrás del sotreta de Miguens, oligarca de la Sociedad Rural, en una charla con periodistas, a una importante compañera de la izquierda es duro, compañeras y compañeros. El ver en las marchas del campo entre comillas las banderas del Partido Comunista Revolucionario, a las del MST… y de la CCC… dio ganas de llorar… Porque del otro lado, en el de "los K", estaban las banderas de otras esquirlas de la izquierda…
Pregunto: ¿vamos a creer que realmente el PJ se divide, que nuevamente la CGT hace lo propio? ¿Cuántas veces lo han hecho ya? Y lo peor de todo: ¿Cuál ha sido siempre el resultado, sino el advenimiento de otro miembro del partido hegemónico (o sea el del Poder de siempre) accediendo al gobierno?
Antes… Antes de la Dictadura… y un tiempito después también ¿recuerdan?, se hablaba dentro y fuera de cualquier partido de temas que raramente forman parte del discurso de los actores de la política actual; verbigracia: liberación, revolución social, soberanía política, económica y social, imperialismo, antiimperialismo, marxismo, socialismo… comunismo… anarquismo… Ni hablar de que en las Unidades Básicas, Comités, Casa del Pueblo, etc., hoy se converse, se eduque la militancia sobre esos temas…
Vengo a mí realidad... Al lugar en el que habito. Queda en el noroeste de la provincia del Chubut, en la cordillera. Lo rodea una belleza increíble… Pero da lástima aquí el bajo nivel de discusión política de los que ocupan cargos dirigenciales. La política aquí es la capacidad de conseguir del gobernante de turno la plata para tal o cual obra. Eso es todo. Es anunciar Obra Pública y dádivas. "¡¡¡2.001.870 pesos en obras en la localidad de El Hoyoooo!!! ¡¡¡114 subsidios!!! ¡¡¡Aportes por 280.000 pesooooos!!! , vocifera el locutor oficial después del discurso lamentable del Intendente y del vacío y lamentable del Gobernador. La política como show… Eso es, para ellos, la Política...
Pero bueno… ¿No fueron un show los 125 días de "conflicto campo-Gobierno"? Y el resultado más palpable fue la "derechización", la re aparición de lo más detestable de la política argentina. Y la proyección de los "tapados" de la derecha, como es el caso del Gobernador chubutense que visitó El Hoyo el sábado 26 de junio.
Ante eso, tenemos el deber, si no queremos traicionar un par de siglos de lucha popular, de persecuciones, rebeliones, revoluciones, desterrados, presos; de combate a las dictaduras; de cultura, poesía, canciones, utopías, mártires, pueblos marginados…; de belleza en el pensamiento, en el arte, en la vida; … tenemos el deber de izquierdizar nuestras posturas. Revolucionarnos para revolucionar. Re- pensarnos para pensar… Y unificar el abrazo. No queda otra.
(En el medio, una pregunta suelta…: ¿la derecha fue capaz alguna vez siquiera de concebir la belleza?…)
Un viejo sabio me enseñó una vez lo que es la realidad... Dijo que es lo que fue, es decir el pasado, nuestra historia personal y social; lo que es, es decir, el presente, lo que nos pasa ahora; y lo que será; es decir, los sueños, lo que queremos que sea… O sea, el futuro. Pasado, presente y futuro forman nuestra Realidad, dijo…
Estoy sentado ante una computadora y escribo. Cada tanto veo por la ventana cómo se va la tarde… Es mi ahora, mi presente... Soy parte del colectivo de una FM comunitaria y luchadora. Soy cantor… trovador… militante… Recuerdo mi historia mientras escribo. Mi pasado. De dónde vengo. Vengo de donde vienen mis abuelos y mis viejos… Todos de abajo. Peones, empleados, laburantes…
Recuerdo que la realidad también incluye el futuro y me siento mejor, después de la bronca de los discursos vacíos y el reparto de plata compravotos…
Ahora confieso que me puse a cantar, porque en mi realidad actual está el futuro que quiero. No canto cualquier Futuro. Canto el aprendido de los que soñaron y cantaron antes. Canto el Futuro que soñaron Moreno, San Martín, Bolívar… (Revolución francesa mediante). El que soñaron Zapata y Sandino… El de los libertarios; el que vislumbraron Antonio Soto y Facón Grande; el Futuro del Che, el de Fidel; el que cantan Atahualpa, la Violeta y Víctor y Alfredo y Armando y el Chele y el Mochi y la Panchi y el Ramón (y en ellos tantos otros). Canto el Futuro que gritó Evita, el de los 30.000, el de Rodolfo Walsh y tantos compañeros valientes; el que nos dicen Osvaldo Bayer, el Tato Iglesias; el Futuro de las Madres de siempre; el de los pu peñi y pu lamguen mapuche que nos enseñan tanto del Futuro. El que empieza a nombrar de nuevo nuestro Continente. El que no tiene miedo de llamarse Socialismo. El de la solidaridad y la revolución. El de un mundo donde quepan muchos mundos… El de barajar y dar de nuevo…
La canción que canto dice que el Futuro que queremos está aquí, hoy; que un abrazo izquierdo y colectivo lo hará nuestro. Y que lo hará verdad.
Abrazo zurdo y patagónico para todas y todos.
* DNI es 18.000.947
Cordillera chubutana
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