Por Frente de Unidad Revolucionario
Publicado en Poder Obrero número 12 – Octubre 2008
La crisis mundial sigue profundizándose y no quedan dudas que se traducirá en todos los países y en todos los rubros. También llegará a las petroleras. La rentabilidad de las operadoras petroleras (Pan American, Repsol, Petrobrás, Oxy y otras) ha comenzado a reducirse y seguramente se achicará cada vez más.
El barril de petróleo que llegó a cotizar cerca de los 140 dólares, ya bajó a 100 y podría seguir reduciendo su valor internacional.
Pero al mismo tiempo, la gran recesión que se ha instalado a nivel mundial hará que se disminuya el consumo y por consiguiente caerá la demanda de los commodities, incluido los recursos naturales, particularmente el petróleo.
Si se consume menos, hace falta producir menos y si eso sucede se necesitará utilizar menos petróleo que es una de las bases fundamentales para producir en el mundo entero, además de que se reducirán los consumos de combustibles.
Esto significará una reducción en la rentabilidad de las petroleras, aunque en la Argentina podrán continuar con elevados niveles de rentabilidad ya que el costo de producción es bajo y las ganancias elevadas.
Las petroleras en la Argentina pagan muy bajas regalías, salarios disminuidos desde la devaluación del 2002 y los costos de producción se traducen como inferiores.
Pero la voracidad del sistema capitalista hace que las petroleras no solo quieran mantener sus abultadas ganancias que según el Nuevo Proyecto Energético Latinoamericano (NPEL) son de 42.000 pesos por minuto- sino que aspiran a aumentarlas aún más; de ahí que sigan haciendo lobby para que se les reduzcan las retenciones a las exportaciones de petróleo. Lo que las empresas no están dispuestas es a reducir sus ganancias y eso es lo que está planteado.
Kristina, Das Neves y Mansilla
Frente a este panorama aparece un trío que se las trae. Kristina Kirchner, Mario Das Das Neves y Mario Mansilla (secretario general del Sindicato Petrolero Chubut) son los mentores de buscar soluciones para que las petroleras sigan ganando mucha plata. Ahí no hay peleas ni enfrentamientos, el grupete fantástico tiene como acuerdo fundamental gobernar y permitir que los empresarios del petróleo se llenen los bolsillos a costa de nuestros recursos naturales.
Es desde el Gobierno Nacional, el Chubutense y el Sindicato Petroleros Privados desde donde se impulsa que se reduzcan las retenciones a las exportaciones petroleras. En la actualidad las operadoras no pagan retenciones hasta los 42 dólares por barril y el resto se lo queda el Estado Nacional, es decir que ha llegado a quedarse con casi 100 dólares por barril exportado aunque ahora le estarían quedando unos 50 dólares por cada barril.
Por un lado Kristina continúa los pasos de Néstor y gobierna para las petroleras y mineras reduciéndoles impuestos o bajándoles las retenciones.
Por el otro Das Neves le garantiza a Pan American la explotación por 40 años del yacimiento mas importante del país (Cerro Dragón) e intenta quedarse con un puñadito mas de plata ya que el Estado Nacional liquida las regalías después de descontar las retenciones.
Y finalmente Mansilla ya dijo que está dispuesto a pelear por la baja en las retenciones petroleras y no duda en afirmar que el aumento salarial de los petroleros será del 19%, lo mismo que acordó Kristina con los empresarios, y se seguirá garantizando la “paz social”. Por Mansilla no habrá luchas y el nuevo Convenio Colectivo de Trabajo seguramente no será el que se elaboró con los delegados de base, sino el que las petroleras quieran firmar.
El cambo es casi perfecto para las petroleras y explosivo para el Estado y los trabajadores del sector. Si esto se da tal como esta planteado el Estado financiará el mantenimiento de la rentabilidad de las empresas y al mismo tiempo les posibilitará a las operadoras pagar el aumento y sostener el nuevo Convenio Colectivo de Trabajo con aportes estatales.
La nota completa está disponible acá:
Publicado en Poder Obrero número 12 – Octubre 2008
La crisis mundial sigue profundizándose y no quedan dudas que se traducirá en todos los países y en todos los rubros. También llegará a las petroleras. La rentabilidad de las operadoras petroleras (Pan American, Repsol, Petrobrás, Oxy y otras) ha comenzado a reducirse y seguramente se achicará cada vez más.
El barril de petróleo que llegó a cotizar cerca de los 140 dólares, ya bajó a 100 y podría seguir reduciendo su valor internacional.
Pero al mismo tiempo, la gran recesión que se ha instalado a nivel mundial hará que se disminuya el consumo y por consiguiente caerá la demanda de los commodities, incluido los recursos naturales, particularmente el petróleo.
Si se consume menos, hace falta producir menos y si eso sucede se necesitará utilizar menos petróleo que es una de las bases fundamentales para producir en el mundo entero, además de que se reducirán los consumos de combustibles.
Esto significará una reducción en la rentabilidad de las petroleras, aunque en la Argentina podrán continuar con elevados niveles de rentabilidad ya que el costo de producción es bajo y las ganancias elevadas.
Las petroleras en la Argentina pagan muy bajas regalías, salarios disminuidos desde la devaluación del 2002 y los costos de producción se traducen como inferiores.
Pero la voracidad del sistema capitalista hace que las petroleras no solo quieran mantener sus abultadas ganancias que según el Nuevo Proyecto Energético Latinoamericano (NPEL) son de 42.000 pesos por minuto- sino que aspiran a aumentarlas aún más; de ahí que sigan haciendo lobby para que se les reduzcan las retenciones a las exportaciones de petróleo. Lo que las empresas no están dispuestas es a reducir sus ganancias y eso es lo que está planteado.
Kristina, Das Neves y Mansilla
Frente a este panorama aparece un trío que se las trae. Kristina Kirchner, Mario Das Das Neves y Mario Mansilla (secretario general del Sindicato Petrolero Chubut) son los mentores de buscar soluciones para que las petroleras sigan ganando mucha plata. Ahí no hay peleas ni enfrentamientos, el grupete fantástico tiene como acuerdo fundamental gobernar y permitir que los empresarios del petróleo se llenen los bolsillos a costa de nuestros recursos naturales.
Es desde el Gobierno Nacional, el Chubutense y el Sindicato Petroleros Privados desde donde se impulsa que se reduzcan las retenciones a las exportaciones petroleras. En la actualidad las operadoras no pagan retenciones hasta los 42 dólares por barril y el resto se lo queda el Estado Nacional, es decir que ha llegado a quedarse con casi 100 dólares por barril exportado aunque ahora le estarían quedando unos 50 dólares por cada barril.
Por un lado Kristina continúa los pasos de Néstor y gobierna para las petroleras y mineras reduciéndoles impuestos o bajándoles las retenciones.
Por el otro Das Neves le garantiza a Pan American la explotación por 40 años del yacimiento mas importante del país (Cerro Dragón) e intenta quedarse con un puñadito mas de plata ya que el Estado Nacional liquida las regalías después de descontar las retenciones.
Y finalmente Mansilla ya dijo que está dispuesto a pelear por la baja en las retenciones petroleras y no duda en afirmar que el aumento salarial de los petroleros será del 19%, lo mismo que acordó Kristina con los empresarios, y se seguirá garantizando la “paz social”. Por Mansilla no habrá luchas y el nuevo Convenio Colectivo de Trabajo seguramente no será el que se elaboró con los delegados de base, sino el que las petroleras quieran firmar.
El cambo es casi perfecto para las petroleras y explosivo para el Estado y los trabajadores del sector. Si esto se da tal como esta planteado el Estado financiará el mantenimiento de la rentabilidad de las empresas y al mismo tiempo les posibilitará a las operadoras pagar el aumento y sostener el nuevo Convenio Colectivo de Trabajo con aportes estatales.
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