Por Sergio Camarano *
En mi anterior publicación les conté algunas de las conductas de la viuda del Capitán del Santa Lucía, hable de sus ingresos, cuentas en el país y en el exterior, algunas a nombre de ella y de un profesional argentino residente en la Provincia de Mendoza y demás conductas sospechosas, de mis reuniones secretas con capitanes de otros barcos y con familiares de desaparecidos. Y concluí mi relato describiendo mi primera visita al Juzgado Federal de Rawson y la charla que mantuve con el impresentable de Miquelarena.
A continuación les cuento el después de mi primera visita al Órgano Judicial.
Una vez que tomo vista del expediente me dirijo a la Fiscalía de Estado que se encuentra a cincuenta metros del Juzgado pero cuando salgo advierto un Peugeot 405 Bordó con cuatro hombres adentro que me miraban en forma intimidatoria y me siguen a paso de hombre razón por la cual sigo caminando unos ciento cincuenta metros hasta donde había dejado el auto.
Esta gente me acompaña hasta el vehículo que me habían prestado y me siguen hasta la puerta del Hotel donde me encontraba alojado.
La persecución se inició en Rawson y concluyó en Trelew.
Recordemos que lo único que hice en el juzgado fue pedir ayuda en la investigación, fotocopias de la causa y la testimonial de la dueña de la empresa y de un dependiente de la Agencia Marítima.
Una vez que ingreso al Hotel Libertador, la recepcionista gira su cabeza hacía la derecha y le dice en voz baja a un hombre que estaba sentado en el restaurante, es ése. Cuando me dirijo a mi habitación encuentro que la de al lado se encontraba abierta y en su interior había un hombre que por su condición social difícilmente estaría en condiciones de pagarse una estadía en dicho Hotel. Su fisonomía, forma de vestir, la manera intimidatoria en que me miró las dos veces que pasé por su puerta y que la misma se encontrare siempre abierta me llevaron a pensar que me estaban vigilando, razón por la cual mi custodio se acerco a su puerta lo miro fijamente a los ojos y éste temeroso o sorprendido cerró la puerta de su habitación.
Frente a los hechos no quedó más remedio que armar las valijas, dejar la ciudad de Trelew y alojarnos en otro hotel con identidades falsas.
Les recuerdo que si bien ya había tenido reuniones con familiares de desaparecidos y capitanes de otros barcos, hasta ese momento nadie había notado mi presencia en la ciudad, el problema surgió luego de mi visita al Juzgado Federal y les recuerdo que lo único que hice fue pedir una audiencia testimonial, fotocopias de la causa y la colaboración del juzgado en la investigación.
Dado los acontecimientos y frente a tremenda persecución por parte de vaya uno a saber quién decido llamar por teléfono a la viuda, omitiendo contarle mis conversaciones con familiares de desaparecidos y capitanes, y la increpo a los gritos y en los peores términos que se puedan imaginar para que me diga que estaba pasando en el sur, por qué me siguen a todos lados en forma intimidatoria, a pie, en auto, se meten en el hotel donde estaba alojado y me pinchan en teléfono celular.
La Señora me dice que me tranquilice y si quiero saber que es lo que pasa con los barcos que me dirija a la casa de su madre y le pida las llaves de un galpón que ella posee en el puerto de Rawson, que su marido guardaba en el mismo documentación que puede aclararme el panorama.
Me dirijo al galpón y empiezo a revisar el mismo y entre otras tantas cosas encuentro:
Una planilla que llevaba como título la siguiente leyenda “FORMULARIO PARA VOLCADO DE CODIFICACION” “CERTIFICADO DE DEFUNCION FETAL”.
Frente los testimonios recibidos y el hallazgo de la planilla decido llamar a un familiar con conocimientos de medicina y me dice que dicho formulario es utilizado para dejar registrados los casos en los cuales las personas mueren antes de nacer.
Por que un Capitán de un Buque pesquero tiene en su poder un Certificado de Defunción Fetal? Leer más
* DNI 23.768.668.
Correo electrónico sergiocamarano@gmail.com
En mi anterior publicación les conté algunas de las conductas de la viuda del Capitán del Santa Lucía, hable de sus ingresos, cuentas en el país y en el exterior, algunas a nombre de ella y de un profesional argentino residente en la Provincia de Mendoza y demás conductas sospechosas, de mis reuniones secretas con capitanes de otros barcos y con familiares de desaparecidos. Y concluí mi relato describiendo mi primera visita al Juzgado Federal de Rawson y la charla que mantuve con el impresentable de Miquelarena.
A continuación les cuento el después de mi primera visita al Órgano Judicial.
Una vez que tomo vista del expediente me dirijo a la Fiscalía de Estado que se encuentra a cincuenta metros del Juzgado pero cuando salgo advierto un Peugeot 405 Bordó con cuatro hombres adentro que me miraban en forma intimidatoria y me siguen a paso de hombre razón por la cual sigo caminando unos ciento cincuenta metros hasta donde había dejado el auto.
Esta gente me acompaña hasta el vehículo que me habían prestado y me siguen hasta la puerta del Hotel donde me encontraba alojado.
La persecución se inició en Rawson y concluyó en Trelew.
Recordemos que lo único que hice en el juzgado fue pedir ayuda en la investigación, fotocopias de la causa y la testimonial de la dueña de la empresa y de un dependiente de la Agencia Marítima.
Una vez que ingreso al Hotel Libertador, la recepcionista gira su cabeza hacía la derecha y le dice en voz baja a un hombre que estaba sentado en el restaurante, es ése. Cuando me dirijo a mi habitación encuentro que la de al lado se encontraba abierta y en su interior había un hombre que por su condición social difícilmente estaría en condiciones de pagarse una estadía en dicho Hotel. Su fisonomía, forma de vestir, la manera intimidatoria en que me miró las dos veces que pasé por su puerta y que la misma se encontrare siempre abierta me llevaron a pensar que me estaban vigilando, razón por la cual mi custodio se acerco a su puerta lo miro fijamente a los ojos y éste temeroso o sorprendido cerró la puerta de su habitación.
Frente a los hechos no quedó más remedio que armar las valijas, dejar la ciudad de Trelew y alojarnos en otro hotel con identidades falsas.
Les recuerdo que si bien ya había tenido reuniones con familiares de desaparecidos y capitanes de otros barcos, hasta ese momento nadie había notado mi presencia en la ciudad, el problema surgió luego de mi visita al Juzgado Federal y les recuerdo que lo único que hice fue pedir una audiencia testimonial, fotocopias de la causa y la colaboración del juzgado en la investigación.
Dado los acontecimientos y frente a tremenda persecución por parte de vaya uno a saber quién decido llamar por teléfono a la viuda, omitiendo contarle mis conversaciones con familiares de desaparecidos y capitanes, y la increpo a los gritos y en los peores términos que se puedan imaginar para que me diga que estaba pasando en el sur, por qué me siguen a todos lados en forma intimidatoria, a pie, en auto, se meten en el hotel donde estaba alojado y me pinchan en teléfono celular.
La Señora me dice que me tranquilice y si quiero saber que es lo que pasa con los barcos que me dirija a la casa de su madre y le pida las llaves de un galpón que ella posee en el puerto de Rawson, que su marido guardaba en el mismo documentación que puede aclararme el panorama.
Me dirijo al galpón y empiezo a revisar el mismo y entre otras tantas cosas encuentro:
Una planilla que llevaba como título la siguiente leyenda “FORMULARIO PARA VOLCADO DE CODIFICACION” “CERTIFICADO DE DEFUNCION FETAL”.
Frente los testimonios recibidos y el hallazgo de la planilla decido llamar a un familiar con conocimientos de medicina y me dice que dicho formulario es utilizado para dejar registrados los casos en los cuales las personas mueren antes de nacer.
Por que un Capitán de un Buque pesquero tiene en su poder un Certificado de Defunción Fetal? Leer más
* DNI 23.768.668.
Correo electrónico sergiocamarano@gmail.com
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