Traducción al castellano: Alicia Jardel
Fuente: El Correo de la Diaspora Latinoamericaine
Invitado por la Cátedra de las Américas de la Universidad de Paris I - La Sorbona, el ex ministro de Economía de Argentina, Domingo Cavallo, debía pronunciar una conferencia sobre un tema de su especialidad: las recetas monetaristas que arruinaron las economías de los países emergentes.
Más de 50 personas esperaban en la sala la llegada de Cavallo. La conferencia era pública y fue difundida por mail y anunciada en el sitio internet de la Cátedra de las Américas: http://chairedesameriques.univ-paris1.fr
En la sala de conferencias del 6to piso de la Casa de Ciencias Económicas de la Universidad (Boulevard del Hospital 102, 13avo Distrito de Paris), se encontraban los estudiantes de la Maestría en Economía y Relaciones Internacionales así como estudiantes, profesores e investigadores de otras universidades francesas interesados por los temas argentinos.
Antes de la llegada del conferencista, una asociación (creada en Francia), el Colectivo Argentino por la Memoria, comienza a distribuir artículos de prensa y resúmenes sobre la trayectoria intelectual y política de el que la sociedad argentina había dimitido de su puesto de ministro con el célebre concierto de cacerolas el 19 y 20 de diciembre de 2001.
Durante la espera, el público leía atentamente esa documentación. El conferencista, retrasado, fue presentado por el responsable de la Cátedra.
Antes de comenzar su conferencia Cavallo pregunta al público si debe expresarse en español o en inglés.
La respuesta desde el fondo de la sala fue contundente, de una acústica que el ex ministro de Economía no llegará a borrar de su memoria: el muy célebre concierto de cacerolas.
Cacerolas para expresar la indignación y la vergüenza. Un concierto de cacerolas para decir BASTA y pedir que se vaya de la Universidad pública.
Para manifestar la vergüenza de ver a un hombre, buscado por la justicia argentina, enseñar en Francia la doctrina que llevó a la Argentina al derrumbe.
D. Cavallo no puede soportar la humillación. Entonces se pone a agitar los brazos y a gritar con todas sus fuerzas contra esos “izquierdistas”; luego rectifica, mezclando las etiquetas, grita contra esos “fascistas” que no lo dejan hablar y que exigen que la conferencia sea anulada.
Las cacerolas son remplazadas por un intercambio acalorado entre el ex ministro y numerosas personas del público. Los argumentos de unos y otros son de mas en mas audibles; la experiencia de la quiebra argentina no deja a nadie indiferente.
El ex ministro se pone rojo de cólera. Esto dura exactamente 60 minutos. Los responsables de la Cátedra piden entonces la ayuda del personal de seguridad de la Universidad. Llega una mujer e irrumpe en la sala agitando un manojo de llaves.
¿Un concierto de llaves sosteniendo el concierto de cacerolas? No, la señora es una guardiana de la Universidad. Muy enojada exige primero que en la universidad francesa se expresen en francés.
Estudiantes de la Universidad comienzan a explicarle la situación. Otros agregan que la Universidad ha invitado a un delincuente buscado por la justicia argentina. Ella concluye entonces, con autoridad, que los profesores-organizadores han concebido mal la conferencia y hay que anularla. Gritando “afuera todo el mundo”, hace evacuar la sala, apaga las luces y cierra la puerta con llave.
La expresión patética de los organizadores de la conferencia, tres economistas, profesores de La Sorbona por añadidura, indica que no han comprendido aun la problemática de la crisis argentina.
Será necesario por lo tanto que esos profesores comprendan la amplitud de la catástrofe de la cual Cavallo es responsable.
También deberán sacar las conclusiones de la gravedad de su gesto: haber invitado a la Universidad de Paris al artesano de un modelo económico desastroso.
No se puede ignorar impunemente las consecuencias de actos intelectuales y las complicidades a favor de políticas económicas fatales.
El video de Cavallo en la Sorbona está disponible acá
Fuente: El Correo de la Diaspora Latinoamericaine
Invitado por la Cátedra de las Américas de la Universidad de Paris I - La Sorbona, el ex ministro de Economía de Argentina, Domingo Cavallo, debía pronunciar una conferencia sobre un tema de su especialidad: las recetas monetaristas que arruinaron las economías de los países emergentes.
Más de 50 personas esperaban en la sala la llegada de Cavallo. La conferencia era pública y fue difundida por mail y anunciada en el sitio internet de la Cátedra de las Américas: http://chairedesameriques.univ-paris1.fr
En la sala de conferencias del 6to piso de la Casa de Ciencias Económicas de la Universidad (Boulevard del Hospital 102, 13avo Distrito de Paris), se encontraban los estudiantes de la Maestría en Economía y Relaciones Internacionales así como estudiantes, profesores e investigadores de otras universidades francesas interesados por los temas argentinos.
Antes de la llegada del conferencista, una asociación (creada en Francia), el Colectivo Argentino por la Memoria, comienza a distribuir artículos de prensa y resúmenes sobre la trayectoria intelectual y política de el que la sociedad argentina había dimitido de su puesto de ministro con el célebre concierto de cacerolas el 19 y 20 de diciembre de 2001.
Durante la espera, el público leía atentamente esa documentación. El conferencista, retrasado, fue presentado por el responsable de la Cátedra.
Antes de comenzar su conferencia Cavallo pregunta al público si debe expresarse en español o en inglés.
La respuesta desde el fondo de la sala fue contundente, de una acústica que el ex ministro de Economía no llegará a borrar de su memoria: el muy célebre concierto de cacerolas.
Cacerolas para expresar la indignación y la vergüenza. Un concierto de cacerolas para decir BASTA y pedir que se vaya de la Universidad pública.
Para manifestar la vergüenza de ver a un hombre, buscado por la justicia argentina, enseñar en Francia la doctrina que llevó a la Argentina al derrumbe.
D. Cavallo no puede soportar la humillación. Entonces se pone a agitar los brazos y a gritar con todas sus fuerzas contra esos “izquierdistas”; luego rectifica, mezclando las etiquetas, grita contra esos “fascistas” que no lo dejan hablar y que exigen que la conferencia sea anulada.
Las cacerolas son remplazadas por un intercambio acalorado entre el ex ministro y numerosas personas del público. Los argumentos de unos y otros son de mas en mas audibles; la experiencia de la quiebra argentina no deja a nadie indiferente.
El ex ministro se pone rojo de cólera. Esto dura exactamente 60 minutos. Los responsables de la Cátedra piden entonces la ayuda del personal de seguridad de la Universidad. Llega una mujer e irrumpe en la sala agitando un manojo de llaves.
¿Un concierto de llaves sosteniendo el concierto de cacerolas? No, la señora es una guardiana de la Universidad. Muy enojada exige primero que en la universidad francesa se expresen en francés.
Estudiantes de la Universidad comienzan a explicarle la situación. Otros agregan que la Universidad ha invitado a un delincuente buscado por la justicia argentina. Ella concluye entonces, con autoridad, que los profesores-organizadores han concebido mal la conferencia y hay que anularla. Gritando “afuera todo el mundo”, hace evacuar la sala, apaga las luces y cierra la puerta con llave.
La expresión patética de los organizadores de la conferencia, tres economistas, profesores de La Sorbona por añadidura, indica que no han comprendido aun la problemática de la crisis argentina.
Será necesario por lo tanto que esos profesores comprendan la amplitud de la catástrofe de la cual Cavallo es responsable.
También deberán sacar las conclusiones de la gravedad de su gesto: haber invitado a la Universidad de Paris al artesano de un modelo económico desastroso.
No se puede ignorar impunemente las consecuencias de actos intelectuales y las complicidades a favor de políticas económicas fatales.
El video de Cavallo en la Sorbona está disponible acá
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