Por Abla Carballo *
Fotos: Germán Pasini
Fotos: Germán Pasini
El estreno teatral de “MINAS”, mostró varios NO a intensos conflictos producidos en el seno de la sociedad argentina, por el lugar que ocupan en relación con los hombres, con ellas y entre ellas mismas.
El cambio que viene produciendo la mujer para adueñarse de la parte que le corresponde es lo que Diana Amiama, autora de la pieza, puso de manifiesto a través de un encuentro entre amigas íntimas.
La obra propone caminos que pueden tomar las mujeres para lograr fortaleza en su personalidad y además, establecer lazos auténticos y poderosos.
Es un pantallazo, un segmento en el que, como espejo, se verán reflejadas muchas mujeres enfrentadas a problemas, compromisos, realidades asumidas sea por el mandato social, educación o estructura personal.
En el transcurso de la puesta, dirigida por María de los Ángeles Fernández, no hubo pacatería porque el diálogo relevante, informal, rico por las diferentes experiencias de vida de las protagonistas, no quedó en lo superficial entre las tres amigas femeninas. Y dijeron cada una lo suyo, a su manera. Alguna medrosa, otra con gran autoestima y la tercera que eleva el tiro para inducir y por momentos presionar, poniendo sobre el tapete sus comportamientos en decadencia; porque hay mucho más en la vida que acatar obediente para tirar del carro, para mantener estructuras que deprimen y alejan del sentimiento más importante de la esencia humana: el Amor.
Una carga de afectividad en medio de la exacerbación provocada por la confrontación de Adela, excéntrica, atrevida pero sola, (Monira Daher), pudieron desatar actitudes petulantes, tal vez perimidas de Yiya (Ana Del Moro) y recordar a Eugenia (Gabriela Castellini) la necesidad de renovar el enamoramiento con su marido, Enrique (Vicente Calvo).
Teatro de la Cuadra proporcionó, otra vez, materia prima para el comentario y aunque no era su intención, es probable que removiera en los espectadores alguna reflexión que de lugar a una sociedad más personalizada, más creadora.
Es lo que trascendió de la sencilla historia realizada por actores locales, quienes revelaron una veta excelente de histrionismo.
Esquel posee gente con talento, capaces de superar el stress cotidiano con un trabajo extra, para brindar momentos gratos a todos los que se atrevan.
La autora de la obra, Diana Amiama, se lleva un ramo de flores
Cabe recordar, que Teatro de la Cuadra se inició con María de los Ángeles Fernández y Fabián Terrone en el 2000, con aquella mujer de la calle y un romántico que simula pasar por guapo milonguero. Luego se incorporan María Elena Cosano y Oscar Huberty. (Recuerdos del país lluvioso). Recientemente con (Se busca un bandoneón) y con (Minas), del grupo también son Gabriela Castellini, Ana Del Moro, Monira Daher, Vicente Calvo, Valeria Andrinolo, Ulises Caicedo y la cellista Magdalena Aguirre.-
* DNI: 4.159.560
0 Comentá esta nota:
Publicar un comentario