Hace dos meses
El viernes pasadoPor Juan Pérez
Hace dos meses se inauguró con bombos y platillos, el Colegio 758, pero la primera nevada demuestra una serie de falencias en el edificio con una inundación en varios de sus ambientes, el SUM, las aulas, la sala de bombas, la imprenta (filtrando agua por el piso), etc.
Esto se suma a las rejillas de recupero de aire que se caen solas, el paredón exterior que se está cayendo a pedazos, el revestimiento del frente que se va cayendo, los bordes de las rejillas de desagüe exterior que ya casi no existen, los picaportes que se desueldan y se caen, los percheros que se salieron de las aulas, la caldera que de tanto en tanto hace temer por el ruido que hace y el olor a gas mal quemado que emana, la mancha de humedad en la receptoría que hace pensar que hay un caño roto en el baño de niñas, la barandas de la entrada que colocadas con tarugos pequeños esta suelta y ya se salió una vez, la sala de motores que no cierra con llave, la calefacción que no llega a la biblioteca, la mampostería que se cae muy fácilmente.
Y, etc etc. Ojalá nadie culpe a los alumnos de todo lo mencionado, porque no son ellos los culpables, sino más bien la empresa y quienes debieron controlar los trabajos en lugar de pensar en terminar un edificio bonito para un acto político. La fotos de la inundación lo dicen todo, de los otros defectos cualquiera puede buscar pruebas en el edificio con sólo un paseíto por él.
Hace dos meses se inauguró con bombos y platillos, el Colegio 758, pero la primera nevada demuestra una serie de falencias en el edificio con una inundación en varios de sus ambientes, el SUM, las aulas, la sala de bombas, la imprenta (filtrando agua por el piso), etc.
Esto se suma a las rejillas de recupero de aire que se caen solas, el paredón exterior que se está cayendo a pedazos, el revestimiento del frente que se va cayendo, los bordes de las rejillas de desagüe exterior que ya casi no existen, los picaportes que se desueldan y se caen, los percheros que se salieron de las aulas, la caldera que de tanto en tanto hace temer por el ruido que hace y el olor a gas mal quemado que emana, la mancha de humedad en la receptoría que hace pensar que hay un caño roto en el baño de niñas, la barandas de la entrada que colocadas con tarugos pequeños esta suelta y ya se salió una vez, la sala de motores que no cierra con llave, la calefacción que no llega a la biblioteca, la mampostería que se cae muy fácilmente.
Y, etc etc. Ojalá nadie culpe a los alumnos de todo lo mencionado, porque no son ellos los culpables, sino más bien la empresa y quienes debieron controlar los trabajos en lugar de pensar en terminar un edificio bonito para un acto político. La fotos de la inundación lo dicen todo, de los otros defectos cualquiera puede buscar pruebas en el edificio con sólo un paseíto por él.
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de la misma manera que con el SUM de la escuela politècnica, el representante de Obras Pùblicas sigue exponiendo argumentos para deslindar responsabilidades a las constructoras (un problemita con las veredas en el caso de la 758 o poca calidad del terreno en la Poli) y los ingenieros/tècnicos/arquitectos/inspecciones, què hacen? es que no se pueden preveer estas situaciones? o es por ensayo y error? Si sale mal lo tiramos abajo y lo hacemos de vuelta? Mientras tanto estas empresas continùan con total impunidad. Al pueblo, nos hacen creer que de los costos se hacen cargo las empresas en cuestiòn, pero a la vista de los hechos se les ofrecen otras obras con cuyos sobre-precios seguramente recuperan lo invertido en los arreglos que han tenido que hacer y màs. No quiero ser mal pensado, pero... no creo que nuestros gobernantes desconozan la calidad de construcciòn ofrecida por estos empresarios, entonces ¿còmo es que se les siguen adjudicando obras? Serà que en sus casas cuando contratan un servicio y lo pagan con dinero de su bolsillo, aunque el mismo sea malo, vuelven a contratarlo? Lo dudo. Es indignante y vergonzoso que pase esto con la obra pùblica.
Más de lo mismo y siguen...propongo que cada una de las escuelas, hospitales, oficinas, etc., describa una sola situación donde se deje traslucir la "bolsa de trabajo", que significa construir en la obra pública, pero donde se evidencie sin disfraces, la inoperancia y/o desidia de los encargados de los controles...indignante es poco!!!
Sólo una situación detallemos, y tenemos para cortar tela hasta la entrada del próximo año bisiesto... o más.Y después cantan con cara de circunstancia en los actos patrios: "sean eternos los laureles, que supimos conseguir".."Oh juremos con gloria morir"... Disculpen la sensibilidad... pero recién vengo del "el pueblo quiere saber de qué se trata"...y me avergüenza tanta vergüenza!! Salud!! y ¡¿Viva la Patria?!
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