Por Abla Carballo*
Más allá de los argumentos esgrimidos para buscar la despenalización o la desincriminación por el uso de sustancias prohibidas, no parecen serias las explicaciones que intentan descartar la nocisividad de ciertas drogas como la marihuana o desconocer el factor criminógeno de la marihuana combinada con alcohol u otras drogas.
Además que la marihuana u otras drogas, son la puerta de entrada a la desviación y marginación, que traen apareado la promiscuidad, prostitución, desadaptación social, laboral, familiar y escolar.
Por ello es importante y vital el enfoque sociológico antes que en el jurídico-penal, dicho esto en función de la sociedad argentina que presta más atención en el modelo penal y, en consecuencia, piensa que el drogadependiente es un delincuente pues la tenencia aún para consumo personal es delito. Pero no piensa en el modelo médico sanitario, el que dice que la drogodependencia es una enfermedad, por lo cual requiere tratamiento para su rehabilitación.
Los Centros de Rehabilitación y de Prevención de Adicciones son varios en el país. Muchos tercerizados y otros privados. Dicen algunas madres que en los lugares de internación no hay comida, porque no la mandan. Y agregan que en SEDRONAR, por el retraso en los pagos, los profesionales están fastidiados.
Son todas situaciones del fenómeno de las adicciones que coloca a todos quienes se ocupan del tema ante un problema de mucha complejidad.
Según el doctor Juan Alberto Yaría, catedrático de Psicopatología de las Adicciones, experto en Drogodependencias, explica que “Hay una entrada biológica psíquica de la enfermedad pero fundamentalmente una civilizacional”. También desarrollado por el profesor Edgar Morín en su texto “Una Política para la Civilización” que incorpora el tema de lo complejo. Precisamente recuerda el tema de Pascal “para comprender las partes hay que comprender el todo”, o aquel lema de Gestalt: “el todo es mayor que la suma de las partes”.
Acerca del sentido de la palabra “complejidad” Edgar Morín dice: “existen numerosos malentendidos sobre la palabra complejidad, porque hoy en día se utiliza para todo, en ciencia, en psicología, en política, en economía. La razón común de emplear esta palabra consiste en manifestar una incapacidad de explicar, un déficit de pensamiento.
De hecho, la palabra complejidad es una palabra pregunta y no una palabra respuesta, es una palabra problema y no una palabra solución. En fin, manifiesta un desafío. El pensamiento complejo es una respuesta a ese desafío. La palabra complexus que significa `tejer juntos´ reclama un pensamiento que considere los tejidos comunes y rearticule saberes separados. ¿Por qué rearticular los conocimientos? Porque nosotros estamos educados por medio de una modalidad que nos hace separar los conocimientos y sobre todo compartimentarlos, esto afecta la capacidad natural del espíritu humano para contextualizar, es decir para entregar un saber en el contexto y la estructura global de donde el ha surgido. Un pensamiento complejo se esfuerza por articular e integrar los modos de pensamiento simples en una concepción más rica. Comprender significa un nuevo aprendizaje pues nosotros estamos formados en un sistema de enseñanza que privilegia la separación, la reducción, la compartimentación de los saberes fragmentando y alienando nuestro modo de pensar, por consecuencia una reforma del pensamiento es imprescindible”.
Conclusión: Los nuevos tiempos enfatizan la necesidad imperativa de disociar las causas sociales de la responsabilidad individual, conforme a la visión neoliberal. La “cultura de la indulgencia” promovida por los programas de prevención y tratamiento social fue reemplazada por un nuevo “principio de realidad”. Definido el enemigo interno, la caza de niños y jóvenes forma parte de la nueva organización del poder; para los que la vieja familia y la vieja escuela son demasiado laxas e ineficaces.
De allí entonces, cómo responder al ¿Me Quieres? Demuéstralo. Simbolizada por la educación, la salud, la asistencia y la vivienda social. Pero... sustituida rápida y distraídamente por policía, justicia, prisión, cada vez más activa.-
* DNI 4.159.560
Más allá de los argumentos esgrimidos para buscar la despenalización o la desincriminación por el uso de sustancias prohibidas, no parecen serias las explicaciones que intentan descartar la nocisividad de ciertas drogas como la marihuana o desconocer el factor criminógeno de la marihuana combinada con alcohol u otras drogas.
Además que la marihuana u otras drogas, son la puerta de entrada a la desviación y marginación, que traen apareado la promiscuidad, prostitución, desadaptación social, laboral, familiar y escolar.
Por ello es importante y vital el enfoque sociológico antes que en el jurídico-penal, dicho esto en función de la sociedad argentina que presta más atención en el modelo penal y, en consecuencia, piensa que el drogadependiente es un delincuente pues la tenencia aún para consumo personal es delito. Pero no piensa en el modelo médico sanitario, el que dice que la drogodependencia es una enfermedad, por lo cual requiere tratamiento para su rehabilitación.
Los Centros de Rehabilitación y de Prevención de Adicciones son varios en el país. Muchos tercerizados y otros privados. Dicen algunas madres que en los lugares de internación no hay comida, porque no la mandan. Y agregan que en SEDRONAR, por el retraso en los pagos, los profesionales están fastidiados.
Son todas situaciones del fenómeno de las adicciones que coloca a todos quienes se ocupan del tema ante un problema de mucha complejidad.
Según el doctor Juan Alberto Yaría, catedrático de Psicopatología de las Adicciones, experto en Drogodependencias, explica que “Hay una entrada biológica psíquica de la enfermedad pero fundamentalmente una civilizacional”. También desarrollado por el profesor Edgar Morín en su texto “Una Política para la Civilización” que incorpora el tema de lo complejo. Precisamente recuerda el tema de Pascal “para comprender las partes hay que comprender el todo”, o aquel lema de Gestalt: “el todo es mayor que la suma de las partes”.
Acerca del sentido de la palabra “complejidad” Edgar Morín dice: “existen numerosos malentendidos sobre la palabra complejidad, porque hoy en día se utiliza para todo, en ciencia, en psicología, en política, en economía. La razón común de emplear esta palabra consiste en manifestar una incapacidad de explicar, un déficit de pensamiento.
De hecho, la palabra complejidad es una palabra pregunta y no una palabra respuesta, es una palabra problema y no una palabra solución. En fin, manifiesta un desafío. El pensamiento complejo es una respuesta a ese desafío. La palabra complexus que significa `tejer juntos´ reclama un pensamiento que considere los tejidos comunes y rearticule saberes separados. ¿Por qué rearticular los conocimientos? Porque nosotros estamos educados por medio de una modalidad que nos hace separar los conocimientos y sobre todo compartimentarlos, esto afecta la capacidad natural del espíritu humano para contextualizar, es decir para entregar un saber en el contexto y la estructura global de donde el ha surgido. Un pensamiento complejo se esfuerza por articular e integrar los modos de pensamiento simples en una concepción más rica. Comprender significa un nuevo aprendizaje pues nosotros estamos formados en un sistema de enseñanza que privilegia la separación, la reducción, la compartimentación de los saberes fragmentando y alienando nuestro modo de pensar, por consecuencia una reforma del pensamiento es imprescindible”.
Conclusión: Los nuevos tiempos enfatizan la necesidad imperativa de disociar las causas sociales de la responsabilidad individual, conforme a la visión neoliberal. La “cultura de la indulgencia” promovida por los programas de prevención y tratamiento social fue reemplazada por un nuevo “principio de realidad”. Definido el enemigo interno, la caza de niños y jóvenes forma parte de la nueva organización del poder; para los que la vieja familia y la vieja escuela son demasiado laxas e ineficaces.
De allí entonces, cómo responder al ¿Me Quieres? Demuéstralo. Simbolizada por la educación, la salud, la asistencia y la vivienda social. Pero... sustituida rápida y distraídamente por policía, justicia, prisión, cada vez más activa.-
* DNI 4.159.560
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Habla... fumate uno a ver si lo que escribís es más entretenido...!!!
A.V.
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