Por Anselmo Montes *En estos días los chubutenses han podido ver al gobernador Das Neves en el predio de la Sociedad Rural de Palermo junto a los principales referentes de la misma, buscando favorecer y sumar con su presencia al arco opositor liderado por esa corporación oligárquica, golpista del pasado y presente de la historia argentina.
Es evidente y no quedan dudas que, para el gobernador Das Neves, en su infantil carrera presidencial, es lo mismo lo bueno que lo malo, lo justo que lo injusto, lo nacional que lo antinacional, la liberación o la dependencia. Todo vale en su ambición personal.
Ese comportamiento político y administrativo habla por sí solo de qué lado está en la confrontación ideológica del pueblo argentino con el imperio.
Vale recordar que al poco tiempo de asumir la gobernación consumó la entrega del petróleo a la empresa multinacional británica Pan American Energy, firmando un contrato realizado entre gallos y media noche.
Seguidamente emprendió el distanciamiento con el Gobierno Nacional criticando la resolución 125 de retenciones móviles al campo congraciándose con la Sociedad Rural. Para mimetizar esa conducta, acusó ante el pueblo chubutense que el Gobierno Nacional frena los recursos que le corresponden a la provincia de Chubut.
Con esa burda justificación endeudó por 300 millones de dólares en bonos a la Provincia con la garantía de las raquíticas regalías petroleras negociadas en dicho contrato por 40 años, comprometiendo financieramente a las administraciones futuras.
Por último, disfrazado de su barroco accionar político le abre el territorio del Chubut a las empresas mineras multinacionales expertas en saqueo y contaminación ambiental, sin protección jurídica y sin la necesaria intervención del Estado para controlar empresas corruptas y corruptoras que cuentan con más capital que el propio poder concedente.
* Responsable Político PSA del Chubut
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