Por Espacio Docente
Ante el balance político del primer año de gestión de la conducción verde de Atech, creemos importante señalar algunos errores conceptuales importantes y tergiversaciones de datos referidos a los incrementos salariales. A saber:
En primer lugar, considerar a la paritaria como “arma fundamental de la clase trabajadora” es un error conceptual ya que en todo caso, constituye una táctica o herramienta de negociación, y representa una conquista histórica del movimiento obrero organizado de nuestro país, pero de ninguna manera es una forma de lucha. Vale aclarar que las huelgas sí constituyen uno de los medios de lucha con los que cuenta la clase trabajadora, (aunque no el único) y que es en ellas y en cada instancia en que los trabajadores se organizan y se manifiestan, donde se desarrolla la conciencia sobre la importancia de la unidad para sostener cualquier tipo de lucha tendiente a lograr condiciones dignas de trabajo y de existencia.
Como segundo punto en cuestión, nos encontramos con el nefasto balance referido a los incrementos salariales, que hasta la fecha no son tales ya que como expresaran los mismos integrantes de la conducción del gremio, los incrementos en el básico testigo y la incorporación de sumas fijas se concretaran recién en el mes de julio del año 2011. Es decir que estamos hablando de algo, que aun los trabajadores de la educación no han visto cristalizar en un aumento real de su salario. A esto se suma que se incluye en ese mismo balance de la conducción 2010, lo que se discutirá el próximo año en relación a la incorporación del presentismo de $125 al básico testigo. Seguimos hablando de supuestos, de logros que no son tan logros ya que no han sido concretados. La pregunta sería: ¿Acaso un balance no se realiza sobre la base de los objetivos alcanzados, de los puntos que adquirieron forma real y concreta? Entonces, ¿cómo explicar, esta inescrupulosa tergiversación de información por parte de la conducción verde de la Atech? La penosa conclusión a la que arribamos, es que no es más que un manejo político para ocultar su propia funcionalidad con el gobierno y su falta de real compromiso con la lucha en defensa de los intereses de los/as trabajadores/as de la educación. Vemos con pesar que quienes dicen representarnos, no dudan en darnos la espalda y sentarse a negociar a puertas cerradas con las autoridades gubernamentales, unas miserables migajas que no alcanzan para paliar el proceso inflacionario que se come nuestro salario día a día.
Desde Espacio Docente consideramos que el sindicato es la forma más alta de organización de los trabajadores, motivo por el cual deben ser amplios, democráticos y su dirigencia debe mantenerse siempre en contacto con el sentir y pensar de sus bases. Su rol fundamental es defender los intereses económicos y mejorar las condiciones laborales de quienes representa, en su permanente lucha contra abusos, atropellos de los derechos y por las reivindicaciones propias del sector.
Nota relacionada: ATECh: resumen del primer año de gestión
Ante el balance político del primer año de gestión de la conducción verde de Atech, creemos importante señalar algunos errores conceptuales importantes y tergiversaciones de datos referidos a los incrementos salariales. A saber:
En primer lugar, considerar a la paritaria como “arma fundamental de la clase trabajadora” es un error conceptual ya que en todo caso, constituye una táctica o herramienta de negociación, y representa una conquista histórica del movimiento obrero organizado de nuestro país, pero de ninguna manera es una forma de lucha. Vale aclarar que las huelgas sí constituyen uno de los medios de lucha con los que cuenta la clase trabajadora, (aunque no el único) y que es en ellas y en cada instancia en que los trabajadores se organizan y se manifiestan, donde se desarrolla la conciencia sobre la importancia de la unidad para sostener cualquier tipo de lucha tendiente a lograr condiciones dignas de trabajo y de existencia.
Como segundo punto en cuestión, nos encontramos con el nefasto balance referido a los incrementos salariales, que hasta la fecha no son tales ya que como expresaran los mismos integrantes de la conducción del gremio, los incrementos en el básico testigo y la incorporación de sumas fijas se concretaran recién en el mes de julio del año 2011. Es decir que estamos hablando de algo, que aun los trabajadores de la educación no han visto cristalizar en un aumento real de su salario. A esto se suma que se incluye en ese mismo balance de la conducción 2010, lo que se discutirá el próximo año en relación a la incorporación del presentismo de $125 al básico testigo. Seguimos hablando de supuestos, de logros que no son tan logros ya que no han sido concretados. La pregunta sería: ¿Acaso un balance no se realiza sobre la base de los objetivos alcanzados, de los puntos que adquirieron forma real y concreta? Entonces, ¿cómo explicar, esta inescrupulosa tergiversación de información por parte de la conducción verde de la Atech? La penosa conclusión a la que arribamos, es que no es más que un manejo político para ocultar su propia funcionalidad con el gobierno y su falta de real compromiso con la lucha en defensa de los intereses de los/as trabajadores/as de la educación. Vemos con pesar que quienes dicen representarnos, no dudan en darnos la espalda y sentarse a negociar a puertas cerradas con las autoridades gubernamentales, unas miserables migajas que no alcanzan para paliar el proceso inflacionario que se come nuestro salario día a día.
Desde Espacio Docente consideramos que el sindicato es la forma más alta de organización de los trabajadores, motivo por el cual deben ser amplios, democráticos y su dirigencia debe mantenerse siempre en contacto con el sentir y pensar de sus bases. Su rol fundamental es defender los intereses económicos y mejorar las condiciones laborales de quienes representa, en su permanente lucha contra abusos, atropellos de los derechos y por las reivindicaciones propias del sector.
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