Opinión: “Acerca del trabajo cultural y dos funcionarios del área”, por Jorge Oriola

Por Jorge Oriola *

Quiero destacar en esta fecha a dos compañeros, en parte compañeros de ideas y también de rutas, ansiedades, metas... Me refiero a Jorge Fiori y Claudio Dalcó. Ambos, durante largo tiempo, se desempeñaron en el área de Cultura, sea en el ámbito municipal como en el provincial, y en este caso, uno que deja y el otro que asume en su lugar. Y les agradezco, seguramente en nombre de muchos y de gran parte de ese colectivo a veces difuso que es denominado comunidad, por las horas, los meses, el trabajo, la tenacidad, la apertura, la buena onda, la sana preocupación por hacer, la importante tarea de abrir puertas y tender puentes para que otros, muchos, puedan-podamos ser incluidos en las tareas, y por considerar y practicar eso de que la "cultura popular" que no se lleva mal con lo más selecto, lo clásico, lo mal llamado de sectores privilegiados.

Seguro que hay críticas, tareas inconclusas, objetivos no logrados; seguro que en el camino quedaron pendientes nombres, acciones, trabajos. Pero es mucho lo realizado. Es cierto que una parte del mérito lo llevan quienes desde un cargo superior los eligieron y apostaron por ambos; del mismo modo, la jerarquización del rol y el aumento notorio del presupuesto para dichas áreas; también es real que desde Nación hubo siempre aportes, envíos de materiales, giras, películas, teatro... pero las cosas se hacen y bien cuando además o fundamentalmente hay ganas de trabajar y compromiso, y no solamente político sino social.

Encuentros de escritores, Fondo Editorial Provincial, compra de libros a autores regionales, subsidios, Congresos de diversas disciplinas, en especial el de Historia que cada dos años hacemos en Trevelin, Encuentro de Ciencias Sociales en Esquel, Ferias del libro,obras de teatro, giras de músicos de todos los géneros, apoyo a las danzas, talleres de escritura, mímica, teatro, oficios, apoyo a bibliotecas populares, campeonatos Evita, el protagonismo reconocido a barrios y pueblos del interior, edificios nuevos que integran archivos, bibliotecas y talleres, centros culturales como Melipal, museos, documentales de jóvenes, el apoyo al folklore... y cuántas actividades más que uno olvida brevemente.

Lo más importante, creo, esa forma de llegar a la gente, de convocar, hacer, abarcando no una o dos disciplinas o lenguajes sino todo y poniendo en vidriera todo lo que se acercaba o era apoyado desde otras dependencias. Y la metodología de abrir puertas y facilitar la participación de los que también tienen-tenemos ganas...

Gracias Jorge, y aguardamos encontrarnos con nuestro último trabajo en conjunto, ese álbum histórico-fotográfico provincial que sólo por ese espíritu perfeccionista que te ataca siempre aún estarás revisando. Gracias Claudio, por tanta dedicación y afecto y seguramente seguirás en nuevos rumbos con las mismas características de trabajo. Creo que han devuelto con creces lo que en Uds. habíamos, muchos de nosotros, depositado en materia de confianza hace años.

* Historiador