Por Ángel Callupil
Este miércoles 20 se cumple un nuevo aniversario de la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CIDN) y como hace ya diez años en la capilla Don Bosco, se realizará la tradicional "movida barrial por los derechos de los chicos"
Desde las 17 hs. en el patio de la capilla y en la calle habrá espacio de expresión de los chicos, juegos, música y la presentación de la murga "los desfachatados" con quienes luego se realizara una recorrida-marcha por las calles del barrio.
La convocatoria es para seguir diciendo con nuestras humildes fuerzas, que esas bellas palabras de la Convención de los Derechos del Niño, no estén lejos de la vida de nuestros pibes.
Creemos firmemente que la infancia es el terreno más fértil para sembrar inteligencia, trabajo, creatividad, justicia, democracia.
Como sociedad estamos invitados a poner en sus manos herramientas que les permitan vivir y crecer con dignidad.La infancia no espera.
Nuestro abrazo a los niños, niñas y adolescentes, quiere seguir transformándose en reclamo, que sigue diciendo que no queremos ni un pibe menos, que nos arrebate la droga, la violencia institucional, las condiciones de vida que no se merecen.
Es posible soñar otro tiempo. No estamos ni lejos ni cerca de ese futuro, estamos en el tiempo exacto para diseñar la tierra y el cielo que queremos.
Este miércoles 20 se cumple un nuevo aniversario de la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CIDN) y como hace ya diez años en la capilla Don Bosco, se realizará la tradicional "movida barrial por los derechos de los chicos"
Desde las 17 hs. en el patio de la capilla y en la calle habrá espacio de expresión de los chicos, juegos, música y la presentación de la murga "los desfachatados" con quienes luego se realizara una recorrida-marcha por las calles del barrio.
La convocatoria es para seguir diciendo con nuestras humildes fuerzas, que esas bellas palabras de la Convención de los Derechos del Niño, no estén lejos de la vida de nuestros pibes.
Creemos firmemente que la infancia es el terreno más fértil para sembrar inteligencia, trabajo, creatividad, justicia, democracia.
Como sociedad estamos invitados a poner en sus manos herramientas que les permitan vivir y crecer con dignidad.La infancia no espera.
Nuestro abrazo a los niños, niñas y adolescentes, quiere seguir transformándose en reclamo, que sigue diciendo que no queremos ni un pibe menos, que nos arrebate la droga, la violencia institucional, las condiciones de vida que no se merecen.
Es posible soñar otro tiempo. No estamos ni lejos ni cerca de ese futuro, estamos en el tiempo exacto para diseñar la tierra y el cielo que queremos.
0 Comentá esta nota:
Publicar un comentario