Por Bloque de Diputados de la UCREl Bloque de Diputados de la UCR ha sido objeto de falsas e injustas acusaciones en virtud del fracasado tratamiento legislativo de la Ley de Educación y, por ese motivo, no está dispuesto a justificar las mentiras y menos que se pretenda justificar con ellas a las falencias propias.
Vale reiterar en esta oportunidad la posición que asumió desde el mismo momento en que ingresó el proyecto y que mantuvo hasta el día de su tratamiento: La Unión Cívica Radical apoyaría la sanción de la ley con las observaciones de aquellas cuestiones en las que entendíamos fuera necesario.
Esa decisión estuvo basada exclusivamente en que el proyecto había sido consensuado con distintos sectores de la sociedad. El mismo había tenido una construcción participativa en la que los propios gremios que representan a los docentes se manifestaron en su apoyo.
Por respeto a ese consenso y ante la realidad de que compartíamos con amplitud esa propuesta decidimos votarla.
En la sesión del jueves 9 de septiembre fracasó su tratamiento como producto de que se rompió ese consenso. Esa ruptura no es responsabilidad del Bloque Radical. Quienes deberían buscar las causas son los propios actores del oficialismo que son quienes modificaron el proyecto consensuado y que motivó la reacción de la Asociación de Trabajadores de la Educación (ATECH) quienes manifestaron su frustración por las modificaciones que cambiaban sustancialmente la iniciativa de la que ellos participaban.
Ante esa circunstancia igualmente no nos opusimos a la Ley, lo que propusimos es su retorno a Comisión para que recupere el consenso perdido.
En definitiva propusimos lo que después el oficialismo hizo haciéndolo aparecer como mérito de la Ministra de Educación.
La ley de Educación como política de Estado debe ser votada en forma unánime. Estamos dispuestos a hacerlo pero con una condición necesaria. Si la ley es de todos, no debe tener nombre propio, como se hizo, ni intentos de cambiarlo para ponerle sellos personales como también se procuró hacer.
Esto se evita dándole el debido tratamiento legislativo a una ley tan trascendente, no como el que ha tenido en el cual nuestra participación ha estado en la medida exacta de lo que el propio Poder Legislativo hizo en el tema.
El Bloque de la Unión Cívica Radical renueva su compromiso con el consenso pero también se compromete a que el mismo no pretenda ser cambiado en forma inconsulta en la Comisión de Educación de la Cámara.
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