Enviado por Ángel Callupil
Este aniversario del golpe militar de 1976, nos encuentra
nuevamente con un sabor agridulce, a los tantas y tantos cristianos que
militamos en los Derechos Humanos, porque Memoria, Verdad y Justicia, no logran
transitar aún caminos entrelazados para todos los argentinos.
Volvemos a reiterar, como lo hicimos en diciembre del año
pasado, que “con dolor, vemos que hay nudos del entramado de nuestra
democracia, que hacen a las violaciones de Derechos Humanos, que aún no se han
desatado, y que continúan generando violencia e injusticia”. Y la violencia
crece, cuando el Estado está ausente: faltan políticas públicas que garanticen
a todos el acceso a una vida digna, faltan políticas públicas que brinden un
horizonte y un proyecto de vida a los jóvenes, faltan políticas públicas que
permitan crecer a nuestros niños en un hogar donde se come en la mesa todos los
días. Un Estado presente nos da seguridad. Y a ese derecho aspiramos todos. 100
días del nuevo gobierno en la provincia del Chubut, aún no generaron las
expectativas de “aires nuevos” para los que entendemos la seguridad en estos
términos.
Nos preocupan, además, los hechos de violencia ocurridos en
nuestra ciudad en el último tiempo, donde de una u otra manera, “la muerte
ronda a la vuelta de la esquina”. Nos solidarizamos con tantas familias que
padecen la falta de verdad en hechos muy dolorosos para nuestra comunidad.
Muertes no esclarecidas, maltratos y vejaciones, abandono y prepotencia, nos
acercan una única certeza: Si no llegamos a la Verdad , no hay Justicia
para los pobres.
Por eso, en este 24 de marzo, reiteramos lo expresado hace
un año atrás: mantener viva la llama de la MEMORIA, buscar incansablemente la VERDAD , y abrazar la JUSTICIA , como único
camino para la paz.
Que el Dios de la vida, que va haciendo la historia en el
corazón de su pueblo, nos ayude a mantener encendida la luz de la verdad y la
justicia en medio de las tinieblas de la impunidad y corrupción que intentan
cercarnos.
Por un pueblo que sigue caminando con la bandera de los
30.000 desaparecidos, y no quiere más muertes en democracia, MEMORIA, VERDAD Y
JUSTICIA.
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